𝗔𝘁𝗿𝗮𝗶𝗱𝗼. ✧ 𝙹𝙹𝙺 - 𝙿𝙹◌ೄ

Capitulo 32.

Jimin estaba acostado en su cama esperando a que marcaran las 7 de la noche para empezar a cambiarse para la fiesta, dejo su celular en la mesita de noche y se acomodo mejor en su cama abrazando a un osito de felpa que Hoseok le obsequió. Estaba quedándose dormido cuando escucho ruido cerca de su ventana, para ser más específicos, el sonido de que alguien estaba lanzando piedras hacia ella.
El rubio se sentó en la cama y abostezo, se puso sus pantuflas y algo inseguro fue a ver de qué se trataba.

Al acercarse abrió las cortinas y abrió la ventana para ver quien estaba tirando piedras, grande fue su sorpresa cuando vio a Jungkook tirándolas desde abajo. Jeon al verlo sonrió con su característica sonrisa de conejito haciendo que Park le devolviera la sonrisa.

— ¿Que haces?

— Necesitaba verte ¿Puedo subir?

Jimin asintio y se alejo de la ventana para entrar a su armario, el cual era demasiado grande, encontró una escalera y como pudo la agarro, volvió a la ventana y la tiro haciendo que esta cayera al suelo sacándole un susto al pelinegro.

— ¿Que rayos hace una escalera en tu habitación?

Jimin se encogió de hombros.

— Sube antes de que se den cuenta que estás aquí.

Jungkook lo pensó, pero sin más, agarro la escalera, la abrió y la tiro haciendo que esta quedase a la altura de la ventana, lo logró y subió lo más rápido posible.
Al llegar, Jimin se hizo a un lado y dejó que Jeon entrara a su habitación.
Jungkook sacudió sus manos y como arte de magia atrajo el cuerpo del menor hacia el suyo, haciendo que Jimin se sorprendiera. Jimin no dijo nada y solo se le quedó viendo admirando su rostro, Jungkook acaricio su mejilla y lo beso. Park correspondió el beso, posando sus brazos alrededor de la cintura del mayor, El pelinegro agarro del cuello al menor para profundizar el beso, sus labios danzando en una hermosa sincronía.
Ambos se separaron al quedar sin aliento.

— Te extrañe — susurro Jungkook abrazando al menor.

— Yo a ti — Jimin correspondió el abrazo.

Jeon se alejo y camino hasta la cama del rubio para sentarse, Jimin se acercó y se puso frente a él, Jungkook tomo de su cintura haciendo que Park cayese en su regazo.

— Sabes que mis padres están aquí, posiblemente estén en la habitación de al lado.

— No importa, por ahora no vine con otras intenciones, solo necesitaba... verte.

Jimin no lo pudo controlar, se sonrojó demasiado.
Jungkook trazo con sus dedos los brazos desnudos de Park, ya que este andaba con una camisa sin mangas. Jungkook solo estaba ahí apreciándolo mientras Jimin solo sonreía embobado, pero Jungkook se puso serio de un momento a otro al notar como en uno de los brazos de Jimin había un moretón.

— ¿Que pasa?

— ¿Quien te hizo esto?

Jungkook hablo con su voz ronca del enojo, por una extraña razón se sintió demasiado enfurecido al ver la marca en el rubio.

Jimin solo suspiro y se acercó más al cuerpo de Jungkook, recostó su cabeza en el hombro del pelinegro.

— Tuve una discusión con mi papá y pues me agarro del brazo sin querer. No te preocupes.

Jungkook acaricio su mejilla.

— Nada es sin querer, bebé, viejo estupido decrépito imbecil, te vuelve a poner una mano encima y te juro que no responderé a mis acciones.

Jimin se carcajeo y levantó su cabeza viendo a Jungkook a los ojos.

— Quiero irme de aquí, siento que ya estoy muy grande como para seguir viviendo en esta casa.

— ¿Si? ¿A donde quieres ir, cariño?

— No lo sé Jungkook, solo quiero irme, tenía pensado alquilar un departamento con lo que tengo ahorrado.

Jungkook frunció su ceño y acaricio el muslo de Park.

— Nada de eso, se que aún es muy pronto y capaz te incomode pero pongo mi casa a tu disposición, hay varios dormitorios que están sin usar así que si quieres te puedo dar uno.

Jimin abrió los ojos y sonrió.

— ¿En serio? Dios! Me encantaría! Sería perfecto! Te haría el desayuno, almuerzo y hasta la cena! miraríamos películas juntos, jugaríamos juegos de mesa, podríamos adoptar un cachorro y yo lo cuidaría mientras tú estás trabajando, seríamos como una pareja casada!.

Ambos jadearon sorprendidos por las palabras del rubio. Jimin se estaba culpando mentalmente por lo que había dicho.
Jungkook sonrió enternecido, lo que Jimin había dicho lo lleno de alegria completamente.

— No suena nada mal.

— Y-yo lo siento, no debí—...

Jeon calló a Jimin posando sus labios sobre el, El rubio estaba aturdido pero después correspondió el beso posando sus manos en el pecho fornido del mayor.
Jimin empezó con un vaivén lento encima del pelinegro haciendo que sus erecciones se formarán.

Iban a seguir pero dos toques en la puerta los hizo separarse.
Jimin corrió hacia la puerta.

— ¿Quien es?

— Soy yo, Rose.

Jungkook se recostó sosteniéndose de sus codos con una sonrisa pícara y Jimin simplemente estaba con sus mejillas rojas, labios rojos e hinchados por el beso y pensando que hacer.