Peri kızı, beni affedebilir misin? [ᴇᴅsᴇʀ]

5.1K 234 22
                                    

Peri kızı, beni affedebilir misin?: Mi hada, puedes perdonarme?


Eran pasadas las 10 de la noche y Serkan aún estaba en art life, llevaba más de una hora sentado en su silla en la sala de reuniones que ahora sentía como su oficina sin poder concentrase en los planos, miro nuevamente a la sala común vacía y fijo su vista en la silla de ella, su hada, Eda estaba enojada con él y sabía que tenia razón, había descargado toda su rabia contra ella sin motivo alguno y lo que más le molestaba, era que Selin había logrado que lo que quería, hacerlos pelear.

Serkan no era tonto, sabía que sus constantes cuestionamienros eran su forma de hacerlo enojar, Selin sabía que odiaba que lo cuestionaran o pusieran en duda su profesionalismo, por lo que durante esa tarde había estado presionando tanto sus botones con tanta insistencia que había terminado desquitandose con quien menos se lo merecía, su novia y peor aún, frente a la rubia que disfrutaba todo con satisfacción.

Eda minutos antes de irse a su casa había entrado a la oficina para ofrecerle algo de comer o alguna forma de ayudarlo, había visto la tensión en el durante todo el día y no había querido interferir hasta ese momento, ¿Y que había hecho él?, le había gritado que no tenía tiempo para perderle en estupideces y que lo dejara en paz.

En el mismo momento en que esas palabras salieron de su boca, se había arrepentido, vio como los ojos de Eda se llenaron de lágrimas antes de darse media vuelta y salir de la sala de reuniones sin decir una palabra, Engin lo miró con reproche en cuando vio a Eda salir rápidamente de la sala común en dirección a la puerta.

-No se que haces aun ahí. - le había dicho Engin acercándose a el para entregarle los papeles que tenia que firmar.

-No se a que te refieres. - respondió abriendo la carpeta para comenzar a firmarlos.

Engin dirigió su mirada brevemente a la rubia sentada en una de las sillas y negó con la cabeza antes de responderle. - Ella no se merecía que le gritaras, hermano.

Serkan dirigió su mirada a su puesto en la sala común y suspiro. - Lo se.

-Entonces deberías disculparte. - le dijo tomando los papales antes de salir sin esperar respuesta.

Pero no sabía cómo hacerlo, desde el momento en la que vio salir había querido correr tras ella, pero tenía su mente en blanco, nunca sabía cómo realmente disculparse y no quería seguir diciendo cosas que no sentía y que su chica se enojara aún más, tomó su celular con la esperanza de que Eda hubiese respondido alguno de sus mensajes y vio la foto que tenía como fondo de pantalla, estaban acostados en el césped con una enorme sonrisa en el rostro, con un Sirius entre ambos, eran una familia y una idea cruzó por su mente, ordenó las cosas sobre su escritorio, tomó sus llaves, su teléfono y fue en busca del perdón de su hada.

✰ ✰ ✰

El teléfono de Eda volvió a sonar esa noche, había estado ignorando todos los mensajes que él le había enviado, no solo se había desquitado con ella, sino que lo había hecho frente a esa rubia de ojos gigantes que no hacía más que intentar separarlos.

-¿No vas a contestar?. - le preguntó su amiga sentándose a su lado con un gran plato de palomitas.

-No. - respondió segura.

-¿Y si corta?. - le preguntó tratando de persuadir a su amiga para que respondiera el teléfono y perdonara a su cuñado.

-Que lo haga. - siguió diciendo tajantemente.

ᴏɴᴇ sʜᴏᴛ ღ [ᴇᴅsᴇʀ/ʜᴀɴᴋᴇʀ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora