Volver a ti

Eres la luz de mi vida

Decir que estoy nerviosa, es poco. Mi mente divaga a que algo salga mal, hemos planeando esto por meses, que se me hace imposible creer que por fin haya llegado el día que tanto había anhelado.

Hoy es mi boda

Con Boris

El idiota que de alguna forma logró enamorarme con sus estupideces.

La borisconda

Mi poste de luz

Dentro de poco

Mi esposo

Respiro profundamente para no perder los estribos con mis nervios, camino de un lado a otro mientras espero a las chicas a que lleguen. Miro por la venta del recinto que rentamos para boda, con el enorme jardín. Las carpas ya están colocadas y poco a poco, los invitados están llegando.

El sonido de la puerta abriéndose, me saca de mis pensamientos nerviosos. Veo a Katherine, Sam, Lía, Rea, Vivianne y Karla, junto a la pequeña Anastasia. Ellas eran mis damas de honor, las miro ya cambiadas con los vestidos color crema oscuro. Mi mejor amiga me sonríe.

-¿Cómo está la novia?-

-De los nervios- respondo- creo que podría desmayarme en cualquier momento-

-Mientras no vomites, todo estará bien- dice Sam- menos sobre el vestido, tardamos una jodida semana en encontrarlo-

Eso logra sacarme una pequeña sonrisa.

-A duras penas desayuné, tengo el estomago muy cerrado- digo- y para variar no dormí-

Las manos de Katherine, se colocan en mis hombros.

-Relájate, respira- me ordena, lo hago suavemente- nada va a salir mal, no conmigo estando a cargo-

Ciertamente, el regreso de mi amiga trajo sus frutos con la boda. Bajo una certera amenaza hacia la organizadora de la boda, para que no ocurriera nada malo en este día especial.

Sonrío, asintiendo.

-¿Alguien sabes de los hombres?-

Todas bufamos y rodamos los ojos, a excepción de Karla. Que se mantiene con su sonrisa habitual.

-Ni me lo recuerdes, que me dan ganas de matar a Serguei- espeta Rea- el cabron se las verá conmigo, una vez que estemos en suelo ruso-

-A veces me pregunto, ¿en qué estaba pensando Boris, al ponerlo como su padrino?- refunfuño- sabiendo como es el idiota, también los otros estúpidos que le siguen la corriente-

-Mira que viajar a Nueva York, solamente para hacer la despedida de solteros en un club de strippers- alega Lía, acariciando su vientre de casi ocho meses- ¿Al menos ya volvieron?-

Katherine asiente, mientras que retoca suavemente mi maquillaje y acomoda unos mechones sueltos de mi cabello.

-Volvieron para la madrugada- se ríe- y luego se quejan, de por qué una se gasta mil dólares en las tangas de los strippers-

-Voy a fingir que no capte la indirecta, Becker-

-No hablaba por ti, Stirling- dice con inocencia, mirando a la castaña con una sonrisa burlona- ¿O es que hay algo que quieras compartir con el grupo de pecadoras?-

En respuesta Rea, le saca el dedo del medio. Vivianne se ríe, acariciando su vientre de casi cinco meses, aunque no parezca que los tenga.

-¿Ya saben que son?- pregunto

Asiente con una sonrisa.

-Sí, pero queremos esperar a que nazcan los piojos para decirlo-

-Yo sigo diciendo que es uno y uno- habla Karla- es el karma de Vladimir, por burlarse de la niña Becker- señala a Ana, que está en una silla observándonos- ¿No es así, Ana?-