The Nile River; CHAENNIE

45. La chispa de mi vida

No es el final ajio, es el próximo capitulo. Ya sé que dije que seria este pero soy mala haciendo cálculos :') además de que "dividí" el cap final así que será el próximo por esa razón. 

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Rosé trataba de permanecer atenta a la cantidad de personas que la saludaban desde las afueras del palacio, estaba en el balcón de los aposentos reales presentándose ante el pueblo como la nueva reina. Luego de iniciada la ceremonia hace unos minutos atrás, Chanyeol saludo a todo lo más rápido posible antes de ir al calabozo a hablar con Jennie. Rosé sabía que el tiempo estaba en su contra, quería pedirle ayuda a Chanyeol con eso pero al parecer los dioses tenían otros planes para ella.

Su desesperación comenzaba a subir, solo quería salir corriendo de allí e ir a hablar con Jennie para explicarle todo.

—¿Cuánto tiempo más tengo que estar aquí? — pregunto susurrando hacia su lado derecho en donde la acompañaba su padre. El sacerdote la miro con el ceño fruncido soltando una risa.

—Tú puedes irte cuando quieras— dijo con una sonrisa. Rosé lo miro un instante antes de esbozar una pequeña sonrisa incomoda. Miro nuevamente al pueblo que parecía querer quedarse allí por el resto del día.

—Me iré— anuncio dándole una mirada de duda a su padre. El hombre asintió abriendo la cortina que separaba la habitación del gran balcón de mármol.

Al entrar nuevamente a la habitación se encontró de lleno con la ex reina observando el lugar. Parecía estar esperándola a ella, Rosé resoplo a sus adentros y se dirigió hasta la mujer.

—¿Me esta esperando? — pregunto. La mujer soltó un risa asintiendo. —Pues dígame rápido que necesita, no tengo mucho tiempo ahora— termino por decir con la vista fija en el suelo. Su desesperación por hablar con Jennie y la rabia que sentía por tener a esa mujer en frente provocaban en ella un sinfín de emociones. La mujer soltó una carcajada acercándose a la chica.

—Tomaste tu papel de reina muy enserio— contesto la mujer.

—¿Puede decirme rápido lo que tiene que decir? Los gobernadores deben estar esperando para la comida y usted está aquí haciéndome perder el tiempo— dijo con calma, la mujer resoplo con furia.

—¿Por qué me hablas así? — pregunto la ex reina con furia. Rosé guardo silencio mirándola de hito en hito.

—Bueno, como no tiene nada que decir. Asumo que no es nada importante— continúo. —Aprovecho de decirle que a partir de hoy Somin ya no será más su dama— dijo entrelazando sus manos. La mujer la miro con furia.

—¡No puedes hacer eso, Somin es mi sirvienta y yo decidiré cuando deje de servirme! — alzo la voz recriminándola. Rosé mantuvo su tranquilidad externa.

—Somin ahora es la hermana de la reina— aclaró. —Y tal como yo no quiero que usted se acerque a mí, no quiero que se acerque a nadie de mi familia, a no ser que sea un tema de estado— explico con una ligera sonrisa. —Le asignare a otra chica del harén para que sea su nueva dama.

—Roseanne...

—Tengo que irme ahora— anuncio acercándose a la puerta. —La veré en el almuerzo— dijo para salir del lugar.

Toda la rabia que sentía la compacto en su dentro al hablarle a esa mujer. Pero tenía otra cosa que hacer, algo que le urgía mucho más. Tomando en cuenta que sus actividades habían terminado, por fin tendría la oportunidad de hablar con la princesa.

Salió de la habitación apresuradamente, caminó con prisa por los pasillos viendo como cada persona que la veía pasar se detenía para hacer una reverencia. Trato de restarle importancia a ese sentimiento extraño que sentía cada vez que veía a una de esas personas y continúo bajando por el palacio hasta llegar al calabozo.