El jardín de mis abuelos había sufrido un cambio radical durante el día y lucía increíble esa noche bajo las luces de las guirnaldas. Podía afirmar con completa convicción que no conocía ni a un cuarto de los invitados, pero no era algo que me importara ya que tenía fuertes intenciones de pasar mi tiempo con cinco muchachos que no se habían apartado ni un metro de mí desde que había llegado a la fiesta. No podía quejarme porque, en palabras de mi buena amiga Sara, era una suertuda de primera.
Los cinco lucían increíbles en sus trajes y las diferencias entre ellos eran notables. Julian era mucho más extrovertido que el resto y vestía un traje colorido que lo hacía resaltar, James parecía un agente secreto con su traje a medida, Theo se veía condenadamente increíble vestido de azul y sus ojos resaltaban como zafiros, Tyler había optado por un look sin corbata y parecía un modelo que acaba de escapar de la pasarela y, por último, Taylor tenía ese aspecto que anunciaba problemas con su ropa oscura y sus brillantes ojos verdes. Definitivamente era una suertuda.
ꟷMe parece una falta de respeto que no me hayan permitido alquilar un helicóptero para ver a la ciudad desde arriba ꟷse quejó Julian cruzándose de brazosꟷ. Era una despedida increíble que ahora no podremos vivir.
ꟷPrimero, no confío en tus habilidades como piloto ꟷcomencé sin dejar de sonreírꟷ. Segundo, te dije que no permitiría que gastes dinero solo porque tu madre nunca te puso límites. Y tercero, a Theo no le gustan las alturas.
ꟷ¡Pero si mide dos metros! ¡Él siempre está en altura!
ꟷCasi dos metros ꟷse defendió.
ꟷSi ahora mismo se desmayara, sería como tirar un árbol.
ꟷEres insufrible, Julian ꟷle hizo saber Tyler.
ꟷ¡Lo dices porque a ti no se te ocurrió el paseo en helicóptero!
ꟷ¿Realmente extrañarás esto, Genie? ꟷMurmuró James inclinándose ligeramente hacia mí.
Le di un sorbo a mi bebida y asentí con la cabeza. No había podido dejar de sonreír desde que los había visto a los cinco juntos y esperaba que ese sentimiento eufórico permaneciera en mí durante el resto de las vacaciones.
Catorce horas. Solo quedaban catorce horas para que tuviera que despedirme de uno de mis mejores amigos y de dos grandes personas que había conocido durante ese verano así como también de mis abuelos. Luego tendría que despedirme de Tyler al llegar a Estados Unidos, aunque podríamos molestarnos mutuamente por unas horas más durante el vuelo y Taylor sufriría a solas nuestra presencia.
ꟷSí, los extrañaré muchísimo. Espero que vayas a visitarme, Jamie.
ꟷSiempre y cuando tú vengas a visitarnos.
ꟷEs un trato.
Extendió su mano en mi dirección y sin dudarlo la estreché con fuerza tal y como mi padre me había enseñado. Él sonrió al notarlo y dejó ir mi mano poco después.
ESTÁS LEYENDO
Dos por uno (RVB3)
Novela JuvenilRose Valley boys III Orden de las historias: 1- Tres y un cuarto 2- Uno y medio 3- Dos por uno