REFLEJO ➳ Kim Taehyung

• PARTE 027 •

Mientras más transcurría la tarde más incómodo era estar aquí, me sentía furiosa pero teniendo a un lado a Hoseok era difícil expresarlo.

Aunque no haya hecho caso a lo que mi padre ha pedido, no me puedo acercar a Min YoonGi, está rodeado de sus amistades, Sehun y Kai, hijos de una familia amiga a los Min.

–Escuché que habrá un juego con todos, ¿quieres jugar? –Hoseok interrumpió mi pensamiento con una palmada en la pierna.

–No quiero, estoy cansada. –me dejé en el respaldo del sofá–. Quiero descansar.

–Hann. vayamos, el señor Kwon dijo que habría un premio a los ganadores. –se levantó y tomó de mi mano.

–¿Suga jugará? –pregunté imitando su acto.

–¿Podrías dejar de preocuparte por él? Lleva horas hablando con sus amigos ignorándote.

–Creo que tienes razón.

–Sin embargo el menor de los Kim no deja de mirarte. –volteó jalando de mi mano incitándome a mirar.

–Deberíamos decirle que venga con nosotros.

–Ese no era el punto, él es raro. –dio unos pasos al jardín con los demás–. Podría ser un futuro asesino serial.

–Hey, ¿por qué tan despectivo?

Quizá sí es raro, ¿no se incomoda al tener la mirada clava directamente a la de otra persona? Lo extraño es que ninguno de los dos separamos la mirada, no hasta que salí al jardín junto con mi amigo.

–Lo es, tú también lo sabes.

–Supongo que solamente es muy reservado, sí habla, sí interactúa. Es muy bueno en todas las artes.

–¿También te gusta?

–¿Qué dices? –me detuve frente a él volviendo la vista al interior de la casa donde aquel chico se ponía de pie–. Habla rápido porque conozco esa mirada.

–¿A qué te refieres?, ¿mi mirada? –volteó de reojo hacia atrás donde caminaba hacia acá aquel chico–. Olvídalo, sé amable.

Vi a Hoseok irse intentando despegar la mirada de aquel chico que se acercaba.

Dios.

–El es un buen amigo, ¿cierto?

Habló y no tuve tiempo de moverme o irme a otro sitio. No me incomodaba pero su mirada penetrante me intimidaba.

–Sí, lo conozco hace apenas tres años.

–No se necesita pasar tantos años para ser cercano a otra persona, ¿verdad?

Di la vuelta y me encontré con Taehyung quien estaba frente a mí sin dejar de mirarme. Que sorpresa.

–No, claro que pienso que se deben conocer de algunos años para poder ser cercanos.

–¿Eso crees?

–Sí.

–¿Por qué si nos conocemos desde jardín de niños no hemos podido ser cercanos?

El chico que hace unos minutos estaba callado en un solo sofá de la sala ahora parece ser muy osado soltando este tipo de cosas.

Es un tonto.

–Porque tú no hablas, a excepción de cuando te preguntan algo específico.

–¿Has notado eso? –le vi sonreír discreto.

Oh, no.

–Me voy, me están esperando. –di la vuelta lentamente.

–¿Está mal no hablar, Hannie?