Segundo libro de la saga destino. Cinco años han pasado desde que Irina tomó una de las decisiones más difíciles de su vida, abandonar a Enzo. Dicen que dejar ir a quien amas es una forma cobarde de amar, pero ella sabía que debía dejarle ir para que cumpliese su sueño, a pesar de lo que conllevaría perderle. ¿Cómo vive alguien con el corazón destrozado por haber dejado ir al amor de su vida? Ella se preguntaba lo mismo cada día, pero nunca encontraba respuesta.