Capítulo 9

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Si, a Bakugo estaba que se lo llevaba el diablo por lo que había sucedido con Denki. Tomo la desición de pedir prestado el celular a alguien pero no quería que nadie supiera a quien iba a contactar y mucho menos quería que guardarán el número para posibles molestias en el futuro.

(Maldición no está Iida.)

En ese momento miro como Todoroki se dirigía a la salida y aunque odiace la idea de pedirle ayuda no quería que se formaran ideas erróneas en Deku por el hecho de no poder hablar.

-Mitad y mitad necesito hablar contigo.

El bicolor solo asintió con la cabeza y dejo que Bakugo saliera primero. Una vez alejados de sus compañeros por fin el rubio hablo.

-Esto no te lo pediría esto si no fuera importante pero necesito comunicarme con alguien y mi celular se ha roto.

-Puedes hablar de la sala de profesores si es importante.

-No puedo dar los datos de esa persona por qué no es familia, ¿Me entiendes?.

La verdad es que Todoroki no entendía que tipo de persona debía ser como para no proporcionar más información.

-Lo siento pero no tengo batería,

Saco el celular para demostrar que no mentía.

-¿Para que mierda lo tienes entonces?.

El contrario solo se encogió de hombros.

-Dile a Momo.

Todoroki se volvió y se fue caminando al comedor. A decir verdad se la paso chateando con su nuevo conocido hasta muy tarde por lo que se olvidó de cargar el celular.

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Después de haber pasado un agradable desayuno, Midoriya llego a casa con su ánimo habitual importandole poco si las cosas de Bakugo estaban o no.

-Creo que tomaré un baño y mientras se da la hora para ir a la escuela haré las tareas de los siguientes días.

Se metió a la ducha como lo había planeado y después se puso a hacer sus deberes, sin embargo no pudo evitar releer su conversación nocturna con Todoroki. Le daba risa todo lo que  el le había dicho que haría si tuviera un  quirk de hielo o fuego.

-Su foto de perfil es tierna.

Deku dejo el celular para ponerse el uniforme de la escuela pero el celular comenzó a vibrar, emocionado lo tomó en sus manos pensando que era aquel que lo tenía preocupado pero el nombre de contacto era el de su madre.

Durante la llamada Inko le expreso a Izuku lo mucho que lo extrañaba junto a las ganas que tenía de verlo, admiraba que durante el tiempo que Midoriya vive por si lado no la haya buscando para pedirle ayuda pero que se sentía muy sola por lo que le pidió que la visitará.

-Esta bien mamá, iré a la casa después de salir de clases, yo también te extraño y puedo quedarme unos días contigo.

-Me alegra escuchar eso, prepararé tu comida favorita...ya quiero que llegue la hora.

-Yo también mamá, te tengo que dejar debo ir a la escuela.

-Bien Izu, cuídate.

La llamada termino y el peliverde para dejar de pensar en cosas molestas decidió apagar el teléfono, igual si el no se había comunicado en toda la mañana era seguro que ni en la tarde lo haría.

El peliverde llego a la escuela con calma y no se vio a sorprendido cuando sintió que alguíen se colgaba de su brazo.

-Buenos tardes Inna ¿Lista para ir a levantar el reporté?.

-Pense que lo habías olvidado, pero si estoy lista.

-Entinces vamos ya que aún tenemos tiempo antes de la clase.

-Si, gracias por ayudarme.

Midoriya alboroto el cabello de su compañero dándole una de sus sonrisas hermosas dejando a la pequeña con un notorio sonrojo.


Me engañaste primeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora