Just let me adore you [H.S]

27

Fairuz.

La última semana pasó volando, literalmente.

—¡Harry, cuidado! —toda la cocina estaba llena de polvo blanco, Harry había empezado a echar harina al boul para hacer cupcakes pero algo salió mal.

—Perdón —movió sus manos entre el polvo para poder verme.

—Recuérdame no dejarte solo en la cocina nunca mas, Style —tocí mientras limpiaba el polvo blanco de la cara de Harry y este reía.

(...)

Además, varias veces Harry estuvo insistiendo en ir a practicar box, eso tampoco salió muy bien.

—Mueve el brazo derecho de manera que vaya a darle a la cara, Fairuz —el entrenador movió mi mano enseñándome el movimiento.

—Me da miedo lastimarlo —retrocedí mi brazo.

—Golpéame con confianza, recuerda cuando teñí de casualidad tu short blanco favorito de rosado por no saber usar la lavadora —lo recordé, ese día el mundo casi pierde a Harry Styles.

—De acuerdo, tu lo pediste, Styles —lo miré desafiante.

—Oh vamos, Fai, ni que —no pudo terminar de hablar ya que un golpe seco cayó en su frente con mi guante haciendo que se cayera para atrás.

—¡Harry! —corrí asustada a su lado. —¿Estás bien? Lo siento, lo siento —me saqué los guantes y le acaricié la cara.

—Vaya, tengo una chica boxeadora —rió con su mirada perdida.

(...)

Estábamos regresando del supermercado y Harry insistió en que estacionara el auto ya que aún no era muy buena haciéndolo.

El lugar asignado para mi en el estacionamiento era pequeño o eso parecía cada vez que llegaba con la inmensa Jeep que Harry me dio.

—Lo estás haciendo bien, bonita, solo un poco más a la derecha —Harry supervisaba desde afuera del auto ya que había bajado para guiarme.

—¿Listo? —saqué mi cabeza por la ventana para ver pero el auto estaba inclinado.

—No, muévete un poco más para la derecha, lento... si así... no espera ¡No! —moví el auto pero de casualidad presioné más el acelerador y golpeé la parte trasera de este haciendo que una luz se rompiera.

Harry me miró con ambas manos en la cabeza y yo solo me encogí en el asiento hasta desaparecer.

(...)

Mañana saldría el vuelo de Harry hacia Londres, estaría algunas semanas y luego volvería para después volverse a ir. Estaba muy triste porque no sabía cómo podríamos seguir intentando algo si estamos lejos, seguiría poniendo de mi parte, eso sí, pero también sé que sería complicado.

—No puedo creer que tan rápido hayan pasado dos meses —suspiré y me apoyé en el pecho de Harry. —¿Me vas a extrañar?

—Claro que sí, será complicado estar sin ti —susurró acariciando mi cabello.

Nos quedamos en silencio mirándonos, Harry fue poco a poco acercandose a mi, nuestras respiraciones se mezclaban, me hipnotice al ver sus labios, él los entreabrió un poco para luego besarme.

El beso estaba lleno de desesperación y angustia, ninguno sabía que pasaría a partir de hoy y no teníamos muchas opciones.

De un momento a otro el estaba encima mío mientras sus manos bajaron hasta mis caderas. El calor del cuarto empezaba a aumentar y el de nosotros también, Harry saca mi top con cuidado mientras mis manos viajan hasta su cabello y tiró un poco de el haciendo que suelte un pequeño gemido.

Decido tomar un poco el control y le saco el hoodie, Harry hace un poco de presión hacia mi haciendo que sienta su gran bulto entre mis piernas. Luego de quedarnos únicamente en ropa interior, baja sus manos y recorre cada parte de mi cuerpo como si fuera lo más delicado que ha tocado en la vida. De un momento a otro estoy desnuda ante sus ojos, él toma entre sus grandes manos mis pechos y los masajea lentamente haciendo que varios gemidos salgan de mis labios. Cuando recobro la compostura, saco tímidamente sus boxer y sale disparado su gran amigo.

Harry me pide un momento y saca de su mochila un sobre plateado, lo rompe y se lo coloca. Se posiciona encima mío y como pidiéndome permiso, asiento para luego sentir una gran presión entre mis piernas haciendo que arqueara la espalda.

—Quiero preguntarte algo —dijo con la respiración agitada.

—Dime —busqué sus ojos y conectaron con los míos.

—No puedo irme y dejarte así, con un intentándolo entre nosotros, creo que prácticamente hemos saltado todos los pasos y hemos convivido sin querer, nos está yendo bien, por eso... quería saber si... me harías el honor de ser mi novia. —estaba nervioso, lo notaba, pero esas palabras fueron sinceras.

—Harry —acaricié su mejilla sonriendole. — Claro que sí, como dices nos está yendo excelente y si, las cosas se dieron un poco en desorden con nosotros pero, eso lo hace especial.

—¡Te quiero! —me dio un largo pero dulce beso —Te quiero mucho, mucho mucho —pegó su nariz a la mía y la rozamos delicadamente. Me perdí entre sus ojos y sus caricias, Harry era todo lo que necesitaba en ese y en todos los momentos de ahora en adelante.

—Y yo a ti, Styles.