Savage🐾 Taegi +18 #Wattys2022

XXIX

—¿Qué te dijo tu gatito? —estaba picando algunas verduras para el platillo que Nam eligió, ya que se necesitaban.

—¿Eh? —fruncí el ceño sin mirarlo y aparté los trozos de zanahoria que ya tenía picados para empezar a cortar un cebollín.

—Tu híbrido, parecía que lloró. —me mordí el labio inferior mientras seguía picando. —Tenía los ojos rojos, las mejillas húmedas y no me insultó como de costumbre.

—Mmm... —fue mi respuesta.

—¿Problemas en el paraíso? ¿Hizo algo malo? ¿Terminó antes que tú? ¿Le darás un castigo sexual por lo que hizo? —suspiré cerrando mis ojos mientras le entregaba el cuchillo golpeándolo lateralmente contra el pecho del mayor.

—Cierra el hocico de zorra sidosa que tienes y lava eso.

Me dio una mirada y sonrisa burlesca mientras obedecía. Vertí las verduras en una cacerola para después entregarle la tabla de picar para que la lavara también. Saqué la carne de la nevera para poder picarla cuando él terminara su tarea.

—Oye, ¿tú fuiste el imbécil que le dijo a la empleada de esa electrónica que Jungkook era mi híbrido?

—Fue Yoongi, se puso celoso... —hablé algo molesto mientras cortaba con más fuerza la carne.

—¡Awww! —exclamó exageradamente. Le di una mirada cansada y vi cómo ponía sus dos manos en sus mejillas para darle más énfasis a su actuación. —Al parecer le gustas al gatitooo~.

—¿Puedes dejar de hablar de él ya? —clavé el cuchillo en la tabla mientras empujaba a Namjoon para que se quitara del camino para poder vaciar la carne que había tomado en mis manos en la misma cacerola de las verduras.

—Solo me callo porque tienes un cuchillo... —ignoré sus burlas estúpidas y seguí cocinando.

Aunque era una buena pregunta...

¿Cómo castigaría a Yoongi? Por que lo castigaría, ¿cierto?...

🍛

—Llama a los otros dos para que vengan a comer. —le pedí a Namjoon mientras ponía los platos en la mesa.

—Se dice por favor, zorra mal agradecida. —a pesar de lo que dijo se dirigió a mi habitación.

—Lo que tú digas. —seguí acomodando los platos junto con los cubiertos y bebidas en lo que llegaban los demás.

Me senté en una de las sillas que se encontraban en los extremos del comedor. Espero que Yoongi no se quiera sentar cerca de mí.

Lo amo, pero en estos momentos necesito mi espacio, él es libre de hacer lo que quiera pero eso no significa que no me duela.

Los tres se encaminaron al lugar del comedor. El mismo donde el día anterior Yoongi y yo habíamos... Ah. Le di una mirada suplicante a Namjoon y milagrosamente pareció entenderla pues se sentó en una de las sillas de la esquina, quedando a mi lado diagonalmente.

Yoongi pareció molestarse ante eso pero se sentó al otro lado, a lado de Namjoon, dejando a Jungkook solo en las sillas que se hallaban a mi lado derecho.

Claro, Jungkook también se había bañado...

—Yoongi... —Jungkook miró con suplica al tigre. Quería que se sentara a su lado...

No me di cuenta de que estaba apretando mi mandíbula hasta que mis dientes hicieron ruido, por suerte nadie lo notó.

No puedo creer que esté celoso de un niño... ¿Así se sentía Yoongi cuando Jungkook me decía TaeTae o yo lo llamaba Kookie?

—Siempre me siento aquí, me gusta este lugar. —Yoongi respondió con indiferencia mientras empezaba a comer. Curiosamente ese era el lugar donde se había sentado a desayunar el día anterior, así que perfectamente podría ser verdad.

Excepto que no lo era, casi nunca comemos en la mesa.

¿Ahora se arrepentía de lo que hizo?...

—Si quieres puedo sentarme yo a tu lado, Kookie. —me ofrecí amablemente. Así quedaría frente a Namjoon, ya que Jungkook estaba frente a Yoongi.

El conejo pareció decepcionado. Con incomodidad su mirada huyó de mí.

—N-no, gracias hyung... Mejor yo me moveré a un lado de Yoongi. —Jungkook se levantó de su asiento. Tomó su plato y vaso antes de dirigirse al asiento a un lado del tigre y sentarse en él.

Seguimos comiendo, mayormente solo hablábamos entre Nam y yo. A veces Yoongi me incluía en su conversación o más bien interrogatorio por parte de Jungkook hacia él, queriendo mi atención, pero me limitaba a responder cortantemente.

Hasta que a Namjoon se le ocurrió la gran idea de contar chistes...

—¡Tengo otro, tengo otro! —todos nos quedamos callados esperando lo inevitable. —¿Sabían que 자살요 suena como "ya salió" en español? JAJAJAJA

Todos nos quedamos callados, a excepción de las carcajadas de Namjoon que cada vez se hacían menores.

》—¡Es gracioso porque 자살 es suicidio en español! —explicó el porqué debía ser gracioso. Esta vez Yoongi estalló en carcajadas, haciendo a Namjoon acompañarlo nuevamente.

Cuando las carcajadas de Yoongi parecían alcanzar el punto más alto encajó en la mesa el tenedor que tenía fuertemente en su puño. Aunque... También atravesó la mano de Namjoon de paso.

Las carcajadas de Namjoon fueron reemplazadas por un grito. Todos dirigimos nuestras miradas sorprendidas hacia él y hacia el tigre.

—¿¡Q-qué te pasa maldito gato de mierda?! —Namjoon se alejó de la mesa y se levantó de golpe sosteniendo la mano en la que tenía encajado el cubierto con su mano sana.

—Lo siento, no era mi intención. No vi tu mano. —a pesar de que la voz de Yoongi sonaba convincente tenía una sonrisa cínica en su cara.

—¡A-ahg! —de los ojos de Nam se asomaban lágrimas. —Le dijiste, ¿no es así?

Jungkook se tensó en su lugar, negó con la cabeza. Por desgracia él no parecía tener los dotes de actuación que poseía Yoongi.

—¿Decirme qué? —esta vez Yoongi se levantó de su asiento bruscamente, encarando al mayor.

—Ya lo sabes. Hijo de puta. —Namjoon hizo ademan de sacarse el tenedor, grité que no lo hiciera pero me ignoró y logró su cometido.

Pensé que Nam planeaba hacerle algo a Jungkook con el tenedor por lo que me levanté mientras llamaba a mi amigo, pero nuevamente fui ignorado.

—No, no lo sé. Dímelo tú si tienes huevos. —Yoongi tomó a Namjoon por los hombros y lo empujó de regreso a su lugar inicial. Vi cómo Yeontan se acercaba a nosotros, supongo que los gritos lo alertaron.

Jungkook seguía petrificado temblando en la silla.

Esta vez Namjoon se abalanzó a Yoongi con el tenedor en mano, su sangre había escurrido tanto que ya habían gotas de ella en el suelo.

Grité temiendo por Yoongi. Aunque no parecía necesitar ayuda. Dio un tras pie pero a pesar de la diferencia de altura lo controló bien.

Tomó la muñeca de Namjoon y la torció a la vez que jalaba de su brazo para atraerlo hacia su propio cuerpo. Yoongi esquivó el cuerpo de Nam, dobló el brazo del mayor para quedar sometiéndolo desde atrás.

Con esto logró hacer que soltara el tenedor, el tigre lo tomó antes de que cayera al suelo y lo lanzó a otra parte de la casa. Sin querer soltó a Namjoon, permitiéndole darse la vuelta e incorporarse.

Namjoon tomó a Yoongi del cuello y lo subió al comedor, quedando así sentado. Varios vasos cayeron sobre la mesa, tirando el líquido que contenían sobre la misma. Algunos platos cayeron al suelo haciendo más escándalo, Yeontan ladró.

Yoongi no perdió tiempo y él hizo lo mismo pero presionando sus garras contra la delicada piel de Nam.

—Si me haces daño sabes lo que pasará, ¿verdad? —Namjoon habló con una sonrisa terrorífica. Yoongi gruñó, su agarré pareció dudar. —Con un historial como el tuyo... Seguro te alejarán de tu preciado amo y te dormirán de una vez por todas.

—No moriré sin llevarte conmigo, hijo de puta. —el tigre gruñó. Hasta a mí me intimido su voz. Las palabras de mi amigo me habían hecho temblar.

—Como quieras, gata. —antes de que algo más pudiera pasar me acerqué con rapidez y tomé a Namjoon del cabello. Lo jale hacia atrás. Afortunadamente soltó a Yoongi y retrocedió, ambos empezaron a toser.

No espere a que Namjoon se repusiera antes de darle un golpe con todas mis fuerzas en su cara. Me sorprendió que cayera al suelo pero no me importó.

—No sé que mierda te pase o qué crees que Jungkook le haya dicho a Yoongi. Pero no permitiré que le vuelvas a poner una mano encima a Yoongi, ¿entiendes? —no esperé una respuesta y lo levanté del suelo empujándolo hacia la puerta. —Ve al hospital a que te revisen la mano y de paso también la cabeza, no regreses hasta que te hayas calmado. Será mejor que Jungkook duerma hoy aquí.

—Ojalá tu linda puta te defienda así cuando alguien trate de matarte. —escupió sangre en el suelo de mi casa y finalmente se largó.

Cerré la puerta y al darme la vuelta pude observar a un Yoongi aún jadeante, un muy asustado conejo y un Yeontan ajeno a la situación.

—Creo que deberías revisar su cuello y tal vez ponerle una pomada, Kookie. —me dirigí hacia mi despacho sin más. Escuché que Yeontan me seguía los pasos. —Al fin que ya tienes experiencia... —murmuré para mí.

Al llegar dejé que el cachorro pasara antes de cerrar la puerta. Caminé por el despacho hasta llegar a mi sillón donde me dejé caer.

Tomé a Yeontan en mis brazos y lo coloqué en mi pecho para darle cariños y jugar con él.

🐯

—Estoy bien, Jungkook. —dije con fastidio tratando de alejar las manos del menor de mí. No sé cuántas veces había repetido ya que no tenía nada.

—TaeTae dijo que te pusiera pomada en el cuello, se molestará si no obedecemos. —el menor dejó caer sus brazos e hizo un puchero.

No le digas TaeTae...

Suspiré e incliné un poco mi cabeza para que el menor pusiera la crema en mi lastimado cuello.

El menor soltó un chillido feliz y empezó su labor. Ambos estábamos sentados en el sillón, creo que se nos fue el hambre a ambos, además de que nuestros platos estaban o aplastados o en el suelo tirados.

Ah... Yeontan fue con él, ojalá Tae pudiera entenderlo para que le dijera cosas buenas de mí...

Di un brinco en el sillón. Mi repentina acción asustó a Jungkook quien me miró con susto.

Soy un genio.

—Jungkook, necesito que te quedes aquí. —inmediatamente el desacuerdo fue plasmado en la cara del conejo. —Voy a ir a espiar a Tae.

—¡Yo también quiero ir! —chisté para que guardara silencio mientras lo tomaba de los brazos.

—No, iré yo. Quédate aquí, bebé. —me puse de pie sintiendo la crema presente en mi cuello. Los ojos del conejo se iluminaron.

—Solo si me das un besito. —una tierna sonrisa se abrió paso en los labios de Jungkook, eso me hizo sentir aún peor.

—Te lo daré cuando regrese, pero solo si te quedas aquí. Serás bueno y obedecerás, ¿verdad, bebé? —mis palabras complacieron al menor ya que inmediatamente asintió con entusiasmo.

Así finalmente dejé a Jungkook sentado en el sillón.

Casi corriendo llegué a la puerta del despacho de Tae. Inmediatamente me arrodille, mis orejas se removieron para empezar a prestar atención a la grave voz que se escuchaba dentro.

—...pudimos haber encontrado una solución para esto juntos, ¿no lo crees,Tannie? —Taehyung estaba hablando con el pulgoso. Seguramente acariciándolo sobre su regazo... Maldito.

—Claro que hay formas más razonables de resolver esto, pero el gato es un puto imbécil. No sé qué le ves, la verdad. Yo soy mucho más tierno. —mis dientes se apretaron en mi mandíbula. ¡El hijo de puta estaba hablando mal de mí!

Aunque claro, Taehyung solo había escuchado "guau, guau".

—Sí, bebé. Tienes razón... Debo perdonarlo, de todas formas lo amo y sé que no lo hizo con mala intención. —mi ceño se relajó al igual que mis colmillos al escuchar las palabras de mi amo.

—¡No! Haz que pague lo que te hizo. No te merece, TaeTae. —hablaré con ese estúpido perro después.

—Pero aún así... Me siento triste... ¿Tan fácil es para él aceptarlo a él pero no a mí?

No... No es eso, TaeTae.

》—Sabía que algo así podía pasar, por algo no aceptó ser mi novio... Pero... —Tae no dijo nada más.

—No llores, TaeTae... No merece tus lágrimas... ¿Quieres que orine su almohada? —Taehyung rio suavemente, supongo que Yeontan hizo ruidos graciosos al decir eso.

—Aww... Bebé, gracias por tratar de animarme. —escuché como Taehyung se levantaba y caminaba por la habitación.

¿Debería de irme?

》—¿Sabes qué
,bebé? Castigaré a Yoongi por esto. —me alerte por sus palabras.

¿Castigarme? ¿Qué clase de castigo?

—¡Sí! Es una pena que esté escuchando esto al otro lado de la puerta. —mis ojos se abrieron con sorpresa. Claro, su olfato. —Espero disfrutes tu castigo, gato sarnoso.

—Tranquilo,Tannie. No seré tan cruel... Tal vez solo lo haga llorar.

Las palabras de Tae me sorprendieron aún más. Volví a escuchar sus pasos por lo que regresé a la sala corriendo.

¿Hacerme llorar? Joder, ¿qué le pasó a mi Taehyung?

Me aventé en uno de los lugares vacíos del sillón con brusquedad. Mi cabeza se giró hacia el lugar del que corrí, quería ver si Taehyung se había dado cuenta de que lo espié.

Escuché sus pasos pero no llegó a mi campo de vista porque mi cabeza fue bruscamente girada, encontrándome con Jungkook frente a mí y ahora notaba, sobre mí.

Iba a empujarlo pero acercó mi cara a la suya, uniendo nuestras bocas en un beso. Jungkook quería profundizarlo pero mantuve mis labios sellados.

Lo obligué a alejarse de mí. Estaba apunto de regañarlo cuando Taehyung se aclaró la garganta.

Ambos nos volteamos para mirar al humano, yo más pálido que de costumbre y Jungkook con algo de orgullo en su mirada, parecía querer retarlo.

Tae dejó a Yeontan en el suelo que hasta entonces había estado en sus brazos.

—Jungkook, ¿podrías dejarme hablar con Yoongi en la habitación? Necesito educarlo un poco... Puedes ir a jugar con Yeontan al patio u otro lugar. —el conejo asintió pero Taehyung ni siquiera estaba viéndolo. Sus ojos estaban fijos en mí, si las miradas embarazaran...

Jungkook por fin se quitó de encima. Se convirtió en conejo y ambos cuadrúpedos se dirigieron a la puerta trasera, en ella había una nueva puerta para perros así que supongo que salieron por allí.

Dejé de seguirlos con la mirada cuando note que Taehyung había empezado a caminar hacia la habitación.

Tengo miedo.

Me levanté temblando ligeramente y seguí los pasos de mi amo. Estaba esperando en la puerta, cuando entré la cerró atrás de mí pero incluyendo el seguro.

Tragué saliva.

Yo me quedé parado unos pasos alejados de la entrada al cuarto. El silencio era preocupante.

Pasaron unos cuantos segundos antes de que Taehyung diera siquiera un paso. Caminó lentamente, cuando pasó a mi lado bajé la cabeza.

¿Qué mierda me pasa? ¿Porqué me siento tan intimidado y nervioso ahora? Tae no ha hecho nada, creo que mi conciencia me está torturando...

—Desnúdate. —independientemente de sus palabras, su voz me dio escalofríos. Aunque esta vez en el buen sentido.

Decídete, ¿estás asustado o excitado?

—¿Eh?... —tal vez escuché mal.

—¿Tengo que hablar más fuerte? Desnúdate. —alcé mi cabeza. Taehyung se encontraba sentado en un sillón. Este estaba dándole la espalda a la ventana por donde yo tiraba toda la basura y teniendo vista plena de la cama.

Con duda y confusión empecé a levantar mi camisa por mi torso. Cuando la tela cayó a mis pies empecé a bajar mi pantalón lentamente al igual que mi ropa interior.

Al estar totalmente expuesto di un paso al frente, dejando mi anterior vestimenta atrás.

Una risa silenciosa me hizo temblar.

—Ni siquiera te he tocado y ya estás así...—me di cuenta de mi semi erección, alcé la vista. Me encontré con un Tae divertido, tenía su cabeza recargada sobre su mano y las piernas cruzadas. —Sobre la cama. En cuatro. Ahora. —veía a Taehyung pero seguía procesando sus palabras. Arqueó una ceja al ver que no me movía, eso me hizo reaccionar.

Algo tembloroso hice lo que me pidió, cuando estuve arriba de la cama me indicó que le diera la espalda, así que me volteé, mirando en dirección a la puerta de la habitación.

Taehyung se levantó, y empezó a caminar con pasos lentos. Alcé mi cabeza para ver lo que hacía.

—Mirada en el colchón. —sentenció sin siquiera mirarme. No obedecí, increíblemente Taehyung lo notó, ya que se giró para darme una mirada amenazante. Obedecí inmediatamente.

El mayor siguió con su sigiloso andar, cosa que solo me alteraba más. La alfombra se hundía bajo sus pies, era lo único que escuchaba.

Escuché que sacó algo de algún cajón y caminó por donde se había alejado, terminó a un lado de la cama y de mí.

Tarareó y sentí varias tiritas de piel o tal vez algún material sintético, no sabría decir con exactitud, sobre mi nuca.

Lentamente empezó a avanzar por toda mi columna vertebral, mientras Taehyung seguía sus sigilosos pasos. Me dieron escalofríos, causando que mi espalda se arqueara ligeramente.

—Escucha, pequeño... —jadee ante el apodo y la voz que Taehyung había usado. Rió silenciosamente. —Sé cuánto te gusta ese apodo... —una de las manos de Tae se deslizó por mi muslo, llegando a mi miembro. Me alarme al sentir cómo colocaba con velocidad algo que parecía tener forma de anillo.

》—Esto es lo que pasará —la mano de Tae se alejó de mi pene a la vez que el anillo comenzaba a vibrar. —guardarás silencio mientras recibes tu castigo, obedecerás a tu amo, y serás un lindo y sumiso gatito. ¿Entendido?

Asentí jadeando suavemente. Inmediatamente recibí una nalgada en mi mejilla derecha, no pude retener un gritito. Esto causó otro golpe en mi piel, pero esta vez con las tiras de piel... Un látigo.

Mordí mis dientes para no cometer otro error.

—Ya vas aprendiendo. Bien hecho, bebé. —esta vez la mano que aún seguía en mi trasero acarició mi piel, haciéndome olvidar el ardor que había sentido hace unos segundos.

¿Era normal que me sintiera feliz por el alago de Tae?

La mano que antes estaba en mi trasero tomó la base de mi cola y subió con lentitud hasta la punta.

Mierda,no.

Mordí mis dientes y tragué saliva con nervios.

》—Déjame preguntarte algo, pequeño... ¿Disfrutaste de follarte a Jungkook en mi cama? Puedes responder. —empuñó con determinación mi cola, por lo que al abrir mi boca para responder salió un gemido.

—N-no, no lo follé. Yo –Taehyung me interrumpió.

—Suficiente. —le dio vueltas lentamente a la punta de mi cola haciéndome cerrar los ojos y golpear mi frente contra el colchón. —Sí o no, era simple, ¿no?

Permanecí callado, o al menos eso trataba, era demasiado difícil contener mi voz. La mano de Tae junto las vibraciones del anillo...

—Me pregunto si podré hacer que te corras otra vez simplemente estimulando tu cola...

–¡AH! —no pude retener el gemido al sentir la calidez de la boca de Tae tomando mi cola, al igual que su lengua.

El placer de gemir no me duró mucho, esta vez mi cintura fue golpeada. No con la suficiente fuerza para lastimarme pero sí para dejar marca y sentirme aún más excitado.

La lengua de Taehyung siguió jugando con la punta de mi cola, mientras que su mano parecía querer subir a mi pezón, pero nunca lo tomó, solo acariciaba mi pecho. Gruñí.

—¿Quieres más?... —la boca de Tae se alejó del pelaje blanco con negro para hablar, bajando ahora por ella, besando y chupando. —Responde.

—¡Sí,Tae! —está vez mi glúteo izquierdo fue golpeado con el látigo.

—Recuerda con quién hablas, Yoongi... Te daré otra oportunidad. ¿Quieres más?

No entiendo...

—S-sí...

—¿Sí qué? —la mano izquierda de Tae volvió a estimular la punta de mi cola, mientras que la derecha cayó en mi muslo bajo derecho, subiendo por el mismo para separar mi mejilla.

—¡Ah! ¡Sí, amo! —no podía ver a Tae por la posición, mucho menos por tener los ojos cerrados, pero juraría que estaba sonriendo.

El pulgar de la mano que sostenía mi cola empezó a rascar el lateral de la misma. Lo hacía de manera pausada, pero me volvió loco.

—¡AH! Mmhh —inconscientemente levanté el trasero y arquee mi espalda. Esta vez como represalia por dejar salir mi voz Taehyung mordió mi trasero, una zona muy cerca de mi entrada, tentándome aún más a gritar.

Tuve que acercar una de mis manos a mi boca para callarme. Con una empuñaba las sabanas mientras que con la muñeca de mi otra mano tapaba mi boca.

—Dime, ¿lo hace mejor que yo? Puedes responder... —la lengua de Tae pasó por las seguras marcas que habían dejado sus dientes.

—¡No! —la velocidad del pulgar aumentó, se sentía jodidamente bien. —¡Ah!

—Te perdonaré ese error, solo porque tu respuesta fue concisa.

Comencé a temblar, no me faltaba mucho. Como pude guardé silencio pero esta vez eso no pareció gustarle a mi amo.

》—¿Cómo se dice cuando tu amo te está perdonando? —salté en mi lugar al sentir la fuerte mano de Taehyung ahora en mi cuello. Presionó con su pulgar ligeramente, pero cada segundo la presión crecía.

—¡G-gracias! —casi me atraganto con mi saliva. La mano en mi cuello se alejó y la velocidad volvió a aumentar, pero esta vez no se detuvo, siguió yendo más rápido.

Ya... Ya estaba por acabar. Mi ceño se frunció, iba a gritar, no podía aguantarlo.

Hundí mi cabeza en el colchón y gemí de una manera que nunca me había escuchado antes. Tae no se detuvo, así que mi acción se repitió dos veces más.

La mano de Tae se detuvo y apartó completamente de mí. No pude evitar quejarme, ganándome así otro golpe para nada doloroso.

—No olvides que este es un castigo, Yoongi. ¿Realmente pensaste que te dejaría terminar?

—P-por favor... Amo... —una de mis manos se deslizó bajo mi cuerpo para llegar a mi entrepierna, el anillo seguía vibrando.

Antes de lograr tocar mi pene mi hombro fue lastimado con el látigo, deteniendo mis acciones.

—No te di permiso de hablar. Y por supuesto que no puedes tocarte. —cerré los ojos con más fuerza mientras jadeaba contra las sabanas.

—Por favor, TaeTae... Lo siento, déjame— el sonido del impacto de la mano del mayor contra mi trasero interrumpió mis palabras.

—Parece que realmente te gusta que te golpee, ¿no es así? —esta vez sí me quedé callado, buscando más contacto contra la mano de mi amo, pero esta se alejó.—Si tanto quieres correrte, ¿porqué no vas a buscar a tu novio?

Negué con la cabeza y solloce en voz baja.

》—¿No quieres? Mmm... —Tae fingió pensar —Puedes restregarte en mí para terminar, justo como tuvo que hacerlo Jungkook. Si es que es cierto que no te lo follaste en mi cama, claro. —podía sentir que Tae estaba sentado en la cama, pero ya no me tocaba.

—No me lo follé... —dije con la mayor seriedad que pude, puesto que aún seguía con la respiración alterada.

—Como digas. Eso no me dice nada, ¿te restregarás en mí o le llamo a Jungkook? Claro, si es que realmente quieres llegar al orgasmo —Taehyung se levantó. —Sino no me hagas perder mi tiempo, tengo cosas que hacer.

Ahora con un caminar normal se empezó a acercar a la puerta. Esta vez sí levanté la mirada y sin pedir autorización tomé la muñeca de Tae y lo jalé hacia la cama, quedando sobre él.

El mayor arqueó una ceja, su expresión denotaba algo de burla. Me quedé quieto un momento esperando su permiso.

—¿Qué esperas, Yoongi? Termina... —habló con una sonrisa. Inmediatamente empecé a mover mi cadera con movimientos bruscos. Mi pene chocaba con el torso de Tae, la tela de su camisa creaba una fricción casi dolorosa, pero ayudándome a llegar al borde del orgasmo más rápido.

Escondí mi cabeza en el cuello de Tae. Seguía sin dejar salir mis gemidos. Quería pedirle que volviera a tocar esa zona de mi cola pero seguramente no querría o me diría que me callara.

La erección de Tae era palpable bajo mía, tal vez lo negaba, pero estoy seguro de que él quería follarme tanto como yo quería que lo hiciera.

Cuando finalmente terminé me di el lujo de gemir en voz alta contra el cuello de Tae, gritando también su nombre.

Estaba a punto de reprocharme nuevamente sobre abrir la boca sin su permiso, pero me le adelanté.

—¡Te amo! —gemí nuevamente contra su cuello mientras mis movimientos se hacían cada vez más lentos. El cuerpo de Tae pareció tensarse ante mis palabras, pero volví a repetirlo. —Te amo, Tae... Te amo.

Con un jadeo finalmente me aparté del cuello del mayor. Él me tomó por los brazos suavemente, uniendo nuestras miradas. Parecía querer descubrir si mis palabras eran sinceras.

》—Sé que le dije a Jungkook que lo amo —suspiré —pero lo amo como un hermano menor, nunca me sentí atraído a él sexualmente, no puedo negar que es guapo... Pero no es mi tipo.

La cara de Taehyung demostraba lo inconforme que estaba con esas palabras, por lo que seguí.

》—Taehyung. —tomé sus mejillas con mis manos, queriendo así transmitir de mejor manera mis sentimientos. —Te amo, te amo como mejor amigo, como persona, como amante. Eres todo lo que siempre necesité y lo que realmente quiero. —bajé la mirada temiendo empezar a llorar con lo que diría a continuación. —Puede que no me creas... Y tal vez esté mal, como mucho de lo que hice hoy, pero mientras Jungkook hacía todo eso... Lo único que se me pasaba por la mente eras tú. ¿Me perdonarías por traicionarte? ¿Me seguirías amando como lo has hecho desde un inicio? ¿Me regresarías al safari solo por ser un idiota sin fuerza de voluntad e ilógico?

—Yoongi, yo nunca... —lo interrumpí aún sin verlo a los ojos. Sus manos ahora acariciaban mi cintura suavemente.

—Sé que tú no eres así. No me abandonarías solo por no hacer algo que tu quieres, pero... No quería que estuvieras molesto... En serio, lo siento. No sé qué hacer para que me perdones, pero te prometo que haré todo lo—mi ya temblorosa voz fue acallada por los labios de Tae en un beso suave y rápido.

Ese gesto fue suficiente para hacerme verlo a los ojos, estaba llorando.

—No necesitas hacer nada, Yoongi... Claro que aún te amo. Nada de lo que hagas cambiará eso, no te librarás de mí tan fácilmente. —ambos reímos levemente. —Entiendo que seguramente en ese momento no sabías cómo actuar ni qué hacer para ayudar a Jungkook, siento haber reaccionado así pero claramente me dolió...

Volví a besar sus labios, esta vez limpié las cortas lagrimas que se escapaban de sus ojos.

—No llores, TaeTae... —susurré, sintiendo mis lagrimas bajar por mis mejillas.

—Es que, estoy muy feliz de que finalmente me aceptes como algo más que un amigo... —sonrió mientras limpiaba mi cara. —¿Tú porqué lloras?

—Te acepté desde hace mucho, pero no quería reconocerlo... —murmuré, aun así Tae logró escucharme gracias a nuestra cercanía. —Tenía mucho miedo... Pero también me alegra que podamos seguir juntos.

Los ojos de Tae parecieron iluminarse.

—Entonces... ¿Quieres ser mi novio, Yoongi? —nuestras narices se rozaron con lentitud, eso me dio tiempo para pensar mi respuesta.

Una respuesta que quería decir desde la primera vez que Taehyung me lo preguntó.

—Claro que sí.

Holi jsjsjs
Creo que tardé más en subir este cap... Cada vez siento que me es más difícil hacer escenas de smut,o sea, se me ocurren cosas nuevas (porque intento variar las situaciones para que no sea aburrido de leer) pero siento que lo hago muy corto y luego tengo que editarlo para que ellos no queden como adolescentes hormonales xd

En fin, el dibujo de yoongi sigue en proceso, pero posiblemente el siguiente cap lo vean.

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