Capítulo dieciocho

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Eran cerca de las cuatro de la mañana cuando volvimos a casa de mis abuelos

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Eran cerca de las cuatro de la mañana cuando volvimos a casa de mis abuelos. Sorprendentemente ninguno estaba ebrio, pero sí todos muy cansados ya que habíamos estado seis horas en esa fiesta y podía decir con mucha felicidad que había sido un éxito. El cumpleañero se había divertido y parecía haber olvidado por unas horas el desagrado que le tenía a James y a Julian.

Jaden era un caso aparte, no lo habíamos visto en toda la noche. Corrección, yo sí lo había visto y no en un momento muy oportuno. El recuerdo de él besándose con esa muchacha prevalecía intacto en mi memoria y la sensación de ardor en mi interior también lo hacía.

ꟷTengo la teoría de que cuando el alcohol se puede beber deja de ser tan interesante ꟷsoltó Theo mientras se dejaba caer en el sofá de la sala común del último piso.

ꟷSí, era más divertido emborracharse cuando se debía conseguir alcohol utilizando una identificación falsa ꟷañadió Tyler mientras frotaba sus ojos.

Concluyó su declaración con un bostezo que nos contagió a los tres y terminamos sonriendo como idiotas. Ocupamos los sillones del lugar y nos dedicamos una mirada silenciosa como si estuviésemos saboreando el momento.

La verdad era que yo no podía moverme, los pies me estaban matando y sentía que el corsé se me había adherido al cuerpo para siempre.

ꟷMis chicos se han rebelado.

ꟷ¿Tus chicos? ꟷPreguntó Taylor con burlaꟷ. Creí que yo era el único.

ꟷNo te creas tan importante, Tay ꟷrepuso Ty.

ꟷSí, dude. Serás su novio, pero Genesis nos pertenece a todos. Somos una familia.

Asentí de acuerdo con Theo y el pelinegro me dedicó su mejor expresión de perrito regañado. Demonios, ¿cómo era posible que alguien que me parecía tan sexy durante todo el día podía resultar ser completamente tierno cuando se lo proponía? Ese hombre iba a matarme, mis hormonas no podían con su encanto.

ꟷLlévame a la cama ꟷpedí y alcé los brazos esperando que fuera a mí.

ꟷDíganme que es una ida a la cama sin segundas intenciones ꟷpidió Tyler con una expresión de asco.

ꟷClaro que sí, idiota.

ꟷ¿No escucharemos sonidos raros entonces, pequeñita?

Blanqueé los ojos y escuché a Taylor reír. Mi caballeroso novio se puso de pie y caminó hacia mí sin chistar. Colocó una de sus manos en la curvatura de mis rodillas y la otra tras mi espalda para luego alzarme casi sin esfuerzo.

ꟷBuenas noches ꟷcanturreé aferrándome a su cuello.

ꟷNo interrumpan.

ꟷ¡Oye! ꟷLo regañé dándole un golpecito en el pecho.

Observé por última vez a Tyler y Theo antes de que nos retiráramos de la habitación por el pasillo y recosté mi cabeza sobre su hombro. Realmente estaba cansada, solo me apetecía dormir y quitarme ese disfraz constrictor.

Dos por uno (RVB3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora