Capitulo 43: "No si puedo evitarlo"

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NARRAS TÚ:

Después que todos mis alumnos se fueran a casa, podía irme tranquila. Un escalofrió corría por mi cuerpo, después de la presentación. Me sentía realmente nerviosa, mas no sabía que me pasaba realmente. Camine con mi bolso rumbo a la salida del teatro. Ahí me tope a la maestra Nancy que despedía a unos alumnos. Aguarde un poco y cuando estuvo libre me despedí de ella.

Fuera del teatro se encontraba un automóvil plateado, muy conocido para mí. Me cubrí con mi chaqueta, el frio se avecinaba lentamente. Abrí la puerta con cuidado y me subí rápidamente, cerrando la puerta tras mío.

- Gracias – dije sonriendo dándole un beso en su mejilla.

- De nada linda – deposito sus manos en el volante y arranco - ¿No tuviste problemas?

- No... bueno solo una niña que tuvo problemas de vestuario – sonreí levemente mientras miraba la calle obscura.

El rio levemente.

- Tienes esa sonrisa que encanta ____... ¿Es acaso que te gustaría tener una niña?

- Hay Arturo – me gire a verlo – Sabes que siempre ame a los niños

- Lo sé – sonrió mientras me miraba de reojo – Siempre lo decías y lo sigues diciendo

Sonreí.

- Sé que pronto te veré con una linda pancita de embarazo

Me sonroje levemente y pase mi mano sin querer por mi vientre.

- ¿Lo crees?

- ¿Por qué no? – me miro después de detener el auto en un semáforo – Eres joven y bella, dios te mandara mil hijos

- No gracias, no quiero tantos – me reí.

- Bueno... al menos una pequeña que sea igual a su madre

- O un pequeño igual a su padre

Arqueo la ceja.

- Primero la niña –se rio.

- Oh vamos...

- Por cierto, ahora que recuerdo – me miro detenidamente – Que bella canción

- Gracias – sonreí.

- Fue muy emotivo todo el evento pero más ese momento.

A pesar de platicar con Arturo, no dejaba de pensar en aquella imagen que visualice entre el público del teatro. El porte de chico malo seguía presente, sin embargo al bajarse sus lentes obscuros, pude apreciar su rostro angelical. No, no podía ser el en verdad... el está en la cárcel.

- ¿____? ¿Estás ahí?

- Ah, disculpa.... ¿Decías?

- Que ya llegamos a tu casa

Mire a mí alrededor.

- Oh es cierto, muchas gracias

- De nada – sonrió – Siempre es un placer

- Pasa, no creo que tarde la cena

- Claro

Arturo se quedó con Eleazar en la sala. Mientras yo subía a darme una ducha rápida. El agua estaba tibia, pero a la vez estaba refrescante. Mi alma descansaba en paz ya que tendría dos semanas de vacaciones. "Por fin" pensé. Enrolle una toalla en mi cuerpo, para luego con otra secar mi cabello.

"Bella Traición" (Rocky Lynch y Tu) (HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora