Me enamore de mi esposa - Adapt Juliantina G!P

Capítulo 17

Juliana estuvo cabalgando un rato sintiendo un poco de dolor en sus costados, pero necesitaba calmarse ese encuentro con Sofía la pusieron en un estado que ni ella entendía, por un momento se sintió excitada por la castaña pero al recordar a Valentina se maldijo por excitarse, se sintió frustrada de nuevo pero la rabia que sentía era mayor no solo con Sofia sino con ella, sus creencias y educación casi los había mandado al diablo, pero sus masturbaciones no eran suficiente.

Pensó en Valentina en el daño que le ocasionaría si hubiera sucumbido ante Sofía, se notaba que lo único que quería era fastidiar a Valentina y si ella llegara a caer en sus redes lo lograría. Recordó aquellas palabras que le dijo una vez en el cementerio. Estoy segura que tu papi siempre las cuidara y si no puede lo haré yo." Vaya manera de cuidarla pensó engañándola con su hermanastra, se quedó pensativa en aquel lago viendo sus aguas cristalinas y hermoso prado.

-¿Cómo que se fue en Argos? - pregunto Valentina molesta a Sasha. Desde que había llegado la busco por toda la casa, pudo sentir la mirada de furia de Sofía al entrar pero la ignoró y siguió en su búsqueda. Al encontrar a Sasha este le dijo que había ido a montar.

-Solo la vi cuando estaba sobre él - dijo un poco asustado al verla molesta.

-¿Por qué dejaste que se fuera? - pasó sus manos por su cara en clara señal de molestia, Lucas escucho la conversación o mejor dicho las preguntas molestas de Valentina.

-¿Cómo la iba a detener? - Pregunto Sasha serio - cuando la iba a llamar ya iba muy lejos.

-Lo siento - dijo Valentina suspirando - es que aún no está recuperada y eso le va a ocasionar daños.

-Lo más seguro es que quiso tomar un poco de aire, la pobre tiene horas encerrada, lo más seguro es que estaba cansada de ver las paredes de su habitación - Sasha sonrió.

Valentina quedo un poco más tranquila pero se sentía un poco intranquila sin saber por qué. Lucas corrió a la casa pero al ver lo molesta que estaba su mujer prefirió no preguntar, ahora su miedo era real los echarían de allí estarían en la calle. Salió y espero que Juliana llegara, solo esperaba lograr hacer algo para que no los corrieran. Cerca de las 4 de la tarde Juliana llegó al verla Lucas corrió hasta ella antes que lo hiciera Valentina.

-¿Patrona podemos hablar? - preguntó un poco nervioso.

-Habla - dijo Juliana al bajarse del caballo.

-Solo quería darle las gracias por permitirnos quedar - dijo mostrándose de manera patética - es que mi papá no puede tenernos y el padre de Sofía no quiere ni verme - bajó la mirada al suelo - aunque aceptaran que ella fuera a vivir con ellos ella no lo permitiría - alzo la mirada y Juliana pudo ver que estaba a punto de llorar - ella la ha pasado muy mal desde que nos fuimos siempre viviendo en un cuarto sumamente pequeños... Lucas comenzó a narrarle una historia de amor y dolor en donde menciono una habitación minúscula. El pasar hambre, incluso que el techo goteaba al llover, muchos insectos rastreros y roedores. La verdad invento la peor vecindad de todas, solo quería inspirarle lastima - es por eso que quería agradecerle por dejar que nos quedáramos aquí.

-Solo tienen menos de dos meses - dijo Juliana muy seria - pero si fuera antes sería mejor - dijo al dejarlo solo. Lucas la maldijo por debajito pero esperaba que con eso les diera tiempo de cumplir con el plan de su mujer o de lo contrario estarían en la calle.

Te arrepentirás de humillarnos Valdés - dijo apretando sus puños con fuerza, antes no quería que hicieran nada pero ahora lo necesitaba para vengarse por esas palabras.

Julia a reflexiono un poco y gracias a lo que Lucas le comento logro entender. Sofía solo quería sacarle dinero eso la hizo volver a molestarse consigo misma. Casi cae por una sanguijuela trepadora pero no se lo permitiría tenía a su esposa que sería su mujer, no necesitaba a nadie más lo había decidido en ese momento no permitir que la zorra que estaba en su casa la separara de su rubia. Sonrió al pensar en ella como suya pero sus pensamientos se evaporaron al sentir como la golpeaban en el pecho.