Suya

20 | Sorpresa

20.

Sorpresa.

Había situaciones en que una estaba incomoda. Había situaciones en que los nervios te carcomían. Había situaciones en que reinaba un silencio, diferentes tipos de silencio.

Yo creía que la situación en la que estaba, era de esas ultimas. Pero aun no podía definir qué tipo de silencio era el que reinaba en la sala. Aun cuando intentaba mantenerme derecha en el sofá, no podía evitar balancear uno de mis pies constantemente intentando no estar tan ansiosa.

Unos bonitos y grandes ojos verdes mi miraban en silencio, una suave sonrisa curvaba el rostro de mi acompañante, la expresión serena y delicada me ponía nerviosa. Las suaves hondas de su brilloso cabello claro, caían con gracia sobre su rostro y la hacía ver muy tierna. No tenía por qué mentir, Eleyn era muy hermosa.

—Soy Eleyn—escuche su tono de voz pacifico, aproximadamente dos minutos después de que nos hubieran dejado en la sala, para que Myriam pudiera despedir a sus padre y hermano, en compañía de sus hijos.

—Tienes un bonito nombre—murmuro y me gano una pequeña sonrisa—. Lynette.

—Tu igual—dice y enseguida un silencio cae entre nosotras—. Cuando entraste, creí que conocería a la mujer de Dalton Price—cuenta—. Pero recordé que ella era humana, entonces me equivoqué.

Asiento coincidiendo, no se me pasa por alto la mirada que persiste en mí, no hace la pregunta, pero sé que quiere saber quién soy, pero es demasiado educada para preguntarlo de frente.

—¿Eres de por aquí?

—No—niego y cuando noto su intención de preguntar sigo—. Estaba en territorio Reither.

—Así que eras de ahí—murmura mientras sus ojos siguen en mí, no paso por alto el "eras" ella sabía perfectamente al igual que cualquiera que pudiera tenerme cerca que yo, era una exiliada—. Solía visitar con frecuencia ese lugar. Fue hace tiempo, mis padres son pacifista, tienen buena relación con todos—aclara—. Me hice amiga de Lorcan Reither, hace tiempo no lo visito. ¿Sabes como esta? Bueno, supongo que hace tiempo no lo vez...

Aunque intento dar un amague de sonrisa, porque sé que su voz va perdiendo fuerza cuando se da cuenta que le está preguntando a alguien a quien echaron cosas del lugar, creo que no lo logro.

Mientras siento un pequeño escalofrío recorrerme el cuerpo, escucho como nuevas piadas se sienten cercan, intento calmarme regulando mi respiración mientras me vuelto a concentrarme más en todo lo que me rodea.

Lorcan.

Lorcan Reither.