Me voy [ᴇᴅsᴇʀ]

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Eda ya no podía más, estaba cansada de luchar contra la mente de Serkan, estaba cansada de soportar los constantes ataques de Selin y sobre todo, estaba cansada de fingir un compromiso, le dolía. Por más falsos que fueran los preparativos, no podía evitar recordar cuando había pasado por todo eso semanas atrás, pero con Serkan a su lado, preparando lo que nunca pudieron llegar a concluir, su boda.

Eda Bolat.

Y luego de pensar y pensar sin poder conciliar el sueño durante varias noches seguidas, había tomado una decisión. Iba a renunciar a art life y desaparecer de la vida de Serkan Bolat.

Una parte de ella sentía que estaba siendo impulsiva, después de todo no era llegar y renunciar, era dueña de casi la mitad de la empresa debido a las acciones que le había regalado su abuela antes de irse y no podía llegar y desaparecer... decisiones que tomar, proyectos que terminar, no era llegar y abandonar todo, pero ya no podía más y estaba decidida a buscar a alguien de confianza que pudiera tomar su lugar y hacerse cargo de su parte de la empresa o simplemente dejarle todo a Serkan e irse.

Todo aquel que la conocia sabía que Eda Yildiz no se rendía, que luchaba hasta el final por lo que quería, siempre se había caracterizado por su fortaleza, un alma guerrera que daba la pelea hasta el final, pero ya no podía más, se sentía sola, había perdido al amor de su vida y verlo todos los días era una tortura, tener que fingir que no le importaba que llegara de la mano de otra la estaba matando.

Estaba enamorada de Serkan Bolat.

Lo echaba de menos, anhelaba poder abrazarlo y quedarse en sus brazos durante horas, sentir su aroma, su calor, su amor ... Mirar las estrellas, pasear con Sirius, incluso trabajar, pero juntos, siempre juntos, como lo habían estado desde que se habían conocido, incluso cuando fingían estar comprometidos o cuando su abuela insistía en separarlos, siempre se las arreglaban para estar alrededor del otro, porque eran dos piezas de un rompecabezas hechas para estar juntas, lo extrañaba, siempre lo iba a extrañar.

Pero ahora no encajaban.
Se tenía que ir.

-Buenos días, Eda. - la saludo Selin con una falsa sonrisa cuando la vio entrar a la cafetería.

-¿Sabes que Serkan no está aquí?, no es necesaria tu falsa cortesía. - respondió cansada de la situación.

-Solo estaba tratando de ser amable.

-Hay cosas que salen de manera natural. - le dijo con un toque de humor en su voz. - No es tu caso evidentemente.

-Eda..

-De todas maneras no es necesario todo esto. - dijo apuntando a ambas con el dedo. - En un par de día ya no me verás más por aquí.

-¿A que te refieres?. - le pregunto sin entender.

-Ganaste. - dijo mirándola fijamente a los ojos. - Me rindo, estoy cansada de esta situación. Me voy de art life y de la vida Serkan, que es lo que realmente a ti te importa, ganaste. - le volvió a decir antes de tomar su taza de café y salir de la cafetería sin esperar respuesta.

Selin se había quedado sin palabras, sabía que Eda no era una persona que se rendía con facilidad, desde que había llegado a la vida de todos la vio luchar por lo que creía o quería sin pensarlo y el hecho de que fuera capaz de renunciar a Serkan y a su trabajo, la sorprendió.

Eda Yildiz jamás dejaba de sorprender.

🔸🔸🔸

Me voy de art life y de la vida de Serkan.

Esa era la frase que Serkan no podía sacar de su cabeza desde que había escuchado la conversación de Eda y Selin esa mañana, ni siquiera había sido capaz de mirarla cuando entró brevemente a la oficina que compartían a buscar su computadora y los documentos del proyecto en el que trabajaba, tenía miedo de mostrar más de lo que quería, tenía miedo de que ella pudiera ver el miedo de perderla en sus ojos o las ganas que tenía de estrecharla entre sus brazos cada vez que veía el dolor en sus ojos.

ᴏɴᴇ sʜᴏᴛ ღ [ᴇᴅsᴇʀ/ʜᴀɴᴋᴇʀ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora