La Princesa Vampiro; Un Mundo Desconocido

6. - Capítulo I : Él Aventurero De La Perdición

Esa condición le jugaba mucho en contra. Sus sentimientos, sus emociones, sus instintos y sus pensamientos se alteraban con el paso del tiempo.

Lo que en un principió le definía cómo una humana y un ser vivo ya no era más que un lindo recuerdo.

Todo su ser ya estaba completamente entregado a la energía negativa, el proceso de vampirificación había finalizado.

En resumidas palabras, la princesa Aki ahora era consciente de que no podía confiar en sus emociones. Si sentía seguridad, probablemente estaba en peligro al igual cómo si lo estuviera.

Estar oculta resultaba un problema, y sentir cada aspecto que le rodeaba era algo muy agotador.

Caminaron durante varias horas por un camino establecido y creado por los humanos. En el trayecto no tuvieron mayores dificultades, y el agotamiento que se mencionaba antes era difícil disiparlo.

Al estar activo las 24 horas del día resultaba en una ardua tarea el relajar los sentidos un minuto. Se podría decir que estaba sometida a un estrés muy grande, pero debido a su condición, lo único que sufría era un cansancio que no podía calmar.

Nonek, por otro lado, parecía ser consciente de los estados anímicos de la princesa Aki. Esto era difícil de creer sabiendo que un monstruo era extremadamente hostil, y él no encajaba en esa descripción hasta el momento.

Algo estaba claro para la joven princesa Aki. Estaba en presencia de un temido hechicero de las artes oscuras. Un necromantico en hueso y espíritu.

Ahora, eso se refutaba inmediatamente al saber que manipulaba la espada cómo el arco a la perfección, cosas que un necromantico jamás haría debido a su obsesión por controlar la magia negra.

Entonces, ¿Qué es lo que era este llamado Nonek?.

La salvó de un héroe legendario, acabó con su compañero, venció a varios grupos de asesinos reales con poco esfuerzo aparente. No era el historial de un no muerto cualquiera, pero posiblemente fuera el primero en tenerlo.

Durante el silencioso viaje la princesa meditó sobre sus libros de magia que había leído, y a su vez se lamentó el de no haber tomado algunos antes de huir de su palacio.

El recuerdo cada vez se volvía más frío, y aquellos actos que le parecían atroces ya no eran más que simples actos violentos y sanguinarios.

—Disculpa —Repentinamente dijo la princesa Aki hacia Nonek.

—¿Qué quieres, princesa?.

—Tu puedes utilizar magia, ¿verdad?.

—Así es, princesa.

—Entonces... ¿Podrías enseñarme a utilizar magia?.

Nonek Blackburn se detuvo y volteándose a ver a la princesa observó detrás de esa máscara con fines desconocidos.

—¿Crees que soy el apropiado para enseñarte algo que requiere un vínculo con el alma de un individuo? —Preguntó seriamente mientras se acercaba hasta la princesa, quien se mantuvo firme en su posición, incluso desafiante.

—Sí, aún que sea magia negra, me resultaría muy útil... —Sin ser capaz de poder terminar su oración, Nonek la interrumpió con un abrupto "No".

Luego, volvió a voltearse y continuó caminando. La princesa fue detrás de él, y tras haber pasado un par de minutos le volvió a preguntar lo mismo, recibiendo otro "No" de respuesta.