-¿Estás listo?
-Para nada listo, ni siquiera sé en que salón estare.
Era un miércoles por la mañana y Deku había estado esperando pacientemente a Toshinori al pie del edificio donde vivía. Ya había alistado sus cosas, el nuevo uniforme y claro, las libretas donde anotaba cada una de las descripciones de los héroes que conocía. Ahora solo quedaba llegar a la escuela, recibir instrucciones, instalar sus cosas y conocer a sus nuevos compañeros de clase.
-¿Ya no olvidas nada?
-No, he metido todo e inspeccione muchas veces mi equipaje.
-Muy bien, es hora de irnos.
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¿Lo has visto Todoroki?
-¿Ver qué?
-Al chico nuevo, por que más estarían abriendo un nuevo compartimento en los dormitorios.
-Un nuevo profesor.-Vamos, para eso está el dormitorio de los profesores.
-Yo digo que es una chica, ya quiero conocerla.
-Mineta, la sección donde está el compartimento es el área de hombres.
-A nadie le hace mal soñar Kirishima.
Mineta se alejó del par y se fue a su asiento. Momo venía llegando y saludo a Todoroki y a Kirishima muy alegremente.
-¿Por qué tan tarde Momo?
-Aizawa sensei me retuvo fuera de los dormitorios, me pregunto si ya todos habían salido y si la nueva habitación ya estaba limpia.
-Eso quiere decir que de verdad llegará un nuevo alumno, ¿Me preguntó que tipo de persona será?
-No lo sabremos hasta verlo, además puede que no llegue hoy, ¿Tu que opinas Todoroki?.
-Tal vez solo sea alguien de intercambio.
-Si, puede ser. Por cierto Kirishima, ¿Peleaste con Bakugo?
El pelirrojo se quedó completamente callado, incluso el semblante de Todoroki había cambiado ante esa pregunta.
-Al.. algo así, pe… pero es momentáneo.
-Ah, ya entiendo, espero que las cosas se arreglen pronto, sinceramente eres el único que puede manejar su carácter.
-Si verdad…
Kirishima sonreía nervioso, sinceramente se sentía medio incómodo. El rubio no estaba muy lejos de ellos y pudo sentir su mirada sobre él cuando se pronunció su nombre. Todoroki pareció percatarse y jalo al pelirrojo por los hombros.
-Será mejor ir a nuestros asientos, Aizawa sensei no debe tardar.
-SI, eso es cierto.
Tal y como lo había dicho Shoto, Aizawa no tardó en entrar por la puerta del salón con un libro en su mano y su habitual mirada cansada.
-Todos tomen asiento, hay algo que debo anunciarles.
Todos se quedaron callados y expectantes a las palabras de su profesor.
-Denle la bienvenida al nuevo alumno, a partir de hoy será uno más en la clase. Adelante, ya puedes pasar, presentate como gustes.
Izuku tardó un poco en entrar, y al repasar los rostros de sus nuevos compañeros se quedó completamente sorprendido al ver rostros ya conocidos. Pero la sorpresa también fue para los allí presentes que ya lo conocían.
-Vamos no seas tímido chico, presentante.
-Oh, si, si. Mi nombre es Izuku Midoriya y es un placer conocerlos, espero llevarme bien con ustedes.
Finalizó con una gran sonrisa.
-Bien Midoriya, toma asiento en aquel lugar y Todoroki, tú estarás a cargo de enseñarle todo después de clase.
Todoroki estaba muy sorprendido de ver a su novio en el aula, estaba que no se la creía debido a que sabía que Izuku no tenía don, nada le parecía coherente y para ser sincero estaba lleno de dudas.
-¿Me escuchaste Todoroki?
-Si profesor.
-Muy bien, podemos comenzar con la clase, ve a tomar asiento.
El único lugar vacío era sobre la fila en donde estaba sentado Bakugo.
Se encaminó a su lugar y no pudo evitar detenerse cuando pasó al lado del rubio, este lo había agarrado de la muñeca pero de un manotazo se safo del agarre y le resto importancia, pues a quien quería saludar rápidamente era el bicolor que no le quitaba los ojos de encima.
-Hola Todoroki.
Susurró Izuku y le sonrió dulcemente.
Todoroki por su parte solo lo observaba y con las manos las manos alcanzó la muñeca del menor, la miro brevemente y le dió un beso.
-¿Te lastimó?
-Para nada, estoy completamente bien.
-Hay mucho que debes explicarme.
-Lo se, te lo explicaré todo más tarde.
-Muy bien.
Aizawa giro la cabeza en la dirección de ambos, y Todoroki soltó inmediatamente la mano del peliverde. Aizawa regreso su mirada al pizarrón.
-Por cierto, te vez muy bonito con el uniforme puesto.
Ante esto, fue sumamente difícil que Midoriya pudiera ocultar su rostro completamente rojo.
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Me engañaste primero
FanfictionBakugo mi mejor amigo de infancia con el paso de los años se convirtió en mi amor imposible por mucho tiempo. Pero las oportunidades se presentan una vez en la vida y se aprovechan, aún así lo que está destinado a no ser nunca será ¿Quién podrá sana...