Your Eyes Tell | TK 承

⇝XLVIII

JJK POV-

Llegamos a casa de Taehyung sin ningún inconveniente. Viajamos en mi vehículo, por lo que el camino fue algo corto.

Noto a Tae un poco apagado, no sé qué pensar. De camino hacia acá no dijo ni una sola palabra, creí que no quería hablar por lo que respeté su decisión. Ni siquiera ha saludado con entusiasmo a sus padres, como suele hacerlo.

—Cariño, ¿puedes ir con Taemin a comprar algo para la cena? —Su madre interrumpe nuestro... momento de silencio, probablemente, hablando hacia Tae.

—Puedo ir yo, señora —me levanto de aquel sofá en el que había tomado asiento luego de que el señor Kim nos recibiera. Sinceramente prefiero ir yo a que Taehyung quede a solas con Taemin, así evito cualquier momento incómodo que vaya a suceder.

—No te preocupes, Jungkook —"Jungkook"...—, iré con mi hermano, puedes quedarte ayudando a mi madre si lo necesita —la voz monótona de mi novio me hace sentir un escalofrío, sumándole que no me nombró "Koo". No sé por qué, pero siento que he hecho algo mal, aunque no puedo recordar con exactitud cuándo lo hice.

—Está bien... —susurro algo desconfiado.

—Tu hermano te está esperando en la puerta, Tae, él tiene la lista de las cosas, vayan con cuidado —habla amistosamente hacia su hijo.

Luego de que Taehyung abandonara la sala de estar y desapareciera de nuestro alcance visual, Seokyung, su madre, me sonríe, guiña un ojo y me hace una seña con su mano invitándome a seguirla a donde sea que fuera.

Un poco extrañado hago caso a sus mensajes y voy detrás de ella, aparentemente hacia la cocina.

—Ven, Jungkook, toma asiento, charlemos.

Oh, no...

Nunca creí tener "la charla con los padres de mi pareja", pensé que en esta familia no hacían eso. Bueno, creo que bajé mucho la guardia.

Sonrío nervioso y asiento suavemente para luego tomar asiento en alguna silla del comedor, en aquella mesa ya estaba instalado el señor Kim y su señora llegó a su lado.

Siento la mirada de ellos sobre mí, no sé si sea mi mente jugándome una mala pasada pero siento que lo único que me dirán será que no quieren que permanezca un segundo más en esta casa.

Sin querer sostengo miradas con Taeyang-nim, quien no me mira de mala manera, pero tampoco deja de hacerlo.

Sonrío un poco incómodo y miro a la señora frente a mí, queriendo que entienda mi mensaje de "¿cuándo comenzaremos?". Agradezco que, aparentemente, sí logró comprenderlo.

—Sabes, Jungkook... —sonríe suavemente— Taehyung ya nos dijo que ustedes están saliendo —conserva una mirada suave que debería tranquilizarme, pero es lo que menos hace.

—Yo... —por alguna razón intento explicarme, hasta pediría perdón, pero el padre de Taehyung me interrumpe antes de que pudiera decir algo más.

—No pienses que hiciste algo mal, Jeon, no nos sorprendió la noticia —puedo sentir el ligero tono de burla que ocupa, aunque no lo demuestre, pero una ligera sonrisa se hace presente en su rostro—. De hecho, pensábamos que salían desde mucho antes. ¿En qué fallaste, muchacho? Tardaste bastante —ambos padres ríen, despejando un poco la tensión del ambiente, haciendo que yo destensara mis hombros y sonría tímidamente.

—No tuve el valor de hacerlo antes —sonrío, recordando los tiempos en los que le pedía consejos a Mingyu, ya que no sabía cómo se trata a la persona que te gusta—, y cuando pude hacerlo... a Taehyung no le gustó el lugar ni la forma en la que lo hice.

Los tres reímos; yo por el recuerdo, y los señores... supongo por las actitudes de su hijo.

—Taehyung siempre ha sido así. Si algo no cumple con sus expectativas, no tiene pelos en la lengua para decirlo —Seokyoung suspira—. A veces llega a ser cruel.

—Vaya que lo fue, estuvo torturándome todo un día sin decirme por qué me trató así... no puedo creer que tuve que llevarlo a Busan para que aceptara —sonrío melancólico, aunque ya con un poco más de confianza.

—Hablando de eso. ¿Cómo estuvo el viaje? ¿Pasaron a la dirección que te indiqué? —el señor Kim queda atento a mi respuesta.

—Oh, sí... no pude llevarlo, hubieron pequeños problemas así que volvimos más temprano... Igual Taehyung conoció a alguien —hablo despreocupado.

—¿Sólo él? ¿Tú no? —Taeyang alza una ceja hacia mí y me doy cuenta que prácticamente les dije en la cara que he dejado solo a su hijo.

—S-sí... yo también —hablo nervioso—, pero se llevó mejor con Tae, es lo que quise decir —sonrío intentando no haber sido descubierto.

—Bueno, eso es un gran paso para Taehyung, ¿verdad, amor? —la señora Kim mira a su marido, esperando por una respuesta.

—Sí, Seo, me encanta ver cómo ha mejorado nuestro hijo —puedo jurar que nunca había visto una sonrisa tan llena de orgullo como la que Taeyang le dedica a su señora, y viceversa.

—Bien, Jungkook —ambos me miran, el ambiente ahora es más agradable y no me estoy consumiendo en nervios—. ¿Taehyung te dijo algo más mientras estaban arriba, en el cerro?

Frunzo mi ceño y mis labios, haciendo memoria de todo lo que nombró Taehyung ese día, pero una frase en particular aparece repentinamente en mi mente.

"Me gustaría ver si el paisaje es tan hermoso como dicen..."

Aunque esas palabras no fueron dirigidas hacia mí, Taehyung las dijo de una manera en la que sin querer llegaron a mis oídos.

Después de aquello, recordé lo intensamente que pensaba en una, quizás no tan, loca idea, la cual ha estado rondando en mi mente unos días, desde aquel momento.

—¿Jungkook?

Al parecer me he sumergido bastante en mis pensamientos, tardé demasiado en dar una respuesta instantánea pero espero que la pregunta siga en pie.

—¿Han pensado..? —humedezco mis labios pasando mi lengua entre ellos— ¿Han pensado alguna vez en costear una operación para la vista de Taehyung?

Ellos me dedicaron una mirada de preocupación.