Savage🐾 Taegi +18 #Wattys2022

Final (2/3)

Los días siguientes a la pequeña discusión con la trabajadora de la salud fueron algo incómodos y tensos.

Jungkook no se despegaba de Namjoon, había dejado de ponerle atención al tigre, con más razón a cualquier otra persona.

En sus pensamientos ya no existía Yoongi, solo su querido multimillonario. Aún no habían formalizado nada, pero seguían actuando como una pareja feliz, irritando a la enfermera.

Jungkook había aprendido todas las tareas que se tenían que realizar para cuidar del hombre herido, además de que su mejoría era notable, por lo que luego de unas semanas pudieron dispensar de la chica, haciendo al conejo el enfermero y cuidador personal del humano.

—Se supone que esta es la última vez que tienes que tomar este medicamento. —el peliblanco le tendió la pastilla blanca junto con un vaso de agua.

—Muchas gracias, bebé. —ambos se sonrieron con amor. Los ojos grises admiraban al hombre mientras se tragaba el medicamento. Mientras el agua bajaba por su garganta el castaño recordó algo. —Uh... ¿Qué te dijo el doctor sobre tu malestar? No has mejorado con lo que te dió mientras te daban los resultados de tus análisis, ¿verdad?

El menor intentó ocultar el miedo que tenía de saber los resultados, pues tenía razón, sus síntomas no habían disminuido aún después de la medicina, incluso podría decir que habían empeorado.

Namjoon sin embargo sí expresó su preocupación a traves de sus ojos atentos.

—Seguro no es nada, papi. No te preocupes... —susurró antes de besarlo cortamente. —Hoy iré a recoger los resultados.

—Iré contigo, quiero asegurarme de que estés bien. —el menor sonrió y acarició las manos de su mayor, negando con felicidad.

—Noo, tú tienes que descansar. Yoongi hyung y TaeTae hyung me llevarán, no te preocupes. —el peliblanco le sonrió con amor, no dejándole posibilidad de replicar al humano.

—Está bien... Pero en cuanto llegues tendrás que venir a decirme cómo estás, ¿sí, ángel? —el conejo asintió frenéticamente antes de abrazar al castaño.

—Te amo, papi... —dijo, escondiendo su cara en el cuello del mayor.

—Yo te amo más, mi pequeño conejito.

Justo en ese momento se escuchó un par de toques al otro lado de la puerta.

—¿Están vestidos? —preguntó el tigre con precaución.

La pareja se avergonzó antes de responder afirmativamente, haciendo finalmente que el felino entrara a la habitación.

»—Realmente debes sentirte mal, Jungkook. Estar a solas en una habitación con Namjoon y no haber perdido la ropa es una señal de que algo anda muy mal. —el conejo le replicó que dejara de hablar mientras se incorporaba para ir a empujar a su mayor.

El humano rió levemente a pesar de estar avergonzado y preocupado por la salud del menor.

—¿Solo vienes a molestar? —el pelinegro alzó una ceja.

—¿Perdón? Esta es mi casa.

—Es de TaeTae hyung. —respondió el peliblanco.

—Por eso. Mi casa. —Jungkook entrecerró sus ojos para mirar a su mayor. —Apúrate, vamos al hospital.

—Oh, ¿ya es hora?... —el menor buscó un reloj en la habitación que le confirmara que ya era hora de ir por sus resultados, más no logró visualizar ninguno.

—Sí, ya es hora. Tae y yo te esperamos en la camioneta, no tardes, no quiero tener que volver a venir a buscarte.

Jungkook creó un puchero mientras veía al tigre salir por la puerta. Segundos después se acercó al hombre postrado para darle un beso de despedida.