Con un temperamento en crecimiento Rengoku fue directamente a la habitación que le había asignado a Uzui en la mansión. Cómo ambos eran pilares, las reglas del Clan exigían un trato formal y las estancias más cómodas y bonitas de la casa, tenían además un batallón de personal que estaban dedicados a estar al pendiente de sus necesidades. La habitación del pilar del sonido quedaba frente a un hermoso jardín, hacía el lado sur, Rengoku se encontraba un poco más al centro, con vista un jardín interno al que solo los miembros de la familia podía acceder.
El Shōji se abrió estrepitosamente quebrándose en cuanto choco contra su destino. El albino se sobresalto junto a las mujer que en ese momento estaba sirviendo el desayuno, por la sorpresa la femina pego un pequeño grito y al cabo de segundos apareció un par del séquito de Juro. Uzui quedó levemente impresionado por la rápida acción de las mujeres, reconoció solo a una de ellas. Jiro se encontraba en escena con su naginata y junto a ella, estaba una chica de pequeña estatura, lentes cuadrados reposados en su cabeza y largos cabellos color cobrizo amarrados en una cola alta, llevaba dos pistolas en las manos, el característico chasquido del seguro alertó los sentidos del albino. La peliborgoña reconoció rápidamente el dilema, alzando su brazo para detener un ataque de su acompañante.
—Alto Mizu, es Kyojuro-san— la aludida estrecho sus ojos, sin reconocer bien a su adversario, levantando las pistolas con cautela. Uzui volvió a respirar con normalidad, mientras Jiro se acercaba a ellos algo dudosa— Kyojuro-san, no es bueno asustar al personal de esa manera. Pensamos que era un demonio—
El bicolor no pareció escucharla.
—Necesito hablar con el pilar del sonido a solas— ordenó con voz tajante, la mujer que había traído el desayuno se espabilo haciendo una rápida reverencia mientras salía corriendo de la estancia. Jiro y Mizu aún estaban en el jardín, al ser parte del séquito de la jefe de familia el pilar no tenía jurisdicción sobre sus acciones, por lo que no era necesario seguir sus órdenes. Rengoku se volvió a ellas, Mizu retrocedió unos pasos y mantuvo las pistolas en posición reconociendo la hostilidad en el ambiente. A pesar de que la chica carecía de una buena vista, sus instintos era fuertes y tenía ese tipo de premoniciones que la ayudaban a actuar antes que el enemigo. Por su parte, Jiro se mantuvo impacible aunque cambio el peso de la naginata en sus brazos, a pesar de su apariencia pacífica era la favorita de Juro. Fuerte, gentil y calculadora, sus ataques usualmente eran de largo alcance y eran los más efectivos de todo el séquito— No creo que necesites estar aquí si sabes de qué se trata Jiro— ella pareció cohibirse un poco por el trato brusco, pero no estaba intimidada. Sabía que por más molesto que estuviera, él no buscaría pelear contra ellas. El bicolor hizo un gesto con la barbilla— Déjenme solo con el pilar. Ahora—
El cabello Borgoña de Jiro se agitó con la brisa, junto al jardín con ese lindo kimono en tonos violetas claros, parecía un árbol de Wisteria hecho persona. La chica puso la espalda recta elevando levemente la barbilla con obstinación.
—Tengo información sobre el avance de Kimi-san. Mizu y las gemelas también encontraron situaciones similares en otras 5 personas— su rostro se volvió serio, volviendo a balancear el arma entre sus brazos— dos de ellos son del Clan—
Con aquello, Rengoku suavizó un poco el gesto aunque no había dejado de tener esa aura amenazante. Le indico a Jiro que entrara y despidiera a la chica que la acompañaba. La peli Borgoña se volvió hacía atrás, dándole otro par de instrucciones a la chica. Mizu asintiendo y luego desapareció con la misma rapidez con la que había llegado. Al albino todo aquello le resultó agotador, no sabía que estaba pasando exactamente, pero por la cólera que presentaba el bicolor debía tratarse de algo sobre Marion. Era una de las únicas personas que hacían quebrar esa muralla de emociones del pilar de la llama. Miro hacía su desayuno, guarniciones, tempuras, todo se veía apetitoso. Suspiro al saber que tal vez no podría comer un poco de aquello.
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Flama『炎』
FanfictionKujo Marion perdió su hogar en manos de un demonio. Siendo la única sobreviviente de la masacre, no tiene más alternativa que seguir con su vida e intentar progresar en una civilización que solo la ve para un solo propósito. Rengoku Kyojuro, el pil...