XXVIII

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Empecé a sentir algo húmedo en mi mano, por lo que abrí mis ojos con cansancio. Mi brazo caía al suelo, pero me daba pereza asomarme para ver mi mano.

No le di importancia, ¿qué era lo peor que podía ser?

Volví a cerrar mis ojos. Un segundo después los volví a abrir con terror.

Sentí una mordida en mi mano por lo que la alcé inmediatamente y la atraje a mí. Analicé la marca de dientes, claro... El maldito pulgoso.

Moví con lentitud mi cuerpo para no despertar al Jungkook y poder asomarme al suelo.

Al hacerlo me encontré con los ojos con aparente inocencia del perro. Vaya suerte tengo de siempre encontrarme con su mirada en los peores momentos.

Le hice una seña de silencio con mi mano antes de empujar con cuidado el cuerpo del conejo para dejarlo a un lado de mí y así poder levantarme.

Jungkook se aferró a una almohada, parecía realmente cansado. Seguramente ni siquiera pudo dormir bien la noche anterior... Definitivamente haré a Namjoon pagar.

Me senté en la cama y observé al canino que seguía a mis pies, a un lado de mi collar... No puedo hablar con él si Jungkook está aquí, y obviamente no puedo dejar que me vean los mayores...

Me levanté y sin más cargué a Yeontan en mis brazos. Tomé el regalo de Tae para guardarlo en mi bolsillo y me dirigí al baño. Nos encerré ahí y me fui al rincón más alejado de el cuarto que había.

—Bájame, no quiero mancharme de sus corridas. —el canino gruñó. Lo dejé en el suelo, pensaba contestarle pero era cierto, seria mejor que me bañara también...

》—Así que... ¿Te gusta Jungkook? ¿El perro del que hablaste es en realidad su dueño? ¿Le dirás a Tae? —al parecer Taehyung adoptó a un pequeño chismoso. Suspiré antes de responder.

—No. Sí. Sí. ¿Alguna otra pregunta? —con molestia me senté en el suelo mientras sacaba la cadena para ver si podía arreglarla.

No creo que sea una baratija como para que se rompiera tan fácil, o tal vez por eso es que se rompió tan rápido...

—¿Porqué dejaste que un conejo te violarla? ¿Si no te gusta porqué le dijiste que lo amas? ¿Cómo se lo dirás a Tae? —gruñí dándole mi atención al perro en lugar del collar.

—No lo sé, ¿sí? —Yeontan me miró en silencio. Por lo que volví a tratar de arreglar mi collar.

—¿No sabes nada de lo que pregunté? —volví a gruñir mientras me rendía con el dije, no tenia remedio...

—No me violó, no hubo penetración así que técnicamente no engañé a Tae. Le dije que lo amo porque eso hago, pero lo amo como un amigo o un hermano menor y eso —suspiré—No lo sé.

Nuevamente el perro guardó silencio. Miré con tristeza el regalo que Tae me había dado hasta que Yeontan tarareó.

—No puedes engañar a Tae porque no son nada, ¿cierto? —analicé al perro. Realmente parecía hablar con inocencia real.

Tiene razón, no somos nada... ¿Entonces porqué me siento tal culpable y preocupado de que Taehyung se moleste conmigo por lo que hice?

》—Deberías reconsiderar tus sentimientos, ¿no crees,Yoongi? —esta vez su voz sonó con burla. Bufé.

—Un niño no me dirá qué hacer. —me levanté del suelo con molestia y di unos pasos adelante antes de empezar a quitarme la ropa. —¿Qué va a saber un estúpido perro?

Escuché un gruñido a mis espaldas acompañado del sonido que hizo mi ropa al caer al piso. Tomaría una ducha rápida.

—Sé más de lo que crees. Sé que ese híbrido siente deseo hacia ti más que amor de pareja. Sé que Taehyung te ama demasiado como para hacer algo al respecto y sé que tú eres demasiado cobarde como para aceptar que amas a Tae, no solo es atracción física o el cómo te folla. —me giré con asombro pero más que nada furia hacia el animal que me miraba fijamente. —No me subestimes, gato. Y ahora ábreme la puerta que no quiero ver tu feo cuerpo por los siguientes quince minutos.

Savage🐾 Taegi +18 #Wattys2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora