Entre libros de química y matemáticas

Búsqueda

Los personajes de esta historia pertenecen al anime/manga Moriarty the Patriot escrito por  Ryōsuke Takeuchi e ilustrado por Hikaru Miyoshi, basado en la serie Sherlock Holmes de Arthur Conan Doyle

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Sherlock miraba con aburrimiento a un estudiante de la facultad de medicina quien se encontraba parloteando alegremente encima de un pequeño escenario improvisado.

-Estimados estudiantes de esta gran universidad, ¡nos hemos reunido aquí para dar inicio a nuestra gran búsqueda anual del tesoro de las hadas!

-Que fastidio, podría estar haciendo mis experimentos tranquilamente en el laboratorio- pensaba Sherlock- Además un científico no debiera creer en tal cosa como las hadas.

-Como verán nuestra tradición dicta que se busque un objeto que tenga las características descritas en dos trozos de papel seleccionados al azar, los cuales se encuentran en estos dos recipientes- mientras señalaba dos frascos de cristal en forma de esferas, los que contenían muchos pequeños papeles doblados.

-Que esto termine pronto- pensó completamente aburrido mientras en su interior maldecía a John Watson quien era su amigo y compañero de departamento, el cual le había dicho que pasaba mucho tiempo en casa o en el laboratorio por lo que sería bueno que distrajera con otras cosas su mente. Además le prohibió que volviera a su residencia a menos que trajera la insignia de participación que les otorgaban al final de la búsqueda.

No presto mayor atención hasta que el estudiante saco los dos papeles y los exhibía orgullosamente ante su improvisada audiencia.

-¡Esta vez tienen que encontrar algo hermosamente escarlata!- exclamo llenó de júbilo el estudiante- Quien traiga el objeto más original y único será el ganador, tienen una hora ¡Que empiece la búsqueda!

Todos los participantes respondieron alegremente y se apresuraron a buscar lo que les habían solicitado. Sherlock decidió que no se esforzaría en lo más mínimo pensando que sería más provechoso terminar sus deberes del laboratorio, ya que tenía que hacer mucho trabajo para sacar su especialidad en farmacia clínica. Así que opto por conseguir algo simple como una brillante manzana roja además de que ya tenía un poco de hambre. Entonces fue al puesto de frutas más cercano que quedaba justo al medio del campus de ciencias y el campus de medicina. Iba a agarrar la manzana mas bonita cuando su mano se topó con la de otro joven quien se disculpó muy cortésmente.

-Lo siento, puedes tomarla- mientras retiraba suavemente su mano

-No hay problema...- pero al voltear a ver al sujeto en cuestión su corazón dio un vuelco y sin quererlo se quedó observándolo fijamente lo cual hizo que este lo mirara con extrañeza.

-¿Sucede algo?

-¿¡Podrías venir conmigo!?- le dijo emocionadamente mientras lo tomaba de los hombros

-¿debería seguir a un completo extraño?- dijo este mientras sonreía con diversión por la falta de modales del otro y aún así se sentía un poco nervioso por el cero respeto a su espacio personal.

-Mi nombre es Sherlock Holmes. Por favor ven conmigo- le suplico al otro.

-Está bien- aceptando su petición pues lo analizo y concluyo que no parecía una persona peligrosa - ¿pero, por qué?

-¡Tienes los ojos hermosamente escarlata!- dijo este sin vergüenza alguna.

-¿Gracias?-pensando seriamente si este extraño estaba coqueteando con él lo cual no le desagradaba tanto como se pensaría habitualmente.

Sherlock reflexiono en sus propias palabras y sintió como el calor le subía al rostro por lo que rápidamente le explico la situación al otro quien lo miro con entendimiento.

-Ya veo, vamos entonces

-¡Gracias!

Con rapidez lo guio hasta el escenario y el estudiante que presentaba los miro sorprendido, entonces Sherlock lo miro triunfalmente.

-Traje el objeto más hermosamente escarlata que pude encontrar, ¿No lo cree, sir?

-¡Pero trajiste al profesor Moriarty!- dijo este al ver al rubio

-No va contra las reglas- dijo él burlonamente.

-Tienes razón, sus ojos son hermosamente escarlata- dijo avergonzado y es que el rubio era bien conocido en toda la ciudad pues se había graduado prontamente en matemáticas además de que era ayudante en varias cátedras mientras estudiaba su posgrado. También era conocido por su belleza y su amabilidad al enseñarle a los alumnos causando sensación tanto en hombres como en mujeres.

-¿Dónde está mi premio?

-Está bien- dijo a regañadientes y buscaba una caja pues sabía que nadie traería algo mejor.

-¿Qué es?

-Es la tarta especial del hada de la fruta, muy solicitada en la mejor panadería de la ciudad, tuve que hacer una fila desde las seis de la mañana por ella- explico el estudiante mientras se la entregaba y le daba la insignia de participación correspondiente.

-Muchas gracias, la disfrutaremos ¿No es verdad, Liam?

-Eres muy atrevido Holmes, ni siquiera se más que tu nombre.

-Pronto sabrás mucho mas que eso- Al darse cuenta de su pésima línea para ligar rectifico con algo de timidez- si quieres claro

-Eso me gustaría- mientras cubría su pequeña risita con su mano.

Ignorando completamente al estudiante presentador se dirigieron hacia uno de los comedores de la facultad de medicina.