"Bella Traición" (Rocky Lynch y Tu) (HOT)

Capitulo 49: ¡Yo te amo!

NARRAS TÚ:

Después de admirarme en el espejo de mi peinador. Gire la vista a mi vestido de novia que se encontraba en la cama. Se veía realmente hermoso, era único. Confeccionado por una gran modista. La envidia de cualquier chica que desea un vestido como este. Sin embargo, aunque este día debería ser de felicidad. Me encuentro apagada, mi corazón late desenfrenadamente. ¿Qué estoy haciendo? No, no puedo arrepentirme ahora. Me puse aquel vestido blanco, frente a mi peinador. Debía admitir que, me veía realmente hermosa. Traía todo mi cabello recogido, y algunos caireles saltaban de un lado a otro. Pase mi mano por mi vestido, mientras cerraba mis ojos fuertemente, dejando caer una lágrima por mis mejillas.

Abrí mis ojos, tras oír un trueno. Fue donde me di cuenta, que me encontraba acostada en mi cama, me senté rápidamente, mientras analizaba el lugar. Traía puesto un blusón gris, y me abrace rápidamente al ver como el balcón se abrió fuertemente. Afuera había una gran tormenta y el viento frio se apodero de la habitación. Traía solamente el blusón y mi ropa interior, la cama solo contaba con la sabana de seda lila. Mi cabello caía sobre mi pecho, aun se encontraba un poco húmedo. ¿Qué sucedió realmente?

- Despertaste – dijo sacándome de mis pensamientos.

- Bradley – dije cubriéndome un poco con la sabana, aun me daba pena, aunque recordando, una vez me entregue a él por un coraje con Rocky.

Paso enfrente de mí y cerro el balcón. Traía solo su pantalón gris de algodón. Y una toalla blanca en rodeando su cuello.

- ¿Qué hora es? – pregunte incrédula, mi reloj digital no funcionaba.

- Son las 3:45 am – dijo mirando su celular que deposito en mi peinador y la toalla la coloco en la silla – Se fue la luz, no solo aquí sino en toda la cuadra.

- Ya veo... sigue lloviendo.

- Sí, no ha parado desde que llegaste. – se sentó a mi lado y poso su mano en mi frente – Por fin ha bajado tu fiebre

- ¿Fiebre?

- Si, te desmayaste al llegar a casa, venías empapada. – tomo mi mano entre las suyas – y como no dejo de llover, tu mama me pidió que me quedara.

Me quede callada mientras miraba nuestras manos entrelazadas. El anillo brillaba a pesar de haber obscuridad.

- ¿Charlie llego a su casa? – dije rápidamente al recordarlo.

- Si, nos puso al tanto de todo, pero... ¿Por qué no tomaste un taxi? ¿O porque no me hablaste? Pude haber ido por ti amor.

- Lo siento, deseaba caminar un poco – evite tocar el tema de mi encuentro inesperado – Luego me agarro la lluvia.

- Al menos ya estas mejor. – acaricio mi mejilla.

- Gracias por cuidarme – sonreí.

- De nada pequeña

Acerco mi rostro y deposito un cálido beso en mis labios. Seguí su beso más sin embargo, me aleje de él cuando la imagen de Rocky besándome apareció en mi mente. ¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué me preocupo de eso? El me beso, si lo admito, pero... estoy comprometida con Bradley, y Rocky jamás volverá a besarme. Así, que debía hacer lo que cualquier prometida, besar a mi novio sin preocuparme de nada.

- Ya que estas bien, iré a dormirme al cuarto de huéspedes...

Levante mi rostro, mientras él se levantaba.