• PARTE 067 •

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Ahora solamente necesitaba a alguien a mi lado, alguien que jamás me trataría con condescendencia.

–¿Entonces simplemente me llamas y no dirás nada? –decía Min YoonGi al estacionarse frente a mí casa–. Luces terrible.

–No estoy de ánimos, no quiero hablar.

–Todo el camino estuviste así, supondríamos todos que estarías con Taehyung aún.

–Tengo hambre, Suga.

–¿No cenaste?

–No.

–Puedo preparar algo, Hannie. –le vi suspirar sin decir nada al respecto.

Estar con Suga últimamente se ha vuelto mi rutina, nada ha cambiado a excepción de los berrinches ausentes de Tae que ya no están aquí.

–Siento como si el tiempo no habría transcurrido, como si todo lo vivido hace años hubiese sido un sueño. –hablé al fin terminando mi cereal.

–Pienso lo mismo, sigues colocando en mi plato las pasas de tu cereal. –dijo riendo.

–Sí… –susurré.

Demonios, estoy triste.

–¿Qué ocurrió entre ustedes, Kwon?, pasarías días con tu marido, ¿no es así?

–Está arrepentido de haberse casado.

No obtuve respuesta alguna, le vi recoger nuestros platos y quedarse de pie frente al lavabo de la cocina.

–Lamento haberte llamado, necesitaba alguien objetivo, justo ahora.

–¿Temes que te digan que tú no tienes la culpa de eso?

–Sí, porque sé que la tengo.

–Llamaste a la persona equivocada, yo siempre creeré que él es el único culpable. –volteó a mirarme–. Debió darse cuenta que no tenía las agallas de hacer un hogar contigo.

–El tuvo la iniciativa de casarse, Suga. –me levanté de la barra de la cocina–. Fui yo quien lo arruinó, no presté atención a nuestra relación cuando regresamos a Seúl.

–Debió ser lo suficientemente hombre como para enfrentar a la sociedad, a todos y haber vivido juntos desde que se casaron.

–Eres muy exigente, ¿no?

–No.

–Él se está esforzando también en sus negocios familiares, Suga.

–Kwon.

–¿Suga?

–Todos sabemos que sus viajes fuera de la ciudad son mero entretenimiento. –confesó–. Todos conocemos a sus administradores y equipo de trabajo, su presencia allá es meramente simbólica.

–¿Cómo estás tan seguro?

–Shia me lo ha dicho.

Tiene sentido, Shia conoce a muchas personas y no tendría porqué mentir. Él no sabe que soy esposa de Taehyung.

–¿Cuándo pensabas decírmelo?

–No pensé que fuese necesario, creí que al mirarte… –escaneó mi cuerpo unos segundos–. Querría estar contigo y dejaría esa actitud tan infantil.

–¿Por qué lo dices de esa manera?, ¿qué tiene que ver mi apariencia? –me crucé de brazos.

–¿No dijo nada de tu apariencia?

Sí, sí dijo que he estado subiendo de peso.

–Bueno… Me dijo gorda.

–¿Y eso es todo?

REFLEJO ➳ Kim TaehyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora