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título: lost in the fire +18

pareja: sebastian stan x lectora

word count: 2,791

advertencias: contenido sexual, fwb to lovers, angst but happy ending!

resumen: todo inició aquel día, sin fin. sebastian le quiere poner un final, pero todo sea por un nuevo comienzo.

nota: idea gracias a Sweet_Annihilation_ <3

espero haya sido lo que esperabas :)))

Sebastian te devora como un hombre hambriento, a punto de morir de desnutrición, sus labios alrededor de tu clitoris, envueltos, chupando

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Sebastian te devora como un hombre hambriento, a punto de morir de desnutrición, sus labios alrededor de tu clitoris, envueltos, chupando.

― Mierda―murmuras, sintiendo el orgasmo más cercano, las palabras atorandose en tu garganta―, Mierda.

Sus dedos vuelven a entrar en ti, haciendo todo tu cuerpo convulsionar de placer ante su repentino movimiento.

Sebastian sabía como tocarte, desde el inicio de los tiempos. La primera vez fue bueno, pero después de casi dos años, es lógico que se pondría mejor. Simplemente, mucho mejor.

Te retuerces de placer, tu agarre intensificandose en las sábanas mientras el rumano curva sus dedos de manera experta dentro de ti. Alcanza tu punto sensible, haciendo que tus paredes internas se contraigan, tu clítoris atacada, más, igual sintiéndose placentera, un torbellino de emociones recorriendo tu columna, escalofríos en tu cuerpo.

Ruedas los ojos hacia atrás, llegando aún más cerca al clímax, dejando escapar uno o dos gemidos en el camino, Sebastian empeñado en hacerte gritar.

― Dios, Seb. Quiero correrme, ¿Me puedo correr?―suplicas en un tono que sólo usabas para él: Uno que le fascinaba. Está tan excitado que sólo puede gruñir en respuesta.

― Hazlo―gruñe, su voz más ronca que nunca. Dios. Su voz te hace temblar aún más, mientras que él se lanza a la tarea de introducir todos sus dedos en ti. Luego lame tu clítoris con avidez, una ola de placer envolviendote de pies a cabeza.

Tus uñas se clavan en su espalda, mientras hundes tu cabeza en su cuello, enterrando tu grito en él. Tus piernas quedan temblando, entumecidas y colgando, aún afectadas por la sacudida del orgasmo, a pura fuerza.

Stan ríe, sudor resbalando de su sien, acariciando tu sudado rostro también. Esconde su rostro en tu cuello, dejando una marca en él. Envuelves tus manos alrededor de su cuello, mientras él sigue dejando más marcas en tu cuello y clavículas.

― Wow, eso estuvo bien.

Sebastian sigue en su tarea aunque se toma el tiempo de responder― Siempre está bien.

One Shots,ㅤㅤㅤBucky Barnes (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora