Capitulo 3

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Abigail

Lunes. Maldito Lunes.

Estoy buscando un empleo, necesito el dinero de la Universidad con urgencia y no me parece correcto pedírselo a Joe, que ya bastante me ha ayudado, tampoco quiero poner en aprietos a los padres de África.

Dejo mi currículum en algunos lugares, me puse una meta y es conseguir un trabajo serio, como secretaria o algo así, y por eso aplique en una empresa que espero me acepte, ya que tiene muchos beneficios para mí.

Vuelvo a casa luego de caminar todo el día, hoy no debía trabajar así que fue un peso menos y también agradezco tener unas minis vacaciones de la Uni así tengo más tiempo para pagar.

Cuando llego preparo una malteada de chocolate para subir mi ánimo, bebo todo mientras observo mi obra sin terminar.

Esta es diferente, dibuje a una pequeña niña, está sentada abrazando sus rodillas mientras la oscuridad la rodea.

A mi mente vienen los recuerdos que quisiera olvidar.

FLASHBACK

- ¡Eres una niña estúpida!- intento cubrirme pero el cinturón me golpea con fuerza y duele, duele mucho.

- P-pol f-favor pala- susurro con lágrimas corriendo por mi rostro.

Ella sigue golpeandome, me duelen mis bracitos, escucho la risa de algunas niñas y me pregunto: ¿Por qué se rien de mi dolor? ¿Por qué son tan crueles conmigo? ¿Acaso hice algo malo alguna vez?

Mami y papi ¿Por qué me dejaron aquí?

FIN DEL FLASHBACK

Cierro los ojos y respiro buscando internar dentro los demonios del pasado nuevamente.

Ya no estás ahí Abby...

Termino la malteada y me siento para terminarlo, mis cuadros no suelen ser tristes pero este fue diferente. Cambio el concepto de la obra y pinto luces flotantes que iluminan la oscuridad alrededor de la pequeña, siento unas lágrimas que intentan caer cuando veo el resultado, pero las retengo y sonrío sintiendo orgullo de mi misma.

Mi mayor fuente de inspiración siempre han sido mis sentimientos, no hay nada mejor para inspirarse que lo que uno vive y lamentablemente....yo he vivido mucho a mi corta edad.

Voy dos años en la carrera y tan sólo me queda uno más para poder graduarme, estoy feliz de estar cumpliendo mi sueño, por esto espero que me llamen a una entrevista, conseguir el trabajo me ayudaría a terminar de formarme en lo que tanto amo.

Cuando termino de guardar mis pinturas voy hasta la ducha para relajarme, olvidé mencionar que me he sentido extraña, he tenido esa sensación de alguien observandome y de verdad me incomoda, he intentado no prestarle atención o al menos fijarme si hay alguien pero nunca lo hay.

Ya estoy saliendo cuando escucho mi móvil sonar.

África.

- ¡Cariño!- grita cuando contesto.

- ¿Qué sucede Afri?- pregunto mientras llevo el teléfono entre mi oreja y mi hombro.

- Salgamos hoy, porfiiiisss- quiero rodar los ojos.

África es mi mejor amiga y hermana, me ayudó cuando escapé del orfanato, sus padres dejaban que ayude en su tienda y así ganaba comida y pagaba mi educación también.

- Estoy cansada Afri...- no sé por qué lo intento si voy a terminar accediendo.

- ¡Oh...Venga ya! No sales nunca y estoy preocupada de que sigas siendo virgen a los 22 años, Abby- mi rostro enrojese cuando termina de decirlo.

Luz de mi oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora