Just let me adore you [H.S]

15

Fairuz.

Mi alarma sonó, me estiré y solo por cinco minutos, me olvidé que había vuelto a ver a mi primer amor el día de ayer. Volviendo a mi realidad, tomé el celular como de costumbre y revisé las notificaciones, el último mensaje era de Twitter, cuando lo abrí, mi mundo se detuvo. 

Fairuz, que guapo salgo en la foto que nos tomaste, soy Harry ¿Me recuerdas? xx.

Si, me había escrito. ¿Qué se supone que debía responderle? ¿Debía decirle algo? Salí corriendo al cuarto de mamá, necesitaba ayuda.

—¡Mamá! ¡Mamá, mamá, mamá! —la moví desesperadamente para despertarla.

—¿Qué pasó? ¿Miranda, esta bien? ¿Qué tienes? —me miró asustada con una mano en el pecho.

—¡Harry me ha escrito! —le entregué el celular para llevarme las manos a mi rostro, ella lo leyó. —¿Qué hago? ¿No le contesto, verdad?

—¡Ay, hija! —respira aliviada al ver que no era nada grave. —No tiene nada de malo que le respondas un mensaje, quizá podrían...

—Si le contesto va a responderme, o quizá no, y si sí, querrá verme, y si no quiere verme pues...

—Primero, cálmate —me tomó de los hombros obligándome a estar quieta. —Piensa que vas a responder y vete a la universidad que se hará tarde por estar pensando en tu novio Harry —la miré mal y dejó de reírse.

Salí haciendo una pequeña pataleta mientras arrastraba los pies y refunfuñaba, di cien vueltas antes de responder. La verdad no sabía que decirle ¿Debía reírme? ¿Debía reclamarle que ni siquiera se disculpara por lo que pasó? ¿Debería decirle que no lo recuerdo? ¿O mejor le digo que estoy casada y tengo cinco hijos? Mierda, con Harry siempre fueron las cosas fáciles y fluidas, pero ahora, Dios. Me enojó pensar tanto y sin pensar realmente, le contesté.

Claro que sí te recuerdo, que sorpresa tan grande y que mundo tan pequeño. Y no seas arrogante, Styles, tu ego es más grande que tú:).

Dejé el celular y me fui a cambiar para la universidad. Cuando salí de la ducha no pude evitar mi impulso de correr hacia mi mesa de noche para revisar el móvil, cuando lo desbloquee vi que tenía una respuesta de él, admito que lo leí con miedo mientras el corazón se me salía del pecho.

El gran ego es algo que siempre hemos compartido. Cuánto tiempo ha pasado, tú y tus grandes entradas a mi vida siempre, debemos salir a tomar algo antes que me vaya ¿Hoy puedes?

Mierda ¿Debería? Fui meditando la respuesta hasta llegar a mi salón.

Tengo grandes entradas, que puedo decirte. Claro, nos encontramos en el McDonald de la calle 46, a las dos, almorzamos ¿Te parece?

Al parecer Harry estaba muy pendiente de su celular siempre ya que me contestó en menos de tres minutos.

Perfecto, nos vemos entonces xx.

Muy tarde para arrepentirse, muy tarde para salir corriendo, me sudaba hasta lo que no debía sudar pero, solo saldríamos como amigos, nada malo podía pasar.

Harry.

¡La invite a almorzar, mierda! Quisiera admitir que fue pura valentía, pero realmente fue bajo presión de los chicos. Yo quería hacerlo, pero tenía miedo, estaba muy nervioso, los cuatro me quitaron el celular y luego de ser amenazado por Louis y una zanahoria, me hicieron enviar el mensaje. 

(...)

Decidí salir con tiempo porque amo ser puntual, bueno no, es un defecto inglés. Me puse mis jeans de la suerte, unas converse y mi camisa blanca, además de llevar mis lentes oscuros para evitar que me reconocieran. Le pedí el auto a Paul, después de cuestionarme mucho, advertirme y decirme que todo era bajo mi responsabilidad, me dio las benditas llaves.

Al llegar al restaurante, le envié un mensaje para avisar que estaba en el estacionamiento. Al instante de darle enviar, vi a una chica parada en una de las puertas principales del establecimiento, era Fairuz Molina. Empecé a sudar cuando me inspeccioné por el retrovisor para ver si me veía lo suficientemente guapo, sonreí e hice una mirada seductora, luego suspiré y bufé, 

—Tú puedes, Harry —dije antes de darme una cachetada mental y bajar del auto. 

Caminé rápido hasta la entrada del restaurante, ella estaba de espalda, siempre tan distraída y tan... preciosa.

—¡Hola! 

—¡Ah! —vi una gran cantidad de papitas en el aire y luego en el piso. No pude evitar soltar una carcajada y ella miró con pena su comida regada en el suelo. —¡Harry, te voy a golpear, me asustaste!

—¿Ahora quién le bota las cosas a quién, eh? —le di una sonrisa cómplice recordando nuestro primer encuentro hace muchos años. —Fai, cuánto tiempo. 

—Que gracioso —dijo luego de mirarme con los ojos entrecerrados. —Hola Styles —la cara de sarcasmo no le había cambiado, me abrazó y me regaló un beso en la mejilla. 

En ese momento, sentí como una corriente pasó por cada parte que ella tocó, era increíble cómo a pesar de los años, ella aún conseguía ponerme nervioso.

—No me esperaste —hice puchero mientras colocaba mis lentes de sol sobre mi cabello.

—Solo son unas papitas —me las mostró mientras comía una de las pocas sobrevivientes. —Llegué hace veinte minutos y tenía hambre. 

—Me hubieras llamado —reclamé.

—Primero, no tengo la dicha de tener tu número, Styles —enumero con la papita entre sus dedos. —Segundo, pensé que la súper estrella estaba ocupada. 

—Eso del número se soluciona y dos, no, no me digas súper estrella, lo odio —chaquee la lengua ganándome una risa por parte de ella.

—¿Pasamos o piensas conversar aquí todo el rato?

—Podría ser —me miró con una ceja alzada y saqué a relucir mi hoyuelo, esa táctica jamás falla.

—No me retes, siempre pierdes —se encogió de hombros. —Y menos me muestres el hoyuelo ¿Estamos? —estallé en risas y a los segundos ella me acompaño con su linda carcajada.

—¿Te parece si ordenas y almorzamos en el auto? Es más seguro y no nos van a interrumpir cada cinco minutos.

—Mándame por mensaje lo que quieras, ten —ella sacó su teléfono para entregármelo, anoté mi número y me marqué para guardar el suyo. —Que quede claro que acepto almorzar en tu auto solo porque odio estar entre muchas personas —me crucé de brazos y ella me lanzó su bolso para adentrarse al restaurante.

—¿Tienes dine...? —me sacó el dedo medio cuando oyó mi pregunta, reí y me encaminé hacia el auto.

🌻🌻🌻

Hola! 

Muchas gracias por leer cada cap, vi que la novela tenía 100 vistas y me emocionó mucho.

Hoy día perdí a un familiar a causa del virus, espero de todo corazón que se encuentren bien al igual que sus familias, cuídense mucho.

Un abrazo.

- Clau.