XIV.

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título: i'm a maximoff

pareja: bucky barnes x lectora

word count: 1,092

advertencias: ninguna

resumen: envuelto en un aprieto que le puede hacer perder todo, está en ________ maximoff darle otra opción a bucky barnes.

parte: II/II

Lo primero que sintió fue un dolor punzante en los brazos, piernas y (sobre todo) en la cabeza

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Lo primero que sintió fue un dolor punzante en los brazos, piernas y (sobre todo) en la cabeza. La visión seguía borrosa, así que tuvo que esperar un tanto para identificar dónde rayos se encontraba.

Le costó trabajo reincorporarse a causa del golpe recibido. Sin embargo, pudo pararse sin problema alguno.

Pensó en llamar a Steve, pero cuando registró sus bolsillos se dio cuenta de que no llevaba nada de lo que tenía antes de caer dormido encima: ni siquiera su ropa.

Y luego recordó: la chica. De seguro esa era la (única) explicación más lógica. Sin embargo, no podía dejar de pensar en la menor de los Maximoff. Era bastante irracional, ya que era ella quién lo había encerrado allí dentro.

Borró cualquier distracción de su mente y se enfocó en tratar de escapar. Le costaba creer que tan sólo había ido a una misión y estaba de vuelta en HYDRA. ¿Significaría algo?

La sola alusión a ese pensamiento le provocó náuseas. Sintió las piernas desfallecer así que tomó asiento, paralizado. Sollozo, con tristeza ante su aparentemente inevitable existencia.

― ¡Joder!

Golpeó la pared con toda la rabia contenida, haciendo que la pared delante suya sucumba ante el golpe. Unas pequeñas gotas de sangre resbalan del puño lastimado, mientras que Bucky se encargaba de sollozar. Tanto esfuerzo que utilizó en llorar, le provocó cansancio. Lo último que vio antes de terminar dominado por el sueño fue los fragmentos del vidrio que rompió: era un espejo.

En el espejo se reflejaba, como un monstruo acechando en la oscuridad, la estrella de HYDRA en su brazo de metal.

***

― ¿Qué le harán?―preguntó asustada la muchacha.

No podía decir nada contra sus superiores, aunque eso no significaba que no sintiera nada. Como ahorita, que sentía terror y angustia por el hombre que había tratado de ayudarla.

― Lo de siempre: Borrar y reiniciar―respondió el científico encargado―. Tranquila, todo está bajo control.

Sin embargo, eso hizo de todo menos brindarle tranquilidad. Parecía que la respuesta había sido ensayada ya varias veces.

― Pero señor―objetó un empleado un poco más joven―, Lleva ya tiempo sin ser reiniciado: no sabemos que sucederá.

El semblante del mayor no cambió― Eso no importa.

One Shots,ㅤㅤㅤBucky Barnes (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora