¿Conocen esa sensación en la que sienten que el tiempo avanza precipitadamente y que cuando menos lo esperan eso que temían que sucediera está sucediendo? Así me sentía esa noche mientras me preparaba para la cena con mis abuelos, como si el tiempo se me hubiese venido encima y no hubiera tenido posibilidad de pararlo. Estaba nerviosa porque esa sería la primera vez que estaría a solas con ellos, pero sobre todo tenía miedo de que lo pudieran decir. Estaba convencida de que algo tenían para comentarme y yo no podía seguir alargando la espera, tenía que saber las razones por las que mis padres me habían alejado de ellos.
Soltando un suspiro que vació mis pulmones, me di una última mirada en el espejo a sabiendas que nada de lo que hiciera me haría sentir tranquila con mi aspecto. Sabía que me veía linda; no obstante, mi temor iba en otra dirección: la aceptación de Artie y Daisy.
Acomodé la falda de mi vestido y alisé arrugas inexistentes antes de salir de la habitación cargando un pequeño bolso de mano. Caminé hacia la habitación de Tyler y golpeé para luego llamar su nombre.
ꟷTyler.
Golpe.
ꟷTyler.
Golpe.
ꟷTyler.
Golpe.
Di un paso atrás y sonreí esperando su ceño fruncido. Odiaba que hiciera eso y yo amaba hacerlo porque me recordaba a Sheldon Cooper.
ꟷ¿Qué? ꟷPreguntó ceñudo al abrir la puerta de un tirón.
ꟷHola, niño bello.
ꟷSí, sí, que bonito. ꟷChasqueó la lenguaꟷ. ¿Qué necesitas, G?
Mi sonrisa desapareció lentamente y rasqué mi brazo para concentrarme en algo que no fueran mis emociones.
ꟷQuería saber si estarás bien quedándote solo.
ꟷSoy un niño grande, no solo bello.
ꟷSabes a lo que me refiero.
Recostó su hombro contra el marco de la puerta y asintió con la cabeza.
ꟷEstaré bien. Andy seguro me hará cocinar con él porque parece no recordar que yo no trabajo aquí.
ꟷ¿Qué estabas haciendo?
ꟷChequeando el clima de Chicago.
Fue entonces mi turno de fruncir el ceño.
ꟷ¿Chicago dices?
ꟷAjá.
ꟷ¿Por qué?
ꟷPor Emma.
No entendí a qué se refería y tampoco vi intenciones en él de desear explicármelo por lo que dejé el tema pasar. Él no hablaba mucho de Emma últimamente, sabía que habían tenido una conversación por su cumpleaños y eso era todo. Me entristecía darme cuenta que me estaba dejando fuera de su vida en ese aspecto, pero lo entendía. Él no debía contarme todo y yo no debía saberlo todo.
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Dos por uno (RVB3)
Teen FictionRose Valley boys III Orden de las historias: 1- Tres y un cuarto 2- Uno y medio 3- Dos por uno