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2 semanas después
Mansión Rengoku
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Los días comenzaron a transcurrir con más velocidad. Se había encargado de que Marion no fuera ejecutada por la organización. Shinjuro en todo ese tiempo, no había dicho una palabra sobre la nueva condición de Marion, pero todos sabían que el hombre no estaba de acuerdo con que simplemente se le dejara vivir como una persona normal. Senjuro en un principio se encontraba nervioso por la misma condición de demonio, pero a la semana comprendió que la peliazul seguía siendo la misma hermana que conoció.

Ahora con la noche cernida en el horizonte, Marion tenía la libertad de vagar libremente por los jardines de la finca. Al necesitar energía desarrollo el mismo mecanismo que Nezuko, la reducción de tamaño aminoraba su necesidad de nutrientes  por lo que le permitía estar conciente sin perder el control por más tiempo. El pilar en ese momento se encontraba con ella, disfrutando del poco tiempo juntos en el exterior.

—Oyakata-sama dijo que existe una mujer llamada Tamayo. Que nos puede ayudar a suprimir tus instintos— La peliazul se detuvo mirándolo con incredulidad. Realmente existía un demonio bueno además de Nezuko?. Curiosa, se acercó hasta donde se encontraba sentado el bicolor, su enorme kimono se arrastró por todo el suelo. Cuando estuvo cerca, Kyojuro la cargo y la colocó en sus piernas, ella comenzó levantarlas como si pateara al aire de una manera infantil— Me dijo que le preguntara a Kabako por ella, que seguramente él sabría cómo encontrarla—

Marion no dijo nada, aún con el tiempo y consumiendo sangre no había recuperado la capacidad de hablar. Se imagino que se refería a los Kamado, Kyojuro era pésimo recordando nombres sobretodo cuando no le interesaba retenerlos. Su atención se dirigió a la luna llena, brillante y pura. Se recostó del pecho de Rengoku para descansar su cuello mientras la contemplaba. Él solo le acaricio la cabeza, peinando su cabello azulado con los dedos.

Después de la muerte de Jingoku, sus días se habían vuelto pacíficos. A pesar que en un principio habían sido duros, tratando de mantener su propia conciencia y autocontrol, poco a poco fue ganando su batalla contra los instintos más primitivos de su sangre demoníaca. Llegando a estar más tranquila alrededor de las personas. Kyojuro había hecho todo lo posible por pasar tiempo con ella, de dedicarle cada segundo que estuviera libre de la casería de demonios para que no se sintiera sola.

—Me asignaron la misión del Tren infinito, tengo que partir mañana. Según Kochou el chico estará en el tren, así que tendré respuestas rápido— Rengoku la dejo en el suelo, acariciando su cabeza en un gesto fraternal. Se sintió extraño diciendo lo siguiente— Se que acumulas más energía estando de esa forma. Pero, me gustaría que me recibieras en tu forma adulta una vez regrese de la misión— Oculto su rostro algo ruborizado, haciendo que la peli azulado se acercara hasta él apoyándose en sus rodillas para intentar verlo mejor— Realmente me gustaría pasar un largo rato contigo después de mi misión—

Marion se ruborizo en respuesta, ninguno de los dos había avanzado en la relación más que por compañía y ella acababa de convertirse en demonio por lo que ambos eran cautelosos en sus acercamientos. A pesar de que ya no podía sentir lo mismo que cuando era humana, aun las palabras de Rengoku hacían que se le acelerará el pulso. Sus sentimientos hacia él no había disminuido ni habían sido olvidados por la maldición. Creció hasta tomar su forma original, el kimono se ciño a las líneas de su cuerpo para poder estar a la altura de su amado. Cuando lo abrazo sintió como se sobresaltaba de la sorpresa.

El pilar levantó su rostro para verla al rostro. Marion le sonrió dulcemente mientras lo abrazaba y acariciaba su cabeza para tranquilizar sus temores. Rengoku oro en silencio, esperaba que la misión diera los frutos suficientes para conseguir una manera de volverla a la normalidad. Con ese objetivo en mente, correspondió el abrazo haciendo que la chica cayera en su regazo por culpa de un jalón, le dio dulce beso en los labios. Mientras ella estuviera a su lado, todo iba a salir bien.

Flama『炎』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora