❦ ᴏᴜʀ ꜱᴛᴀʀᴛ ʙʏ ᴀᴄᴄɪᴅᴇɴᴛ ❦ 『KσσƙMιɳ』

Cᴀᴘíᴛᴜʟᴏ 21.

Nuevamente llegaba a aquel lujoso Pent-House.

Lo tenía todo, absolutamente todo.

Pero...

Se sentía vacío.

―Ya llegue~

Un pequeño lorito amarillo con mejillas anaranjadas caminaba hacía él.
Al ver sus pies descalzos enfundados en medias solo se dedicó a pelliscarlas.

NamJoon se agachó y cologo uno de sus dedos para que su lorito se subiera en él.

―¿Me has extrañado Plumitas?¿Te portaste bien estando suelto?

―Sip― Dijo simplemente aquel loro, a penas podía articular unas simples palabras.

―Mmm...―Nam observo a los alrededores, todo parecía estar en orden―Esta bien... Te mereces un poco de manzana!

―¡Manzana!¡Manzana!

NamJoon solo rió.

―Así es, manzana.

El lorito se colocó en su hombro mientras el cortaba unas cuantas rebanadas de manzanas para aquel animal como premio.

El tiempo transcurrió tranquilo.

Fué tiempo de acostarse a dormir. Al ir a su habitación encontro un desastre de aquellos en los que nunca habia pensado...

Su cama llena del relleno de una almohada y en el piso muchas semillas esparcidas al propósito.

―¡Plumi!¡Pero que hiciste loro, tonto!

―Y-yo no fuii!

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Otro día empezaba y JiMin se preparaba tranquilamente para su cita con el doctor, oficialmente... Según sus cuentas tenía cinco meses y tres semanas... Se le habían pasado algunos días pero bueno... Lo importante era el hoy.

Bajo las escaleras y desayuno amenamente con su madre. Conversaban sobre que sería el bebé.

―Mientras sea sano; todo estará bien!―Dijeron al mismo tiempo.

Solo sonrieron.

―JungKook... ¿Cómo se comporta contigo?

―Por ahora bastante bien, es atento y esta pendiente de el bebé y de mí. Espero que siga siendo así.

―Entonces...¿Son pareja?

JiMin lo meditó.

―No.
―Hasta el momento solo es el padre de mi bebé, una vez que nazca haremos una prueba de parternidad y ahí veremos que hacer...

―Yo diría que te esta conquistando. Fíjate que hasta flores te trae. Una vez que nazca ese bebé, seguro que formalizaran.

Un bocinazo sonó afuera.

―Debe ser él. Nos vemos mamá.

Le dió un beso en la mejilla y se lenvanto con su ya inflado vientre.

Al salir a la acera pudo ver a JungKook retarle a unos niños que venían en la parte de atrás.

¿Quienes eran?

―¡Callense!¡Son tan insoportables, su madre tiene miles de choferes para que los lleven a sus escuelas y me los enchufa a mí!¡Callense si no quieren que los baje en algún descampado!