"Bella Traición" (Rocky Lynch y Tu) (HOT)

Capitulo 12: Necesito tu ayuda

¿Que diablos me sucede?. Son las tres de la mañana y despierto de golpe, porque estaba soñando que Rocky y yo teníamos relaciones. ____ a ver... ¿En verdad te gusta el?. Me di muchas vueltas en mi cama, hasta que decidí sentarme un rato en el sofá. Subí ambas piernas sobre él, y recargue mi cabeza en el cojín. Siempre suelo dormir con una camiseta vieja de manga larga con mis bragas. Lo sé, compro tanta ropa y solo eso me pongo para dormir. Deje caer mi cabeza sobre el sofá cerrando mis ojos.

NARRA ROCKY: 

No es normal esto que hago. No debo de enamorarme de ella, pero ella es todo lo que he buscado. Me odiare mil veces si esto termina mal. Y no deseo que suceda nada malo. Vamos Rocky relájate, solo es una chica. 5 años de diferencia, pero ni los aparentamos. Solo deseo verla. No he podido dormir, pero los demás guardias se andan cayendo de sueño. Trepe hacia su balcón, esperando que estuviera abierto. Tome la perilla y fui moviéndola, logrando abrir la puerta. Tenía su lámpara prendida, mientras ella se encontraba dormida muy seximente en su sofá. Cerré el balcón para que el aire fresco no me delatara. Traía solo una playera de manga larga, que le caía de un hombro. Sí que estaba grande la playera. Estaba un poco levantada y pude ver sus bragas azules. Tenía su pierna doblada, muy bien formada y bronceada.

No resistía mas, deseaba que fuera solo mía. Sin que ella se preocupara por el otro idiota. Mordí mi labio al pasar mi vista sobre ella de nuevo. La habitación se enfriaba un poco por una de las ventanas abiertas. La playera le quedo pegada del pecho y pude ver sus puntas erizarse por el frio. Mordí mi labio de nuevo y camine hacia el balcón con las intenciones de irme. “¿Cuanto tiempo has estado aquí?” escuche una voz adormilada decir. Me gire al verla, se había enderezado en el sofá, pero creo que se le ha olvidado que no lleva short.

- No mucho… - conteste.

- ¿Que haces aquí Lynch?

- Solo…- trague saliva - Quería verte… Me voy - seguí mi camino.

- Espera Rocky…

Me quede parado sin verla, esperando un gran regaño.

- Ven… 

La mire y luego camine hacia ella…. Bajo sus piernas del sofá dándome espacio para sentarme.

NARRAS TÚ: 

- Necesito que me ayudes - dije sin mirarlo.

- ¿A qué?

Me gire a verlo, tome su rostro con mi delicada mano. “A entender a quién quiero”. Sonrió leve y se acercó a besar mis labios suavemente. Rodee su cuello con mis brazos, pegándonos mucho más. Esta vez se sentía diferente, ya que yo me estaba dejando desde el principio. Pronto me encontraba sobre sus piernas; mis rodillas se encontraban a cada lado de su cadera mientras nuestro beso subía de tono. Sus manos subieron de mis rodillas hasta llegar a mis glúteos y apretarlos un poco. Mi piel se empezó a erizar por completo al sentir su tacto. Cuando sus manos llegaron más al centro no pude evitar soltar un gemido en sus labios. Lo cual hiso que el sonriera. Me hiso separarme un poco, para quitar su camisa.

Pase mis manos sobre su increíble pecho. Sus manos subieron por el interior de mi playera levantándola y sacándola del camino. Mis pechos yacían desnudos frente a él, mordió sus labios de una manera tan excitante. Con ayuda de sus manos me acerco suavemente a su rostro, pero su objetivo no era besar mis labios, sino saborear mis pechos. Paso su lengua por uno de ellos mientras masajeaba el otro. Tomaba su cabello incitándolo a seguir. Me hacía sentir tan bien. Dio leves mordiscos para luego cargarme en sus piernas y dejarme en la cama.

Estaba parado frente a mí. Lo observe… tenía una gran erección en su pantalón, comenzó a desabrocharlo para luego subir encima mío. Nuestros besos subieron de apasionados a deseosos, mezclado con urgencia y desesperación. Pronto ambos nos encontrábamos desnudos completamente sobre mi cama, debajo de mi sábana blanca de ceda. Nuestras respiraciones cada vez eran más agitadas, soltábamos algunos gemidos y una ligera capa de sudor salía de nuestros cuerpos. Beso mi cuello, dejando un ligero dolor en él. Claro estoy segura que me ha de dejar marcada. Su mano abrió un pequeño paquetito. “¿Y… eso?” pregunte curiosa.

“Es…para cuidarnos” dijo un poco agitado por la excitación.

Efectivamente era un condón que puso sobre su gran miembro. Subí mis manos por sus increíbles brazos, y nuestros labios volvieron unirse en un cálido beso. Sin dejar de besarnos sentí como fue separando mis piernas de poco a poco. Para luego hundirse en mí, solté un pequeño grito que fue ahogado en un beso. No se movió, para que pudiera acostumbrarme a su miembro. Tomo mis piernas y las enredo sobre su cintura. Empezó a embestir lentamente y suave. Gemidos podían escapar de nuestras bocas. Mientras nuestros cuerpos se hundían en el placer. 

* * * 

6:25 am según mi reloj de buro. Un movimiento extraño me hiso levantar mi cabeza. Me encontraba acostada sobre el pecho de Rocky, mientras el dormía tranquilamente abrazándome por la cintura.

Mire mi cuerpo, ambos seguíamos desnudos sobre mi cama. Increíblemente, Rocky cumplió con su objetivo, y yo cumplí con el mío. Ahora me quedaba claro que, lo quiero a él. Sin importar que sea un guardaespaldas. Alcance a tomar mi camisa con la que dormía y me la puse, pero pronto sentí unos brazos trayéndome de nuevo a la cama. Subió su cuerpo sobre el mío y dejo un beso en mi cuello. 

- Buenos días hermosa… - Siguió besando mi cuello con una gran delicadeza.

- Bu...Buenos días - titubie. 

- Porque te pones tu ropa… te ves mejor sin ella - dijo mirándome a los ojos.

- Rocky debes salir de aquí, recuerda que siempre mi padre les habla a todos los de seguridad a las 7

Miro el reloj y se giró a verme

- No quisiera salir de aquí - poso su mano en mi pierna sobre la ligera sabana - ¿Te ha gustado lo de anoche?

Sentí como mis mejillas se tornaban rojas

- Si… - dije apenada.

- Podemos repetirlo las veces que quieras - acariciando mi pierna y pegándome más a su cuerpo.

- A… ti ¿te gusto? - pregunte nerviosa.

- Para ser tu primera vez, fue increíble… - dejo un pequeño beso en mis labios.

- Te diste cuenta…

- Así es mi pequeña… - Me dio un pequeño beso que compartimos - ¿Que haremos hoy? 

- Creo que nada - me acosté de lado mirándonos de frente - Charlie me pidió permiso para acompañar a su señora a la clínica…

- Si quieres salir sabes que puedo manejar

- Es cierto… ¿A dónde quieres llevarme?

- A un lugar donde estemos solos - me tomo de la cintura. 

- ¿Tu casa? - pregunte ingenua y subiendo mi mano por su brazo.

- Que buena idea - sonrió - Debo salir a que me vea tu padre, di que saldrás con Scarlett 

Me rei

- Está bien 

Ambos salimos de la cama. Rocky se arregló y salió con cuidado de mi cuarto. Me encontraba todavía sentada en la cama, mientras en mi mente se aparecían imágenes de anoche. Mire mi cama y las sabanas revueltas sobre ella. Sonreí tontamente y luego fui a mi ropero a buscar algo que ponerme para salir con Rocky. Su casa… 

¿Cómo será su casa?.

Algo humilde a lo mejor, no lo sé, jamás se lo he preguntado...