《 Peter Pan 》 ❝ Dulce Venganza ❞

26. 「 Que comience el juego 」

Antes de que lean quiero aclara el significado de la palabra albur (frases que tienen un doble sentido) porque es una palabra mexicana pero no estoy segura de que se use en otros países y la use en este capitulo. No más para aclarar (((:

-Toma, princesa- te dijo Peter dándote un plato de comida.

-Gracias, Peter- le agradeciste agarrando el plato y poniéndolo en la mesa frente a ti mientras el ojiverde se sentaba a tu lado. Adara, Félix y Tigrilla estaban sentados del otro lado de la mesa.

-Quiero un novio... -lloriqueo Adara viéndolos con ojos soñadores. Sonreíste divertida ante el comentario y bajaste la mirada a tu plato para ver a Matías jugar con su comida. Peter sonrió de lado divertido del comentario de Adara y se reacomodo en su lugar.

-Te tengo una sorpresa- te dijo Peter causando que levantaras la mirada.

-¿Qué clase de sorpresa?- preguntaste asombrada antes de comerte un fresa.

-Un juego que estoy seguro que te va a gustar- dijo él dejándote algo confundida.

-¿Eso es un albur o estas hablando en serio?- le preguntaste entre risas.

-Esta hablando en serio- se rio Edmund caminando hacia ustedes junto a Jacobo.

-Se llama piratas y fugitivos- aclaro Jacobo mientras Edmund se sentaba a tu lado.

-¿Cómo se juega?- pregunto Tigrilla viendo como Jacobo se sentaba a lado del ojiverde.

-Hay dos grupos, los fugitivos y los piratas. Los piratas tienen que atrapar a todos los fugitivos. Pan y yo estaremos a cargo de los piratas- explico Jacobo apuntando a Peter.

-Y los fugitivos tienen que robar el tesoro de los piratas sin ser atrapados- continuo Edmund-. Quien cumpla su objetivo primero gana.

-Edmund y tu serán capitanes de los fugitivos- te dijo Peter.

-Oh, eso me gusta- dijiste con una sonrisa ladina volteando hacia Edmund-. Si perdemos será tu culpa.

(...)

Cuando los cuatro terminaron de comer, todas las personas que iban a jugar se reunieron en el centro de la aldea para aclarar las reglas del juego. Los grupos ya estaban divididos en fugitivos y piratas. Ambos grupos eran de veinte personas y en el centro se encontraban Jacobo y Edmundo explicando las reglas. Al parecer Solomon y Akando iban a ser jueces, Solomon se iba a asegurar que ningún fugitivo se escapara después de ser atrapado mientras Akando vigilaría el tesoro de los piratas. Si los fugitivos lo abrían, Akando tocaría el cuerno de batalla para anunciar que los fugitivos habían ganado.

-...los fugitivos se pueden defender con las espadas- explicaba Jacobo-, pero una vez que son vencidos tienen que ir a la cárcel junto al pirata que los venció y no hay manera de regresar al juego.

-¿Y cómo sabemos si nos vencieron?- pregunto Ryan a lado tuyo.

-Si pierden su espada, los vencieron- respondió Jacobo.

-También si nos tiran al piso o si nos dejan sin movimientos- añadió Edmund.

-También aplica para nosotros- dijo Jacobo-. Pero en vez de ir a la cárcel tenemos que darles un minuto para que puedan escapar. ¿Qué me falta?- le pregunto a Edmund.

-Creo que nada... solo que el juego comienza una vez que Akando haga sonar el cuerno- dijo el pelinegro.

-Pues entonces comencemos, los piratas síganme a mi- dijo el rubio caminando hacia su zona.

-Y los fugitivos a mi- indico Edmund yendo hacia la zona contraria.

Que comience el juego.