CAPÍTULO 3

192 24 2
                                    

Esta mañana he llegado tarde al trabajo, no he oído el despertador sonar. De castigo Gabriel mi mánager, me a dejado millones de expedientes que tratar junto con Matt por mi retraso.

La mañana transcurre tranquilamente en Harper's. Matt y yo estamos trabajando activamente. Encuentro los conceptos de marketing y Matt los ilustra en su tablet.

El tiempo es suave hoy en Nueva York, y los rayos del sol entran en el open space. Aunque estamos arrinconados en nuestro box, disfrutamos de la luz.

A las 11 h, recibo un email de Gabriel de los más breves..

De Gabriel Simons a _____ López

« ¿Adelantas algo? »

No sé por qué pero estoy convencida de que en el fondo de su despacho, se burla de mi y de mi cara cansada y derrotada.

De _____ López a Gabriel Simons

« Todo está bajo control. Avanzamos a un ritmo razonable. Tendrás un informe esta tarde ».

De Gabriel Simons a _____ López

« Me alegra saberlo. Pero no os matéis trabajando. »

¡Ya estamos con un nuevo cambio de opinión de Gabriel!

A las 11:30 h, mi estómago empieza a protestar. Estoy impaciente por ver a Leah, para comer y contarle todo lo de ayer. Me muerdo una uña e intento concentrarme en mi trabajo, aunque mi mente se pierde por momentos en otras cosas.

Me cuesta centrarme en un tema. Tengo los oídos llenos de música aún. Me encanta el ambiente de los conciertos.Es que te llega al alma, te aparta de tu vida cotidiana para llevarte a otro universo. Luego pienso un poco en Abraham. Veo de nuevo su manera de tocar los tambores de la batería con sus baquetas al ritmo.

Me encanta ese instrumento.

Aporta el ritmo a toda la música, controla al cantante, electriza al grupo.
Es un puesto importante, aunque la mayoría de la gente no lo aprecia lo suficiente. De pronto, Matt chasquea los dedos atrayendo mi atención.

- _____ , te he perdido. - dice con una sonrisa burlona en los labios.

- Oh, perdona... estaba pensando.. - murmuro y le regaló una de mis sonrisas.

Matt no es tonto. Esboza una sonrisa porque es consciente de que mis pensamientos no tenían nada que ver con el trabajo. Me dispongo a enviarle una indirecta, cuando mi móvil vibra en mi escritorió de repente.

Lo cojo tan rápidamente que Matt se echa a reír.

- Shhh.. ¡Cállate! ¡Ni una palabra! - exclamo mirando mi celular.

Se encoge de hombros, con cara de inocente, y sigue sonriéndome, burlón. Le saco la lengua encendiendo la pantalla de mi móvil.

¡Por favor, que sea él!

Desde ayer he estado esperado un mensaje de Abraham, pero nada.
Tenia ganas de llamarlo pero ni su número tengo. Es la primera vez que me pongo así por un hombre el cuál apenas conozco hace un día.

Abro la bandeja de entrada y mi corazón se pone a latir desenfrenadamente. Está a punto de darme un ataque.

Nunca había latido tan fuerte por un simple mensaje.

Se muestra un número desconocido, antes incluso de abrir el mensaje, y sé que es él. Lo siento asi.
¡Todo mi cuerpo lo siente!

- ______ , si sigues mirando tu móvil tan fijamente, llamo a urgencias. ¡Me estás asustando! - dice Matt mirándome divertido.

Ángel Mío | Abraham MateoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora