Entre libros de química y matemáticas

Extra 2

Sherlock se encontraba muy entretenido viendo YouTube a las 2:00 de la madrugada, ya que había toda clase de videos interesantes sobre química allí y nada mejor que desvelarse para ver el nuevo contenido de Greenlab78. Ahora mismo estaba viendo uno acerca de como mezclar ciertos elementos sin hacer explotar el laboratorio.

-¿Debería ponerlo en práctica? Nah ¿Qué es la vida sin un poco de riesgo?- mientras dejaba su like.

Estuvo vagando entre las recomendaciones hasta que encontró un video en especifico que hizo que su boca se abriera completamente.

-Espera ¿¡ese no es mi Liam!?- Dijo Sherlock completamente sorprendido.

Efectivamente se trataba de un video en el que William explicaba una serie de pasos para resolver algún problema matemático que Sherlock no entendía en absoluto, pero le gustaba mucho la postura, gestos y forma de hablar que el rubio utilizaba para enseñar a quienes vieran su clase grabada. Era realmente genial como hacia parecer completamente sencillas formulas que se veían absolutamente complicadas. Ya que recientemente se habían convertido en novios Sherlock se había vuelto mucho mas consciente de lo mucho que le atraía su Liam y no podía evitar sentir que lo estaba seduciendo, aunque en realidad no era así, pero su mente de enamorado solo veía lo que quería ver así que se quedo despierto hasta las 5:00 de la mañana viendo los videos del rubio a pesar de que no entendía ni siquiera un poco de lo que este decía, pero su voz era tan embriagante que podría estar escuchándolo todo el día.

También por mera curiosidad comenzó a revisar los comentarios y encontró que muchos desconocidos/as prácticamente estaban piropeando a su Liam y eso hizo que cierta molestia se asentara en su pecho, pero igualmente los leyó con arrogancia pues él era el único privilegiado que tenía el derecho de besar o tocar al rubio y eso le daba un sentido de superioridad.

-Declaren su amor todo lo que quieran, pero Liam solo me quiere a mí ya que me aceptó como su novio y me deja besarlo tanto como yo quiera, también puedo ver sus hermosas reacciones que solo yo provoco y... - se quedó pensando en lo lindo que se veía cuando lo acorralaba y lo encantadoramente cooperador que era cuando se brindaban caricias mutuamente.

Decidió que era mejor no pensar demasiado en eso pues tendría un problema entre sus pantalones, ya que imaginar a su novio todo sonrojado y gimiendo por él hacia que sintiera calor en su parte baja. Además debía dormir al menos unas horas para presentarse a sus clases en condiciones más o menos decentes

-Bueno, hay que ser positivos en un par de horas veré a Liam y podré besarlo todo lo que quiera, claro si no está ocupado. También le preguntaré por los videos, se lo tenía bien guardado ¿eh?

Entonces se acomodo mejor en su cama y cerro los ojos cayendo dormido con facilidad ya que el cansancio lo golpeo inmediatamente. Tuvo un sueño en que William era su maestro y aun así se descubrió a si mismo mirándolo todavía con amor. Despertó y se estiro pues estaba listo para comenzar un nuevo día y se sentía especialmente motivado pues vería a su Liam además que podría realizar sus queridos experimentos en el laboratorio.

Cuando llego a la universidad se encargó de realizar rápidamente todos sus pendientes para poder ir a ver a su novio.

-¿Liam estás libre?- le escribió un mensaje de texto.

A los pocos minutos recibió respuesta y su corazón se acelero al leer lo que su Liam le había mandado.

-¿Tanto me extrañas, Darling?- escribió William

-Sabes que sí- le respondió

Este se demoro en responderle ya que se había sonrojado bastante y no hallaba las palabras adecuadas.

-Puedes venir a verme ahora, estoy en la oficina.- respondió William

-Eso suena muy seductor, voy enseguida.- tecleo rápidamente Sherlock

Y en cosa de minutos estuvo parado en frente de la puerta de la oficina, no la había derribado por respeto a William y también porque era sumamente emocionante que fuera este quien lo dejara entrar. Toco y espero pacientemente a que su Liam la abriera.

-Hola Sherlock- dijo este con un poco de timidez pero con los ojos brillantes.

Sin decir palabra entro y cerró la puerta con pestillo para después lanzarse a besar a su novio quien abrió los ojos con sorpresa ya que su Sherly no demoro en besarlo apasionadamente empujándolo suavemente hasta que chocaron con la mesa, después de algunos segundos cuando su ímpetu se tranquilizó un poco se separó y hablo con un tono que hizo que un agradable escalofrió recorriera el cuerpo del rubio.

-Necesitaba esto desde hace algunas horas ¿Dígame profesor, no me dará clases particulares?

El rubio lo miro sin entender y le preguntó a que se refería. A lo cual Sherlock lo miro con ojos oscurecidos.

-Vi tus videos, realmente explicas muy bien. Dime ¿ lo haces seguido?

-Al principio solo eran cápsulas para facilitar el aprendizaje de mis estudiantes, pero estos dijeron que seria bueno que mas personas los vieran- dijo este solo concentrándose en la mano de su novio que acariciaba su cintura.

-Creo que me podrías enseñar muchas cosas, solo a mí- mientras se dedicaba a depositar pequeños besos en el cuello de su Liam.

-Sherly- dijo este suspirando.

De cierta manera la oficina del profesor Worth se había convertido en una especie de nido de amor para ellos dos, pues aprovechaban cualquier oportunidad para brindarse mimos y atenciones. Lo mejor de todo es que casi nadie los molestaba allí y podían demostrarse su afecto tanto como quisieran.