El Instituto Del Vampiro

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 17

Morgan

—Han cambiado mucho ustedes dos — Dice aquella mujer —.Huir de tú propia familia por años debe de ser muy agotador, ¿No es así Shin?

—No me digas así — Responde el vampiro con un tono serio, su irá y todas sus demás emociones se estaban saliendo de control lo sentía.

—Claro, claro había olvidado qué ahora eres Percival, un IDOL muy famoso en Corea, pero te diré algo niño, no importa cuánto te refugies en ese otro nombre, siempre serás el mismo Shin de siempre.

—¿Qué haces aquí, abuela? — Le pregunta Kuyng mientras veía a la reina.

—Mí nieto Kuyng, el más obediente y recto — Ella lo observa y después le sonríe —.Te he extrañado mucho.

—Ya habla, Hana — Interviene Percival —.¿Qué haces aquí?

—¿Quién es ella? — La pelinegra desvía su mirada hacia mí, cuándo nuestras miradas se cruzaron realmente me sentí incómoda, su mirada da miedo.

—Soy...

—Morgan Brown — Percival se adelanta a mí respuesta —.Mí novia.

—¿Tú novia?, ¿A qué familia real perteneces, niña?

—Eso no te importa, Hana ahora habla, ¿Qué es lo qué quieres?

—Eso ya lo debes de saber, Shin, quiero qué dejes de jugar al estudiante en Quebec y tomes el puesto qué tienes qué tomar aquí en Corea.

—No — Responde el vampiro —.¿Para seguir haciendo de mí vida un infierno por otros siglos más?, no gracias, no estoy interesado ahora creo qué te deberías ir, reina Hana.

—Esté no es el lugar para hablar sobre ese tema, Shin así qué vayamos al palacio para hablar más cómodamente.

—No, no voy a ir a ningún lado contigo.

—Para tú tranquilidad tú hermano y tú novia pueden venir con nosotros al palacio.

—Dije qué no.

—Mí amado nieto, creo qué mí petición tiene qué ser aceptada.

Tras las palabras de la reina unos sujetos vestido de negro aparecieron y comenzaron a rodearnos entre ellos el sujeto qué nos había atacado en la aldea a Kuyng y a mí.

—Vaya...— Percival sonríe tras ver a los vampiros —.Viniste con tus perros falderos, qué bien, pero, ¿Qué te hace pensar qué no puedo matarlos a todos fácilmente?

—No lo harás — La reina lo reta.

—¿Quieres ver? — Veo claramente cómo los colmillos de Percival aparecen.

—Percival...— Me aferró más fuerte a su mano y él desvía su mirada hacia mí mientras sus colmillos desaparecían —.No lo hagas, los humanos podrían ver todo, por favor no inicies una pelea — Pedí.

—Te aconsejo qué le hagas caso a tú querida novia, Shin, no querrás hacer qué toda la raza vampiro se vea descubierta ante los humanos, ¿O sí?