Volver a ti

Capítulo 5

Mi compañero se queda sorprendido al oír las palabras de Dominick, en cambio yo quiero asesinarlo mientras que mi esposo sonríe con satisfacción ante su cometido. Colin me mira con la interrogante en sus ojos y su ceño se profundiza, algo pasa por sus ojos pero no alcanzo a definir que es.

-No sabía que tenías esposo-

-Es...-

Antes de que pueda seguir con mi frase, Dom vuelve a interrumpirme.

-Es que nos gusta nuestra vida privada, somos muy recelosos- contesta con una falsa sonrisa-¿no es así querida?-

Voy a matarte Becker, lo juro.

-¿Es verdad?-

-Es algo un poco más complicado- mascullo.

-¿El es...?-

-Sí, es el padre de Ana-

El agarre de Dominick se aprieta en mi cintura, con cautela encajo mi tacón en su pie se sobresalta ligeramente ante mi acción, su agarre se afloja un poco pero me fulmina con la mirada. Miro a mi compañero con una ligera sonrisa.

-Prometo contártelo después, con más calma-

-¿El no tendrá problema?-

El hombre que tengo como esposo sonríe en respuesta preparado para soltar un comentario estúpido, disimuladamente sin que ninguno de los dos hombres lo note pongo mi mano en su polla por encima de su pantalón entonces aprieto mi agarre ahí con fuerza, Dom se sobresalta ante la acción trata de quitar mi mano pero se lo impido afirmando mi agarre, le advierto con la mirada para no se le ocurra quitar mi mano, mientras le doy una sonrisa con todos mis dientes a Colin.

-Dom, no tiene ningún problema- lo miro, veo que oculta con maestría el dolor que le estoy provocando-¿no es así, querido?-

-Bueno...-aprieto más mi agarre- no, no tengo ningún problema- sisea entre dientes, tratando de ocultar el dolor.

Colin me da una mirada pero puedo notar cierto recelo hacia Dominick, cuando desparece de mi vista me giro para ver a mi esposo antes de que lo pueda procesar aplasto más sus bolas con mi mano, gruñe en respuesta.

-Escúchame bien, Becker- digo entre dientes- que sea la última vez que interrumpes así en mi trabajo y montas una escena de testosterona o mis manos no serán tan consideradas la próxima vez, ¿quedó claro?-

-Muy claro, pero carajo, suéltame Katherine- sisea entre dientes, toma una respiración profunda cuando lo suelto- por poco y me dejas estéril- se acomoda los pantalones- aparte se nota que él tipo está enamorado de ti-

-Eso no es cierto- mascullo.

-Créeme que lo sé, así como ustedes las mujeres tienen un sexto sentido para las cosas, nosotros lo tenemos para identificar a los enamorados de nuestras mujeres-

-Eso es algo idiota por no decir estúpido- cruzo mis brazos y entrecierro mis ojos- aparte no soy tu mujer-

-Pero lo serás de nuevo, Kat- su rostro se encuentra muy cerca del mío.

-Suerte con eso-lo desafío con la mirada- ahora, ¿podemos irnos o tengo que esperar a que a su majestad le den ganas de moverse?-

Se ríe ante mi sarcasmo, un escalofrío me recorre cuando su nariz roza la mía entonces el beso que nos dimos ayer surge en mi mente y las ganas de volver a besarlo se hacen presentes, pero él se aleja antes de que pueda hacer algo con una sonrisa satisfecha por haber conseguido el efecto que todavía tiene en mi.

-Vamos, los niños estarán impacientes por qué no has llegado-

Lo sigo afuera donde están sus hombres, saludo a Boris con asentimiento de cabeza el cual me devuelve con una sutil sonrisa subo a la camioneta y partimos rumbo al colegio de los niños miro la hora en mi reloj de muñeca, con suerte llegaremos a tiempo. Después de unos quince minutos llegamos, me bajo para ir por ellos rápidamente las miradas de las mamás se enfocan en mí al verme bajar de tremenda camioneta y empiezan a cuchichear.