LXXIII

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Playlist antes de leer:

Say Something - A Great Big World ft. Cristina Aguilera.

Surrender - Natalie Taylor.

Reproducir las canciones mencionadas antes de comenzara leer, con ellas escribí este capítulo  y siento que mejorará su lectura. Así que, aclarado lo anterior, prosigan.




LXXIII. Más allá de la luna...



Esto estaba solitario, el verano pronto terminaría y el otoño comenzaba a abrazar la ciudad.

No era una buena temporada para estar aquí pero el sonido de las olas romper contra corriente y las grandes montañas rocosas era único.

Enfócate Eris.

¿Qué debo hacer?

¿Sobrevivir para vivir o vivir para sobrevivir ?

La incógnita nunca la puedo encontrar entre el reguero de pensamientos que vienen a mi mente estos momentos.

El viento sopla fuerte pegando contra mi rostro, haciendo volar mi cabello, gélido y frío.

Crudo.

Levanto mi mano izquierda solo para observar mi anillo de bodas callando el de compromiso.

Me saco el primero y leo lo que está en el interior, grabado con letras cursivas.

"Comencemos con un para siempre."

Lo acaricio con las yemas de mis dedos sintiendo la frialdad del material.

Comienzan a correrme ponla memoria fotografías de nosotros en momentos felices, momentos en los que no hacía falta nada más que nuestra presencia. El sentir que nos acompañamos mutuamente.

El "Sí, acepto."

No creí que dolería tanto recordar dos simples palabras.

Niall Horan siempre será parte de mi, de eso no cabe la menor duda. Después de todo llevo en el vientre un pedacito de lo que algún dia fué nuestro amor en su máximo esplendor.

Cada vez creo más que el felices para siempre es solo una ilusión.

La del primer amor.

Cuando ves a esa persona con detenimiento estando ya acostumbrado a verla pero tu corazón siente que es como si fuera la primera vez.

Ese tipo tan antipático y ególatra que solo llegó a calarme la vida y llenarla de color ahora... usa un borrador y se lleva consigo todos esos momentos.

Es tentadora la oferta de ya no ser parte del mundo.

Porque sí, Dios es cruel. Nos trae a la tierra para sufrir y aprender. La realidad es que no aprendemos nada, llegamos y nos vamos solos, sin nadie a nuestra compañía y eso a la larga... pesa más que toda la culpabilidad del mundo.

A veces... recuerdo cuando mamá me leía "La Cenicienta", yo no quería ser Cinderella, quería ser el ada madrina.
Con su varita mágica hacia y deshacía lo que quería.

𝐖𝐇𝐈𝐓𝐄  #𝟐  [COMPLETA] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora