Capítulo 19

84 15 71
                                    

Clío

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Clío

Desde lejos veo como Atlas le susurra algo a Sol y ella asiente, ambos comparten cierta complicidad entre ellos. Desde que me levanté han estado ocupados en algo que no tengo la mínima idea de lo que pueda llegar a ser.

Cuando desperté ambos estaban fuera de la habitación y la Señora Marta salió media hora después diciendo que debía de resolver ciertos pendientes, no se fue sin darle una mirada cómplice a Atlas.

Me encuentro frustrada ya que no quieren decirme que sucede. Sé que no es nada malo, pero mi vena curiosa no desaparece. Cada vez que le pregunto a Atlas que sucede, él se pone nervioso y con un beso me dice que no pasa nada, para luego huir de mi vista.

Desde hace unos días me sacaron los puntos y honestamente me siento bastante bien, he regresado a mi rutina diaria, sin olvidar la crema que el médico me mandó. Dos días después de eso, decidimos que lo mejor sería "explicarle" a Sol que mamá y Atlas se encontraban juntos, ya que por accidente nos vio basándonos y preguntó que qué era lo que hacíamos.

Con Atlas nos encontramos preparando la cena en la cocina y Sol y la Señora Marta están en la sala viendo una película de dragones.

—¿Entonces que te dijo la directora? — le pregunto y veo como saca los platos para cenar. Atlas se queda unos días con nosotras y otros días va a su casa.

La Señora Marta ama que él esté aquí, porque eso significa que Atlas cocinará y déjenme decirles que lo hace muy bien. Él parece encantado con cocinar para nosotras ya que, según él, cocinar para una sola persona no es tan entretenido.

—Le expliqué todo lo que estaba sucediendo y ella fue bastante comprensiva— comienza a narrar él— Dijo que como solo nos falta un poco más de un semestre para graduar nos. Podíamos ir solo dos o tres veces por semana y que solo para las clases principales, sin embargo, debemos de crear una maqueta enorme de un proyecto que nosotros deseemos en compensación por lo demás.

—¿Individualmente? — pregunto ya que crear una maqueta no es nada fácil y más si es como él la describe.

—No, la podemos hacer juntos— dice y asiento más tranquila— en la Universidad estamos un poco más seguros, así que simplemente no debemos de separarnos y todo estará bien— dice recostando su espalda en la orilla de la encimera.

—Está bien y ¿qué haremos con el transporte? Ya que no estarás todos los días aquí como para que podamos compartir un taxi.

—Le pedí a un amigo que nos prestara su auto en lo que terminamos la universidad— responde y asiento.

Aproximadamente nos faltan cinco meses o menos para poder acabar la universidad completamente.

Me acerco a abrazarlo porque él siempre tiene una solución a todo lo que sucede, subo mi mirada a la suya y beso suavemente sus labios, ambos nos mantenemos así por unos cuantos minutos, hasta que una suave voz nos hace separarnos rápidamente.

Entre Dos SolesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora