Capitulo 52 "Palabra de honor"

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Siempre soñó con este día desde pequeña. Recordaba como obligaba a Santi a vestirse de acompañante por el "altar" simulado que ellos creaban en su cuarto, mientras una pequeña Elena con pasos torpes iba tirando pequeñas flores de papel haciendo los honores.

Todo era distinto actualmente...ya su vestimenta no eran los trajes de Santi, ni el altar era simulado...ahora todo era real, tan real como la hermosa mujer que esperaba ansiosa la hora en la habitación siguiente.

No podían verse, muy a pesar de ambas, debido a que Manu exigía la tradición de "no ver a la novia antes de la boda, que trae mala suerte"...¿Más? Pensó Natalia por un segundo.

Se miró al espejo pensativa, se veía hermosa, tan hermosa como en sus sueños, pero eso no le importaba...lo único que realmente importaba en ese instante eran sus miedos...no miedos por casarse, no, de hecho, de eso era lo único que estaba segura. Se quería casar con Alba, quería formar una familia con ella...su miedo era no poder disfrutar de esos sueños debido a su poco tiempo.

-¿Se puede?- se escuchó tras tres golpes en la puerta.

Nat se volteó para ver a su amigo asomando la cabeza.

-Hola- dijo con una sonrisa mientras el malagueño iba entrando por completo a la habitación.

-Te ves hermosa, wonka- dijo el chico llevándose las manos a la boca- Si fuera hetero te comería ahora mismo-

Nat se río ante la ocurrencia de su amigo. Siempre hacia las mismas bromas, desde que eran 

-Eres todo un caso- dijo negando con la cabeza y volviendo su vista al espejo.

-Le falta poco y ya está lista- dijo Manu sentándose en la cama.

-¿Sí?- entusiasmada.

-Dios, estas enamorada perdida por esa chica, ¿Verdad?- dijo Manu dándose cuenta.

-La amo, Manu. La amo como nunca amé a nadie- dijo Nat llena de sinceridad.

-Se te nota...la forma en la que te brillan los ojitos cuando hablas de ella te delatas totalmente- dijo sonriendo el chico ante la felicidad de su amiga- Y ella siente lo mismo, es recíproco-

-Lo sé. Estoy segura de su amor- dijo Nat feliz, pero de repente una puntada en su cabeza la hizo detenerse y sujetarse a la silla que estaba junto a ella.

No, no de nuevo, pensó tratando de recomponerse.

Al verla así Manu rápidamente se acercó para ayudarla lleno de preocupación.

-Morena, ¿Qué pasa?- decía tratando de volverla en sí- ¿Qué te ocurre? Voy a buscar ayuda-

-¡No!- lo paró Natalia con las pocas fuerzas que tenía- Ya se me va a pasar- pero no pudo terminar de hablar cuando sintió como un líquido caliente ascendía por su garganta y salía de su boca.

Comenzó a vomitar en el suelo, sintiendo como algo sumamente caliente y con sabor a óxido rasgaba su garganta y se llevaba un poco de su energía.

Manu la sujetó y la llevó hacia el baño, donde la acomodó para que siguiera vomitando, sumamente preocupado por su amiga debido al color rojo del contenido. 

Nat se levantó de delante del retrete y fue al lavamanos. Se enjuagó los restos que quedaban y un suspiro frustrado salió de sus labios al ver como había quedado su traje.

-Natalia, eso era...era...- dijo Manu temeroso mirando el contenido.

-Sangre- dijo Nat tajante. Sabía muy bien qué era y cuál era la causa de eso- Sí, Manu, era sangre- apoyándose llena de rabia sobre el lavamanos.

Be my summer / AlbaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora