IX

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Hace 1 año...

Los trabajos a medio tiempo cesaron, y no era porque Jun rechazaba, sino la situación complicada del mundo.

Quien pensaría que aquel virus llegara a su país, incluso se pensó que solo el virus residiría en China, que no emigraría o expandiera a otras ciudades o países.

Los appas de Jun habían enfermado con aquel virus, y a pesar de que los señores Kim los alejara por el temor... Jun no lo hizo, eso sí, sus appas solo lo dejaban entrar si entraba con toda la bioseguridad.

Al inicio del inicio de la enfermedad que luego se convirtió en pandemia, no se sabía nada de la enfermedad, y los médicos de aquel centro, en especial el dr Yu dijo que lo mejor era no arriesgar a otros médicos que no trabajan con contrato, ya que luego eran ellos mismos quienes pagaban su tratamiento y no el mismo nosocomio.

La situación cada día era peor.

Jun hizo papel de appa y omma, al igual que ayudar económicamente con la atención de la farmacia de su omma, con suerte su hermano Ki Bum lo ayudaba.

Hasta que los señores Kim fueron mejorando, y solo le quedaron las secuelas de dicha enfermedad, los tratamientos solo se basaron en rumores, al igual que todos.

La situación poblacional de la enfermedad fue mejorando de a poco, pero no se solucionó todo, pero al menos Jun tenia a sus dos appas y no como otras familias que habían perdido familiares y peor cuando no podían ser velados.

Al poco tiempo Jun deicidio abrir un consultorio propio en su propia casa y equipado con la bioseguridad correspondiente, para distraerse y no olvidar, sus appas apoyaron su idea. Le iba bien, le gustaba su nuevo emprendimiento, aunque no era tan transcurrido, pero cualquier negocio se tarda para ser prospero.

Entonces Jun recibió una llamada de un numero extraño, incluso frunció las cejas, era imagen de una persona conocida.

— Buenos días — saludo Jun con bastante respeto— dra.

— Buenos días doctora— dijo la voz del otro lado del aparato, con mucho carisma— le habla la alcaldesa.

Jun no sabía cómo reaccionar, más que para dar otras palabras algo estúpidas.

— ¿Cómo esta alcaldesa? — se golpeó mentalmente la cabeza.

— Bien. Yo lo llamaba para...

— Que bien dra— responde Jun con una sonrisa.

La alcaldesa de la pequeña población era una bioquímica y por esa razón se le decía también doctora.

— Gracias— dijo la alcaldesa y continúo hablando— lo llamaba para pedirle sus servicios como médico.

— ¿Ah? — dijo Jun con asombro, no podía creer lo que oyó.

¿En serio la alcaldesa lo buscaba para que trabaje con ella, en el centro de salud que ella maneja?

— Lo necesitamos con urgencia— se oyó preocupada— pasa que nuestro único doctor doncel esta con baja médica por maternidad adelantada porque hubo riesgo de un parto prematuro y peor aún que volvió a salir positivo.

— Qué pena— dijo Jun con pena. Aquel dr siempre lo había ayudado.

— Si — dijo tristemente la alcaldesa— pero tengo confianza de que saldrá de esto.

— Yo digo que si— dijo con bastante esperanza.

— ¿Y qué dice? — pregunto la alcaldesa— enserio que lo necesitamos.

Jun callo por algunos segundos, pensando... era ¿preparar su ataúd o no...?

— Le haremos contrato por tres meses y luego el contrato anual— dio aquella opción la alcaldesa.

Jun aun lo pensaba, y se dijo a sí mismo:

Soy médico, es mi vocación.

— Acepto — dijo con confianza— he de ayudar.

— Perfecto doctor— escucho la alegría de la alcaldesa— será un gusto tenerlo por la alcaldía para lo de su contrato.

— ¿Cuándo?

— Mañana inicia, y el contrato lo tendré mañana, lo llamare cuando esté listo y así firma.

— Okey.

— Gracias — dijo con mucho agradecimiento.

— A usted alcaldesa— dijo Jun— por confiar en mí.

— A usted por ayudar al pueblo y al dr.

Al final ambos se despidieron con muchos agradecimientos... sin saber Jun que aquello seria uno de los inicios del todo su cambio de vida.

Al día siguiente fue un día duro para Jun, y algo cansador, y nuevamente el dr Yu le pasaba el turno, quien le dio todas las medidas de bioseguridad.

Conoció a nuevo personal, pues hubo varios cambios con lo de la pandemia.

— Los casos redujeron, pero lo mejor es prevenir, siempre vente con una bata quirúrgica— recomendó el dr Yu a Jun.

— Okis dr— dijo Jun.

— Ven acá que te daré uno— dijo el dr Yu.

Y fue a sala de parto, incluso le dijo los cambios que hubo en el centro de salud y el cómo dividieron el Centro de Salud.

Zona FLU donde van todas las consultas e internaciones con enfermedades respiratorias y con fiebre, y la otra zona normal, que era el lugar donde le toco hacer turno de 12 horas.

— Cualquier duda me llamas o preguntas por teléfono, yo siempre te orientare— le dijo el dr Yu y Jun agradeció.

Después de ello, no hubo pendientes. Ni un internado, al igual que posible parto.

Jun atendió lento ese día mientras se ambientaba, con suerte solo le vino emergencias de solamente cólicos, pero sin complicaciones... lo que le era un poco más complicado era atender con barbijo.

Toda esa semana le fue bien a Jun, según él, porque no le toco referir a algún paciente a otro lugar, incluso se dijo salvarse de atender un parto... hasta que llego a fin de mes, en el que no se pudo salvar y le toco atender su primer parto solo y sin supervisión, porque ahora estaba como médico y ya no como interno o prácticamente, más bien tenía que dar orientación.

Al primer bebe que agarro fue a una linda niña... una sana y fuerte, la madre fue muy colaboradora y valiente. La madre era la señora de fichaje y ahora amiga de Jun.

Con suerte esos meses aún no se topó con el dr Jung Min, hasta que un día fue inevitable... eran colegas, en algún momento iba a tener que hablar con él, ya sea para pasar turno o para las reuniones que se hacían entre todos los médicos para hablar de varios temas de atención medica y rol de turnos.

¿Amantes? ¡No! [Minjun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora