• PARTE 082 •

360 44 15
                                    


El transcurso de el viaje no pregunte a dónde nos dirigíamos, no hice ni un comentario, no cuestioné la presencia de Namjoon en el lugar... Toda mi atención estaba en abrazar a mi hijo y en la rabia que estaba recorriendo todo mi cuerpo. Me alegra tener a mi hijo pero, si hubiese estado sin él, jamás habría dejado morir sola a Chae.

¿Justicia divina?, ¿karma?, ¿acaso es su merecido por algún mal que ha hecho? No entiendo porque ocurrió esto cuando estaba dispuesta a reparar sus errores, enmendar todos los daños... Cuando lo único que hizo mal fue dejarse manipular demasiado por un hombre que no tiene ni una pizca de humanidad.

Es un asco esta situación.
El sonido de las gotas caer sobre los vidrios del auto anunciaban una lluvia, acompañada de los truenos que han espantado nuevamente a mí hijo.


–En el asiento trasero encontrarás un biberón y algunas cosas que puedes utilizar para mi sobrino. –dijo crudo.


Por primera vez en años tuve la oportunidad de mirar a Namjoon con detalle, ojos rasgados, hoyuelos, manos largas y piel perfecta, algunos detalles que la luz de la noche me permitían mirar en él.


–Demasiado tiempo sin verte. –respondí.

–¿Eh?, sí. –dijo inseguro–. Hann, veo que has recuperado la memoria.

–¿Tú también lo sabías?

–Me lo dijo mi hermano Taehyung. –respondió–. Hace muchísimos años me alejaron de ti.

–Han dicho que quieres matarme... ¿lo harás? –cuestioné arropando a mi hijo.

–No, Hann Swan. –dijo seguro–. Aunque han asesinado a mi mejor amigo Whan, no lo haría.

Oh...

–Tú le has enviado por mí... ¿por qué?

–Porque quería explicarte que ocurría, nadie mejor que tú me hubiese podido entender. –dijo en tono pacífico sin perder cuidado en el camino–. Como siempre el hijo de perra que mi hermano hace llamar 'mejor amigo' lo arruinaba todo.

–No lo llames así, él solamente hacía lo que yo le pedía.

–Eso y algo más. –susurró.


Ignoré sus palabras y ataqué con una de mis mayores interrogantes que he tenido desde que llegué a Seúl nuevamente.


–¿Por qué tu padre y guardaespaldas ha intentado secuestrarme en el aeropuerto en Gangnam?


Aceleró el automóvil y miré al mismo punto que él miraba; el espejo retrovisor.

Mierda.

El automóvil de Gaem, y otros tres vienen tras nosotros.

–¡Nos siguen! –exclamó.

–Lo sé, pero, no conozco los automóviles que vienen detrás. –miré hacia atrás.

–Es mi padre, sus hombres y el tuyo. –dijo al fin.

–¿Por qué me ayudas?, ¿por qué huyes de tu padre?

–No lo sé, Hann. –negó sin perder la vista en el camino–. Conozco lo que estabas haciendo respecto a Gaem desde hace años... Hice lo mismo con mi padre.

¿Qué?


–¿También estabas trabajando con la fortuna Kim?

–Oh, no. –soltó una risa ironica–. La única que hizo uso de la fortuna Kim fuiste tú. Hishida Yui.

Vaya, él ya lo sabe...

–¿Por qué están juntos?, ¿cómo llegaste hasta ahí?, ¿qué es lo que estaba haciendo exactamente?


–Lo diré una sola vez y rápido porque como podrás notar, nos están siguiendo. –dio una vuelta bruscamente–. Estoy seguro que no serán amables.

El movimiento hizo despertar nuevamente a mí hijo, por lo que utilicé lo que había ofrecido Namjoon antes. Miré al conductor mientras alimentaba al bebé, atenta.


–Habla de una vez. –dije cruda–. Últimamente me irrita el no saber porqué me quieren matar.

Le vi tomar aire.

–Aquella noche en la residencia Lee cuando ocurrió el incidente hicimos un acuerdo, ¿no es así? Si no lo recuerdas, lo hicimos para al pasar los años poder encerrar a nuestros padres en prisión por todo lo que habían hecho. –recordó–. Al pasar los años comencé a mover los reactivos de la familia a otras cuentas esas incluyendo a la cuenta de Gaem. El plan era hacer que ellos pelearan por el dinero, que entre sí se destruyeran pero... –dijo–. Tú un día ya estabas frente a todo, pero día estabas casada con mi hermano menor, al otro se divorcian, semanas después salen de viajes y una semana antes de tu parto se distancian otra vez.

REFLEJO ➳ Kim TaehyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora