Capitulo 17

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Deku intento muchas veces contactar a Baguko, le marco cientos de veces y le envío docenas de mensajes pero simplemente no había respuesta. Mentiría si dijera no estar preocupado pero a estas alturas esa preocupación se combinaba con ansiedad, ya que ese número si siquiera estaba seguro si era de el.

Quería por lo menos saber que estaba bien, no esperaba que le explicará el motivo de haberlo dejado plantado o del hecho de porque había sugerido de esa manera, no pedía ninguna explicación solo saber si estaba bien.

-Baguko...Por favor, respondé

Decía entre lágrimas mientras apretaba el celular contra su pecho.

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En las montañas Bakugo había estado de pésima actitud, si de por sí ya era muy irrasional ahora lo era aun mas, casi mataba a Kirishima cuando esté le ofreció a entrenar juntos y de Todoroki ni hablemos.

Sus compañeros no lo entendían y habían tratado de hablar con él para saber que lo estaba molestando pero el simplemente no contestaba, incluso ignoraba a los profesores.

Durante una de las comida Baguko se quedó cerca de un barranco, por más que se forzaba a olvidar esa escena no podía ya que se repetía en su menté una y otra vez, además de que ahora no había manera de justificar el hecho de que le eran infiel.

-Hey, Bakugo, bro te estoy hablando.

Cierto pelirrojo llevaba unos minutos llamándolo y el rubio no respondía a nada, no tuvo de otro que zarandearlo como costal de papas.

-¿Que quieres maldito extra?

-Calmate y come, se que no has comido nada desde la mañana y que incluso te has saltado comidas, por muy fuerte que seas no eres inmortal.

Kirishima le llevaba un plato de comida y una jarra con agua ya que no lo había visto probar un solo bocado en el desayuno de las días anteriores y aunque el rubio presumía de ser muy resistente no iba a soportar los dos meses que faltaban si seguía así.

-No quie...

-Nada de que no quiero dije cometelo o si no te besaré.

-Eres un maldito idiota.

El ceño del de ojos color carmín se frunció aún más de lo normal y se llevó una cucharada de estofado a la boca volviendo a ver a la nada.

-Vaya que te desagrado la idea.

Kirishima tomó lugar al lado de su amigo le sirvió un vaso de agua para después acostarse sobre el suelo con la mirada al cielo.

(Era demasiado obvio que lo rechazaría aunque no
está mal soñar.)

Los profesores que estaban a cargo de la clase A habían decidido que terminarian con el entrenamiento del grupo dos horas antes, los reunieron a todos y Midnight llegó con un par de cajas a donde estaban todos reunidos.

-Hoy hemos decidido darles la noche libre clase, no todo el campamento será de entrenamiento, además esto les animará un poco.

En eso Aizawa-sensei abrió las misteriosas cajas dejando ver latas de refrescos, muchas golosinas y chucherías.

Mientras tanto Cementos y Mignight instalaron una sala de proyección al aire libre para ver algunas películas. La clase enseguida se animó y empezaron a sentarse en conjunto mientras repartían las botanas y las bebidas.

-Iida deberías ir a relajarte con tus compañeros.

Aizawa estaba en una esquina observando a todos y se le hacía raro que dos no estuvieran en la bolita.

-Profesor como el representante de la clase debo cumplir mi deber y cuidar de mis compañeros, aunque es una película podría haber algún accidente.

-Bueno pero no veo a Bakugo.

En eso un pelirrojo se acercó y tomo unas latas de soda junto a un bol de papas con palomitas nterrumpiendo la conversación de profesor y alumno.

-Está en la tienda iré a verlo, llevaré algunos de estos y trataré de convencerlo de unirse.

Aizawa asintió y Iida le agradeció por cuidar de Bakugo.

Kirishima sabía que algo serio le sucedía a Bakugo y le molestaba verlo en ese estado. Quería ayudarlo pero no encontraba cómo ya que no conocía el problema, tenía miedo de preguntarle pero no sabía que tan delicada era la situación por lo que lo único que podía hacer era quedarse a su lado como el buen amigo que quería ser, ya que pedir ser algo más estaba fuera de alcance.

Me engañaste primeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora