Capítulo 3

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Juliana estaba asustada ya había oscurecido y aún no daba con Valentina, Argos seguía corriendo como si supiera a dónde ir, pero la noche ya caía. Lupita y Macario despidieron a los invitados alegando que la feliz pareja se había escapado hace unos minutos, los hombres sonrieron mientras las mujeres se notaron asquiadas por el comentario pero igual todos se fueron.

—¿Qué demonios habrá pasado? — dijo Macario molesto y preocupado.

No lo sé pero la cara de miedo que tenía ese hombre al vernos no me gustó nada — dijo Lupita pensativa — además había restos del vestido de Valentina en el suelo...

—Piensas que Fernando... — dijo Santiago.

—No lo sé pero eso explicaría muchas cosas...

—Ese maldito bastardo — dijo Macario apretando los puños — si llego a lastimar a Valentina...

Mientras los padres y el abuelo de Juliana trataban de entender lo que había pasado, Juliana se detuvo en el cementerio, a lo lejos vio a shadow "Gracias a Dios" dijo suspirando, se bajó del caballo y tomó la frazada, se adentró y sin saber cómo sus pasos sabían a dónde ir. Llegó a la tumba de León, vió a valentina hecha un ovillo llorando pudo escuchar las palabras.

"Llévame contigo papá por favor llévame"

Eso le encogió el corazón temió que ese bastardo le hubiera desgraciado la vida. Juliana sentía un mar de emociones arremolinándose en todos su ser, desde el odio, la rabia, pena, dolor, miedo, compasión, frustración por no haber llegado antes, con mucho cuidado y sigilo se acercó hasta Valentina se hincó y colocó la frazada que llevó consigo.

—Shhh tranquila — dijo en susurro al sentir como se tensaba — no te haré daño Valentina lo juro — dijo con mucha suavidad — recuerdas lo que dije aquel día. " Estoy segura que tu papi siempre las cuidara y si no puede lo haré yo" — Valentina asistió _ ahora delante de él vuelvo a renovar mi promesa — dejó sin perder el tono suave — juro que te cuidaré con mi vida Val, no dejaré que ese maldito bastardo vuelva a tocarte nunca lo juro —al decir eso se acostó junto a ella y la abrazó con extremada delicadeza.

—Sólo quiero irme con mi papá — dijo llorando, se giró hacia Juliana y la abrazo, esto lo sorprendió pero la atrajo hacia sí y la abrazó con aquel abrazo protector que sabía que necesitaba.

—¿Y dejar sola a tu madre? — dijo Juliana en tono suave — ¿Y me dejaras sola a mí? No lo permitiré — dijo besándole la frente — aún tenemos muchas cosas que vivieron juntas no permitiré que me dejes así cómo así.

Juliana siguió consolandola diciéndole que siempre la cuidaría que todo estaría bien, se quedó dormida la cargó y la  encamino hasta los caballos, con cuidado la montó sobre shadow para luego subirse ella también, Argos se acercó y tomó sus riendas y se encaminó a su hacienda, Valentina despertó algo asustada cuando estaban por llegar, pero se abrazó a Juliana, su mente estaba en blanco era como una pequeña niña desamparada y desprotegida, al verlas llegar Lupita corrió hasta ellas al igual que Macario y Santiago.

—¿Cómo está? — preguntó Lupita preocupada.

—Hay que llevarla adentro — dijo Juliana al bajarse y sostenerla.

—Déjame y te ayudo — dijo Macario, pero cuando trató de tocar a Valentina casi se cae de la yegua para que no la tocará — está bien tranquila — dijo el endiendo el rechazo.

—Yo la llevaré — dijo Juliana a su padre — Val ven vamos adentro — Valentina no dijo nada sólo se dejó caer en los brazos de Juliana — todo estará bien.

Juliana al tenerla en sus brazos su madre la ayudó tapando a valentina que se estremeció al sentir que la tocaban, todos sabían que estaba asustada y lo mejor era no alterarla así que Lupita se alejó un poco. Juliana la metió dentro de la casa y la subió a su habitación con algo de trabajo ya que la rubia era unos centímetros más alta que ella, al llegar Macario le abrió la puerta y Lupita se apresuró a descubrir la cama, Juliana la metió en la cama y la ropa con mucho cuidado, le pasó la mano por la frente y función del ceño.

Me enamore de mi esposa - Adapt Juliantina G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora