Cuando Verónica tomó la misión de cuidar de la esposa de su mejor amigo cierta duda le invadió, al conocerla no pudo evitar pensar que era alguien bastante delicada como una pequeña flor, le parecía alguien demasiado tierna una joven noble con un carácter débil así que pensó que tenía mucho en que trabajar que debía ser muy cuidadoso pero en especial que tendría que ayudarla a ser fuerte pero ahora que estaba frente a frente al peligro y la veía con la frente en alto sabía que se equivoco.
La princesa Mónica se había presentado frente a la joven notaba su molestia hacia la esposa de su amigo y no le era algo sorprendente pues la princesa había sido una de las personas en buscar matrimonio con el duque de Denforth pero ni siquiera logró captar su atención.—Escuche que recibiste tu propio palacio.
Habló la princesa pero al no recibir ninguna por parte de la joven se sintió enfurecida.
—¿Acaso no hablas?
—Lo correcto es recibir un saludo, se hace llamar la más grande noble entre los aristocrática pero no se comporta como tal.
—No creas que eres superior a mi solo por recibir el título de princesa.
—Soy la primera princesa, mi nacimiento fue antes además de acuerdo a las reglas nobles es de educación recibir a la realeza extranjera con cordial, aunque no hubiese sido coronado como princesa en este reyno en el lugar que fui criada también era una princesa, por lo menos debería ser cordial, princesa Mónica.
La joven no pudo ocultar su ira, detestaba que fuese superior a ella que sin ningún esfuerzo escalara arriba, pensó que arruinarle con chismes pero la joven no prestaba atención pero en especial le enfureció más el hecho de que el ducado de Denforth estuviera logrando más mérito, estaba creciendo con fuerza pues el propio joven duque había declarado que debía dedicar su vida como al quien digno de la nobleza imperial a su amada esposa, quería deshacerse de la joven pero no sólo tenía el apoyo del duque de Denforth, también de su hermano el archiduque y por supuesto del rey.
La joven solo la miró para retirarse no necesitaba seguir escuchando los reclamos de la joven quien habia notado que tenía una furia injustificada hacia ella, mientras caminaba observó por la ventana a varios soldados y entre sus pensamientos inundaba la imagen de su esposo pues no había recibido noticias de él desde ese día en que se separaron.Desde su lugar William miró a la persona frente a él sostuvo su espada con fuerza para dar el último golpe, sus manos ya estaban cubiertas de sangre incluso el olor ya estaba impregnado en su ropa entonces los recordó la razón por la cual siempre detesto el título de Duque, el porque siempre prefiero viajar por el mundo y no involucrarse en el área político recordó la razón por la cual quería alejarse del imperio, no quería estar atado, no quería ser un soldado y ya pero ahora mismo no tenía elección tenía a alguien precioso al cual proteger tenía una razón de mucho más peso para realizar todo lo que odiaba, ahora sentía que esas cosas sin sentido ahora tenían más de un motivo, miro el cuerpo para dar media vuelta para salir de aquel lugar.
—¿Que noticias hay?
—El gremio aceptó su petición, investigan a detalle en los alrededores —mencionó uno de los soldados mientras se acercaba —el archiduque envío información respecto a la princesa Eleonor.
—¿Ella está bien?
—Se a ganado el favor entre los nobles.
—Tan típico de ella, realmente es un encanto con cualquiera.
—Mi señor también hay noticias sobre una gran rivalidad entre ella y la princesa menor, Mónica.
—Verónica está cerca de Miu así que no le permitirá hacer la gran cosa, ¿alguna otra noticia?
—Se encontró evidencia sobre la enfermedad de su majestad en realidad a sido envenenado, en cantidades pequeñas.
—¿Algun sospechoso?
—De entre los nobles se encontró evidencia ante el Conde Milforth.
—¿Donde esta ahora?
—Bajo custodia, el archiduque le permitió actuar con discreción.
—Parece que quiere ser muy sutil, ¿acaso sospecha de alguien y no quiere informarlo?
—Lo hace mi señor, el joven maestro sospecha de su padre. Incluso le pidió a la joven Verónica una cierta distancia hacia su hermana.
—¿Por qué?
—Hubo un cierto rumor en el pasado, sobre qué fue culpa de gran Archiduque de la muerte de la joven princesa.
—¿Quien empezó esos rumores?
—Todos están muertos pero alcanzaron a llegar a los oídos del joven.
—Es algo sospechoso pero si quiere mantenerla lejos que así sea.
—¿Alguna otra pista?
—El gran baile se avecina y varios nobles hablan sobre lo importante de ese evento.
—Averigua que hay detrás de eso y manda un mensaje con urgencia.
—¿Haciendo mi señor?
—Es hora de llamar a las únicas personas capaz de descifrar la verdad detrás de todo esto. Un mensaje a la tierra natal de mi esposa.
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A un Océano de ti
Historical FictionUna ley impuesta para mantener el honor en el clan Una joven extranjera se convierta en la hija del proximo líder del clan. Toda una vida complaciendo a los demas para mantenerse a la altura de la família. Un error, Una ley y Un castigo. ¿Prefieres...