|| 𝖭𝖾𝗄𝗈𝗆𝖺 & 𝖥𝗎𝗄𝗎𝗋𝗈𝖽𝖺𝗇𝗂 ||

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Advertencia: Poligamia

Si no te agradan estos temas, siempre puedes evitarlos ^^
Caso contrario, bienvenidx, espero que te guste uwu

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— ¿Solo entro y le digo que ya estamos aquí?

— Sí, a ti jamás te lanzaría algo por interrumpirla.

— Vale.

El setter del Nekoma ingresó en silencio al estudio y quedó hipnotizado por la imagen de su novia usando anteojos, sacó su móvil lo más rápido que pudo y tomó una foto, esperando unos segundos para colocarla de fondo de pantalla.

Se acercó a ella y le tocó el hombro lo más despacio que pudo, pero aun así se ganó un manotazo.

— Ah Kenma, eres tú.

— Vine con los chicos, Shizuka. ¿Ya terminas?

Ella asintió y se puso de pie para abandonar el estudio y ver a dos de sus cuatro dolores de cabeza acostados en el sofá mientras dejaban su cabeza colgando (léase Kuroo y Bokuto). Akaashi no se encontraba en ningún lado, por lo que supuso, estaría en la cocina preparando algo para la cena.

— ¿No tienen entrenamiento hoy? —preguntó ella acomodando la mesa.

— Ya comenzaron las vacaciones —respondió Bokuto cambiando de canal en canal.

— ¿Cuánto tiempo estuve encerrada?

— Casi cuatro semanas.

Al escuchar la respuesta, lejos de sorprenderse, ella sonrió como nunca y corrió para abrazar al azabache.

Besó cada parte de su rostro y finalizó con un pequeño beso en sus labios, dejando más que sonrojado al chico, mas este no se quejó. Le gustaba cuando Shizuka era cariñosa con él y le encantaba tenerla cerca.

— Ya, mucho tiempo —Kuroo se levantó del sofá y apresó a la joven entre sus brazos, alejándola del Akaashi.

A los pocos minutos, este también fue apartado por Bokuto, quien —por obvias razones— ocupaba la mayor parte del tiempo a la chica, ya sea recibiendo caricias o halagos que le subían el autoestima hasta las nubes.

Kenma los observó en silencio y se sentó en una esquina del sofá, donde nadie notaría lo mucho que le molestaba no ser tan abierto como ellos con Shizuka.

Cosas de Kenma, solo Shizuka lo entendía, pero esta vez ella no estaba prestando atención.



[...]



— ¡Kuroo lo hizo a propósito! —exclamó Bokuto acusándolo con un dedo.

— Nadie sabía que caerías en bancarrota, Bokuto-san.

Haikyuu; StoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora