Cuando recuerdas que ya se conocían.

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Nathan

— parece que tu y Victor son muy cercanos 

Dije de pronto cuando llegamos al departamento, no encontraba una mejor forma de iniciar la conversación que quería tener con Violet.  

— ¿Te parece? - me pregunta Violet. 

— Bueno, cuando salieron del quirófano las enfermeras no paraban de hablar de su sincronía y lo genial que fue verlos trabajar juntos. 

— ah, eso - dice de pronto Violet pensando sobre lo que acabo de decir - Creo que es obvio, después de todo Víctor fue el que me enseño todo lo que se de métodos Quirúrgicos 

—¿de verdad? 

— Si - responde ella sonriendo — si soy sincera creo que fue gracias a él que decidí estudiar medicina 

— ¿En serio? 

Al parecer Víctor es un hombre que ha marcado mucho la vida de Violet. 

— Estábamos por decidir que carrera estudiar y yo aun no sabia que hacer, pero después de conocer a Víctor la decisión fue fácil de tomar, mis padres estuvieron agradecidos con el mucho tiempo. 

En cuando dice eso, no puedo evitar poner mala cara. 

— ¿Qué pasa? - pregunta Violet. 

él conoció a tus padres, yo no tuve ese honor. Si te soy franco estoy un poco celoso

— Se conocieron - me dice de pronto ella 

— ¿Que?

— Eras un dolor de cabeza para mi ¿Recuerdas?  es obvio que le hablaba a mis padres sobre ti. 

— Entonces ¿se quedaron con una mala impresión mía? - ojala no hubiera sido así con Violet al principio 

— De hecho no - dice ella sorprendiéndome - un día mi padre se lastimo y llego al hospital, me buscaba a mi, pero tu fuiste quien lo atendió 

— ¿De verdad?

— si

— ¿y que tal me fue? 

— Mi madre dijo que solo te vio por unos minutos pero que le pareciste encantador, pero mi padre.... a partir de ese día se convirtió en tu defensor numero uno  

Es entonces que lo recuerdo, intento mantener la calma pero la vergüenza puede mas. 

— ¿Nathan? ¿estas bien? ¿Por qué te ruborizaste? - me pregunta extrañada 

— Nada — miento — no es nada... solo recordé algo 

Lo que recordé fue aquella tarde cuando llego un hombre con la mano herida, acompañado de una mujer que parecía preocupada. 

— ¿puedo ayudarlo?

— no, bueno si, es decir... - la mujer parecía preocupada. 

—¿Qué le sucedió? - pregunte mirando su mano cubierta por una toalla y cubierta de sangre

— Estaba haciendo una reparación en casa y...

— Venga, déjeme ayudarlo

— pero aun no tenemos la hoja de atención - respondió la mujer preocupada. 

— descuide, lo importante es atender a su esposo 

Por suerte una enfermera pasaba en ese momento. 

— podría ayudarme por favor 

— Clado doctor ¿Qué necesita?

— lleva a esta señora a la ventanilla para que de los datos de su paciente, mientras tanto yo atenderé al señor 

— gracias, muchas gracias 

— mientras tanto yo y su esposo iremos a esa sala y haremos la curación. 

Después de contar con el material necesario comencé a hacer la curación, mientras yo trabajaba en hombre permanecía en silencio. De pronto un medico entró en la sala

— Benet, ¿has visto a Violet?

— La enviaron a un traslado, regresara como en dos horas, lo siento tendrás que arreglártelas sin ella.

En cuanto el medico se marcho el hombre pregunto.

— ¿esa doctora es buena?

— ¿Violet? - pregunte mientras no podía evitar sonreír — es buena... de hecho es una de nuestras mejores residentes. Ágil, hábil, paciente, inteligente, amable, nunca se niega a ayudar y aunque este agotada ella siempre tiene una sonrisa gentil para todos.

— Parece que le agrada esa doctora

— Mas de lo que debería - Confieso sin dejar de mover mis manos 

— ¿le gusta?

— como no se imagina - digo intentando mantenerme tranquilo aunque no lo logre por completo.

— ¿y por que no se lo dice?

— porque soy un cobarde - digo mientras sonrío — y porque necesito ser un hombre mejor antes de decirle mis sentimientos, quizás entonces ella me odie menos y me de una oportunidad.

Cuando termine de curarlo el hombre me dio la mano y me la apretó con fuerza.

— Creí que eras una mala persona, pero a partir de ahora yo te apoyare

— ¿gra...cias? - digo confuso tras soltar su mano.

Nunca hubiera imaginado que confesé mis sentimientos por Violet a su padre antes que a ella.  

— no cabe duda que nuestras vidas se cruzan de maneras extrañas 

Violet me mira confundida, yo solo sonrió, acaricio su mejilla y la beso. 


Las mil y un cosas que no te dijeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora