Narra Atlas
Observo a Clío acostada en la camilla de la habitación blanca de otra de las propiedades de los hermanos Kainz. Por mi cabeza pasa esporádicamente la pregunta de cuánto dinero tienen, no es normal que tengan tantas propiedades a su disposición.
Regresando a Clío...
El segundo en que llegamos aquí, la bajamos de emergencia e inmediatamente comenzaron a atenderla.
Veo todas las vendas que tiene en el cuerpo y la hinchazón tanto de su rostro como de sus brazos. Tuvieron que suturarla en diferentes heridas y su brazo se encuentra en muy mal estado, lo tiene de un color verde con morado y le han tenido que hacer una serie de procedimientos para poder estabilizarla.
Actualmente no ha despertado y se encuentra con oxígeno; por la pérdida de sangre tuvieron que transferirle de la mía y de la de Hazel, que son las compatibles.
Ha convulsionado dos veces y suele gritar de la nada, aunque no esté despierta. Un sentimiento de impotencia se instala en mi pecho al saber que nada de lo que se logró hoy en realidad soluciona la situación.
Clío no solo está lastimada físicamente, sino que saber cómo se encontrará mentalmente cuando despierte. No puedo evitar el temor de que no me perdone haberla dejado sola por tanto tiempo, aunque no podría culparla si se encuentra decepcionada o molesta conmigo. Pero actualmente lo único que necesito es que se recupere y que abra sus ojos.
En mis manos se encuentra la cadena que le di, completamente limpia de nuevo. Me levanto y la coloco en la mesa a un lado de ella. Sol ya sabe que Clío se encuentra aquí y ha llorado a mares pidiendo verla, pero no quiero que ella vea a su mamá en tal estado, Clío no querría eso por mucho que se extrañen.
—Vamos mi vida, despierta— susurro sobre la frente de Clío con los ojos cerrados debido a la calma que me transmite su cercanía— Sol se muere por estar contigo y yo necesito verte a los ojos— le digo besando su mejilla repetidas veces.
Tomo mi teléfono para volver a ver si se ha logrado encontrar información sobre los padres de Clío, pero tengo entendido que han salido del país, ya que la última vez que fueron captados por cámaras de seguridad fue en el aeropuerto.
Me pregunto si Clío ya sabe lo que pasó con la Señora Marta, pero si es así, puedo dar por seguro que no querrá dejar las cosas así.
...
Un día después...
Muevo mi pierna inconscientemente debido a que se supone que Clío ya tuvo que haber recuperado la consciencia, pero aún no lo ha hecho.
— ¿En cuánto tiempo cree que despertará? — pregunto por quinta vez y la enfermera que se encuentra poniendo algo en la intravenosa de Clío voltea a verme cuando vuelve a escuchar lo que le llevo preguntando tantas veces.
ESTÁS LEYENDO
Entre Dos Soles
Romance[EN EDICIÓN] Atlas Traid conocía el significado de vivir el dolor en carne propia. Llevaba años escondido en un tormento repleto de oscuridad, soledad y mucho dolor. La vida no lo había tratado como esperaba, más bien lo había dejado abandonado a su...