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Sus ojos seguían con curiosidad los suaves movimientos de la joven frente a él. Llevaba más de una hora en la misma posición y en el mismo sitio, frente al espejo mirando en dirección a su crush.
Kageyama Hitoshi era, sin duda, la actual dueña de la atención de Sugawara Kōshi.
—Oe Suga, Hinata y Kageyama se van a matar —el capitán del Karasuno ingresó a la sala con la respiración agitada.
—¿Kageyama? —la muchacha se acercó a ellos y el mayor asintió.
La chica, por su lado, se colocó la chaqueta de Karasuno High y caminó detrás de los mayores.
La imagen frente a ella no era la gran cosa, su hermano estaba ahorcando a un anaranjadito mientras sus amigos le celebraban la "gran hazaña".
—Tobio, suelta a Shōyō —pidió la fémina ya cansada. Al ver que su hermano hizo caso omiso a sus palabras, se acercó y comenzó a tirar de su oreja —. Te dije que lo soltaras, Tobio malo.
Sugawara sonrió ante esas palabras.
Hitoshi —a diferencia de su hermano— era un solecito andante. Siempre la veías con una sonrisa plasmada en esos labios que eran cubiertos por una capa de brillo y unos ojos risueños.
El encanto de la Kageyama era la mirada cansada que llevaba todo el tiempo, pues a los ojos de todos, ese detalle era un plus a su atractivo.
Y es que para Suga era así.
[...]
—¡Hey, Hitoshi! —Noya se tiró sobre la chica y esta cayó de rodillas al piso.
Tanaka sintió una calidez invadir su interior cuando la escuchó reír.
—¡Come con nosotros! —Nishinoya seguía sin importarle haberla tirado al piso.
—Hmm claro. ¡Comamos juntos! —la de ojos dispares recogió su caja de leche y se trepó a la espalda del rapado.
Noya corrió detrás de ellos sin fijarse dónde corría.
Lo siguiente que pasó fue que le pisó la zapatilla a Tanaka, quien soltó a Hitoshi y —por consiguiente— ella cayó sobre el setter de tercer año.
—¡Suga-san! —exclamaron los 3 de segundo año.
Sin embargo, esa caída significaba un gran avance para el mayor.
—¿Te lastimaste? —le preguntó a la azabache.
—N-No, estoy bien.
Incluso si a él sí le había dolido, seguía preocupándose por ella.
[...]
—¿Nos ayudas a limpiar, nee-san? —Tobio le entregó una escoba y salió corriendo.
La de orbes dispares bufó y comenzó a barrer sin más, quería irse temprano porque...
—¿Hitoshi? —aquella voz tocó profundo en todos los jugadores.
—¡Tsumu! —la chica corrió hacia el mencionado y saltó hacia sus brazos.
—Nos dieron libre por los exámenes y pensé en venir por ti, ¿estás lista?
—¡Sí, sí! —la auténtica sonrisa de Hitoshi hizo que Kōshi regresara a la realidad y todos se dieran cuenta de la situación.
Su senpai se había enamorado de la hermana mayor de Kageyama Tobio.
Y...
Y Sugawara había olvidado que Hitoshi llevaba un año saliendo con Miya Atsumu.
Pequeño gran... detalle.
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