Volver a ti

Capítulo 23

Dominick

Cuando Katherine termina de explicarme lo que paso a hace cinco años, cierra sus ojos y se recuesta en la almohada, en cambio Sam tiene la mirada perdida en el ventanal que hay en la habitación del hospital. Suelto un suspiro lento y paso mis manos por mi rostro, sin creerme toda la información que acaba de soltar mi esposa y mí cuñada.

-No puedo creerlo- es lo único que digo- llevan guardando este secreto durante cinco años, ¡cinco!- miro a mi esposa- a esto te referías cuando dijiste que habías hecho cosas a mi espalda-

-Si-

-Estamos hablando de que tu hermana- señalo a Sam- asesinó a Amanda por defenderte y que lo único que se ocurrió en ese momento fue deshacerse del cuerpo- hay cierta molestia en mi voz.

-¿Y qué querías hiciera?- me responde en el mismo tono que yo- sabía que si dejábamos el cuerpo intacto, tu padre sería el primero en enterarse y no hubiera dudado en asesinarnos a Sam y a mi-

-¡¿Y por qué mierda no me dijiste!?- exclamo furioso.

-¡Por que las cosas no estaban bien entre nosotros!- grita ella-¡Y en ese tiempo le eras leal a tu padre hasta por encima de mí!- eso hace que me quede mudo, sus ojos se cristalizan- ¡Hice lo que tenía que hacer para proteger a Sam! ¡Así como ella lo hizo conmigo! ¡No iba a dejarla sola a que pagara los platos rotos por mis disputas por Amanda!- me mira- ¡Y lo haría de nuevo sin dudarlo!-

Quiero contradecirla, quiero decirle que se equivoca pero para nuestra desgracia. 

Katherine está en lo cierto. 

Hubo en la época en la que la lealtad hacia mi padre me cegaba hasta el punto de ponerlo encima de cualquier cosa.

Incluso por encima de mi matrimonio.

Entonces los problemas entre mi esposa y yo, se hicieron más grandes, las disputas constantes, discusiones o gritos. Había ocasiones en las que dormimos en habitaciones separadas, en el fondo sabía que ella tenía razón acerca de mi padre, pero mi orgullo y lealtad hacia Conrad me impedían escucharla.

-Amanda no iba a detenerse- escucho esta vez a Sam que se había mantenido callada- no iba a cansar hasta que ella obtuviera lo que quería, aún si eso significaba asesinar a Katherine en el camino- la culpa cruza por sus ojos- no era mi intención matarla. Lo juro. Solo quería herirla y que la pelea terminara de una vez por todas-

-Se nos salió de control toda la situación- escucho a mi esposa hablar- juramos que no diríamos nada, ni siquiera a ti- su mirada se posa en otro lado- preferimos dar a entender que ella se había fugado y abandonado a Renzo a su suerte, de no haber hecho lo que hicimos...-

-La historia sería otra- concluyo yo- ¿cuándo pasó todo esto?-

La culpa y el dolor cruza los ojos de Katherine, entonces temo lo que vaya a responder.

-Una semana antes de que me fuera-

Es como si un balde de agua fría hubiera caído sobre mi cuerpo y mi pecho siente la misma punzada de dolor y traición como cuando comprendí que ella me había abandonado, que se había ido. Antes de que pueda decir algo, el médico entra con un par de enfermeras.

-Buenos días señora Becker, ¿cómo se siente?-

-Un poco cansada y no siento la espalda-

El médico empieza a hacer sus chequeos de rutina, tanto Sam y yo salimos de la habitación, ella se siente en una de las sillas que hay en el pasillo. Camino en dirección al elevador para ir a la salida, la voz de Sam me detiene un momento.